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1.1𝖐
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la chica miraba directamente al hombre en el sillón, la música estaba fuerte, y la casa repleta de gente que para ella no era importante.
los ojos del chico se posaron en los de ella mientras le daba una calada a su porro, reteniendo el humo en su garganta mientras la veía de arriba a abajo.
sus ojos achinados gracias a la droga la atrajeron, más cuando la ropa del chico era tan excitante a la vista, su pelo rubio ceniza combinaba con su chaqueta de jeans azul. sus piernas estaban abiertas, invitándola a acomodarse frente a él. y si no hubiera mas de 50 personas ahora mismo, nadie dudaba que estaría haciendo mucho más que solo observarlo desde las escaleras.
se notaba que el chico no llevaba nada debajo de su chaqueta, logrando que su clavícula fuera vista, siendo adornada por dos collares de plata, iluminando la vista de su piel pálida.
se acercó finalmente ante él, logró ver como él le daba el permiso de sentarse a un lado de él, ella aceptó gustosa. él le sonrió y le ofreció de su porro, ella lo agarró y le dió una larga calada, agradeciéndole con una sonrisa.
"¿te han dicho que tienes bonitos ojos?" le dijo ella al oído, logrando que él sonriera y la mirara, se acercó a su oído y le susurró.
"si quieres follar solo dime, bonita" la chica rió, viendo la sonrisa socarrona de él.
él la agarró de la mano mientras se llevaba el porro a sus labios, subieron las escaleras y entraron a una habitación, esta estaba bastante bien equipada. al ser grande, era como un pequeño departamento dentro de una habitación. cama, comedor y living.
el chico la besó apenas entraron a la habitación, sonriendo entre el beso. el chico botó la colilla y agarró el trasero de la chica, alzándola en su cadera. la presionó contra la puerta, presionando su erección contra el núcleo cálido de ella.
jadearon al sentir la presión en sus intimidades.
el chico los llevó hasta la mesa, sentándola ahí, se dieron la libertad de desnudarse, lentamente, mientras se observaban con deseo. la chica iba botón por botón, desabrochando la estorbosa chaqueta, viendo el definido abdomen frente a ella. sacó lentamente la chaqueta de sus hombros, logrando que esta cayera al piso. luego, fue por sus pantalones.
