Sideral [Fanfiction EXO- ChanSoo, KaiSoo]

PARTE UNO: MISIÓN T-717.

Mira para arriba, miro por la noche,

los planetas se mueven a la velocidad de la luz.

Sube, arriba en los árboles.

Cada oportunidad que tienes es una oportunidad que aprovechar.

Coldplay, speed of sound

     Todo estaba diseñado en tonos grisáceos y blancos como muestra de una avanzada tecnología, los edificios de diseño futurista eran vastos y altos, las calles se vislumbraban amplias y limpias, los vehículos volaban a unos cuantos centímetros del pavimento. Era un planeta pequeño y estructurado, todo estaba bajo los más estrictos controles, lo que provocaba que normalmente las cosas funcionaban.

​     Ese día, los habitantes caminaban a paso seguro con ritmo militarizado, uno al lado del otro, con la vista en frente, pensando en sus propias responsabilidades. Eran seres tranquilos, calculadores y estrategas. Generalmente vestían de blanco, pero en esa ocasión el atuendo de todos era negro.

​     Poseían los más bajos índices de violencia, enfermedad y natalidad, no se habían reproducido demasiado en los últimos años más que para que su sociedad continuara siendo funcional. Su género era indiferenciado, machos y hembras vestían igual y hacían las mismas labores, incluso ambas partes eran capaces de concebir (aunque por métodos diferentes, necesitando los machos de tratamientos médicos específicos para llevarlo a cabo).

     Quienes eran menores de edad no iban a la escuela sino que se internaban en pequeñas empresas donde se les educaba en sus funciones y aprendían todas aquellas cosas que eran necesarias para sobrevivir, en tanto se alimentaban sus potencialidades individuales que sirvieran de apoyo al planeta.

​     Esa mañana la mayoría de la población tenía como destino un mismo lugar: la enorme plaza al centro metropolita. Nadie chocaba entre sí, lo consideraban irrespetuoso, tampoco sudaban. Por lo general, mantenían su semblante serio, pero esa vez había un tinte de amargura en sus expresiones. Todos estaban en silencio, la sensación de luto era palpable.

​     Kris los observaba desde su impoluta oficina, como presidente del planeta G-17 tenía acceso y control sobre todo y sobre todos en ese lugar. Su despacho estaba lleno de cámaras y pantallas con conexión a cualquier sitio que existiera allí. Entre sus archivos estaba la información confidencial de cada ser vivo que habitaba en su pequeño mundo, así como datos de los planetas vecinos.

​     Kris Puso los codos sobre la mesa, sus dedos se entrelazaron a la altura de su mentón. Sus ojos estaban fijos en la pantalla que daba a la plaza donde lo esperaban al menos mil personas, todos vestían el mismo traje oscuro, todos tenían el mismo semblante, nadie hablaba, eran un montón de seres vivos en perfecto orden y silencio. Un suspiro podría haberse escuchado a kilómetros de distancia.