I'm just a boy

WAY ARE YOU LIKE THIS?

Espero y disfruten de esta historia chota, cualquier error ortográfico o incoherencia mil perdones.

Gracias por el apoyo :]

Severus nunca fue alguien de contacto, sentimental o siquiera apático. En su niñez aquello faltó y con eso le dejo huir de los problemas, si a alguien le pasaba algo? No era su problema. Hizo sentir mal a alguien? Es la verdad y nada más que eso.

Eso mismo lo trae a dónde está, un círculo vicioso en el que busca amor pero el mismo se aleja de aquello que tanto anhelo desde que tenía sentido de razón, el temer al rechazo y humillación, por eso mismo fue duro consigo y trato de sacar provecho de todo y de todos.

Más en su adolescencia se enamoró y el solo se encerró en la mentalidad de que no merecía dicha atención, los cuidados de Lily como de Lupin? No los merecía, no merecía a nadie cuando después de sexto año llamo sangre sucia a su amiga de la infancia que le saco del infierno que era aquella cabaña que nunca pudo llamar hogar. Y Lupin, fue el primer gryffindor que le tendió la mano y le ayudo cuando más le necesitaba aquella noche en los baños y los siguientes días en el que le ayudo a no caer o golpearse con objetos cuando tenía unos de los tantos episodios que a tenido a lo largo de su vida.

Se arrepentía? Claro que lo hacía, pero como el buen cobarde y mala persona que era no quiso, no quiere atar a Lupin a la vida de mierda que se creo, no quería que corriera peligro al estar con un maldito mortifago y seguidor del señor oscuro. Era una vergüenza de persona, Lupin no merecía eso.

Trato de localizar a Remus, y lo hizo, más se retracto de solo saberlo. No se atreve, aquella noche del baile le dio tanto pánico al escuchar las palabras de Lupin hacia el, eso hizo saltar y sonar sus alarmas. Y lo alejo, lo más que pudo para irse ,sin mirar atrás a la posible primera y única oportunidad de tener a alguien a su lado.

Pero su estupidez adolescente y dolida quería más, juntándose con los Malfoy y aceptando su ayuda a cambio de cosas, terminando como un mortifago ante tal trato.

Hasta el sabía que tenía una actitud de mierda, siempre que le causaban daño el no lo reconocía y se lo guardaba, y si la persona quería arreglarlo? No merecían su perdón. Más en realidad nunca los dejaba hablar o explicarse, siempre fue resentido y su carácter explosivo casi psicótico no le favorecía.

Simplemente... Era el.

Aquella vez se despertó, tenía un presentimiento. Hoy caería la luna llena en unas horas, se levantó de su cama y tomo su túnica, se había desmayado hace unos minutos pero por cansancio se quedó dormido.

Sin más y antes de salir de sus aposentos tomo un vial de líquido lila luminoso de su mesa y cerró la puerta silenciosamente.

Había pasado ya un año, Lupin había mantenido su empleo como maestro de defensa y si lo admitía lo hacía bastante bien.

Ambos no se hablaban más de lo necesario, no hace mucho recibió la orden por parte del director de administrar posion matalobos a Lupin. Sintiéndose en deuda por los propios cuidados que le brindo en su juventud acepto... O tal vez por alguna otra cuestión pero su corazón y mente eran demasiado tercos para pensarlo siquiera.

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La oscuridad bañaba las paredes y el suelo de piedra, siendo levemente iluminado por la poca luz de la luna, el cuerpo del castaño se encontraba recargado en el escritorio. El hombre mantenía sus ojos cerrados y su cabeza apoyada sobre sus brazos, mentalizado de que en horas tendrá que ir a la casa de los gritos como lo hacía en tiempos aquellos.