Cap. 13

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Los dos niños estaban de regreso a sus perspectivas casas, Hyuga vio a los padres de la pelirroja enfrente de su casa de el, parecía que hablaban con la madre del niño, en sus rostros se veían molestos principalmente el señor Nakazawa, el moreno tragó saliva y tomo la mano de Sanae, la pequeña también apretó la mano del niño cuando estos se acercaron a los adultos, el padre de la niña le empezó a gritar— ¡Pequeño desgraciado! ¡Te llevaste a mi pequeña hijita!— El chico alzó una ceja y le dijo aquel hombre— ¿Y desde cuándo tiene tanto interés por su hijita? Creí que era una bastarda para usted— La madre de Hyuga se sorprendió, al ver lo que su hijo le decía a su vecino de enfrente, el hombre estaba furioso y le respondió al moreno— ¡Es una calumnia! ¡Yo nunca le diría eso a mi hija! Y mi esposa lo sabe ¿Verdad?— La mujer no respondía nada, el hombre la miraba y le dijo de nuevo—
¡¿Verdad?!... Cariño— la mujer ascendia rápido la cabeza y decía que sí, se notaba que la mujer tenía miedo, la madre de Hyuga les decía al matrimonio— Por favor... Mil disculpas, le prometo que no volverá a suceder— la señora Nakazawa le respondió— Le pedimos que por favor su hijo ya no se vuelva acercar a nuestra hija— Sanae volteo a ver a su mamá y le dijo— ¡¿Que?! ¡Pero mamá! ¡Kojiro no hizo nada! ¡Lo que pasó fue- Pero su papá la interrumpió— ¡Basta Sanae! ¡¿Que no ves la mala influencia que es este niño para ti?!— ¡Eso no es cierto!— Refutó la pequeña, su padre la fulminaba con la mirada, el hombre se dirigió a la señora Hyuga y este le dijo de forma autoritaria— No quiero ver a su hijo cerca de mi casa o de algún miembro de mi familia, o tendrá problemas ¿Le quedó claro?— Si señor Nakazawa, Mil disculpas por lo ocurrido— respondió apenada la mujer, Hyuga estaba indignado ¿Por qué su madre tenía que disculparse? Pero no dijo nada para no agrandar el problema.

Después cada familia se fue a su perspectiva casa, el moreno estaba molesto pero muy preocupado por su amiga ¿Que pasaría ahora? Había silencio mientras el, su madre, y sus hermanos cenaban hasta que el niño golpeó la mesa con el puño y dijo en voz alta— ¡Ese hombre es un maldito mentiroso! ¡Y un infeliz!— la madre lo reprendió— ¡Kojiro! No te expreses así mentiroso o no, te pido que ya no te acerques más a esa niña—  Al chico se le cayó el semblante, su mamá noto el cambio de su expresión y le dijo con voz calmada— Hijo... Se que es tu amiga y que te preocupas por ella, tienes un buen corazón igual que tu padre. Pero tienes que entender que la acusación que dijiste hace rato es grave y sin pruebas puedes meterte en problemas— el niño le contesto— Yo ví como le decía de cosas, además Sanae me dijo todo lo que su padre le hace a su mamá y a ella ¡¿No es suficiente prueba?!— Hubo silencio, mientras que el tigre esperaba su respuesta— Kojiro, aunque tú lo hayas visto— respondió su madre—lo tomarán como rumores tristemente no basta con tu testimonio, uno de ellos tiene que hablar también o que la policía lo atrape en el acto— Hyuga se quedó callado, miro con tristeza su ventana que daba con la casa de su amiga y decía en sus adentros— (No tengo pruebas... No tengo pruebas suficientes del maltrato que sufre Sanae, a menos que ella hable ¡No es justo! Ojalá puediera hablar con ella una vez más para que así su sufrimiento acabe de una vez por todas)— El chico le había hecho una promesa a su amiga de no dejarla sola y así sería, no iba a permitir que ese fulano abusara de ella otra vez no quería pensar en el infierno que estaba pasando ahora en su casa, sabía que por las cosas que había hecho, tendría que pagar por ello.
Sentía culpabilidad, porque el se la había llevado a ese terreno valdio su cabeza daba vueltas en el asunto, quería hacer algo ¡pero ya! No podía esperar más tiempo, vivir con tipos como el es como estar atado a una bomba tarde o temprano va a explotar, y Hyuga no quería espera a que esa bomba explotará y pasará algo grave.

Al día siguiente, el se fue a la escuela literalmente estaba cansando a Sanae para poder hablar con ella, pero no la vio llegar, la estuvo buscando por toda la escuela hasta que la vio en su salón, el cuando estaba apunto de acercarse a ella le hablaba alguien o simplemente la perdía de vista, ¿Será que podría hablar con ella? Aunque corriera riesgo de que se metiera en problemas, el quería salvar a esa pequeña pelirroja que con su luz había dispersado la nube gris que lo cubría, Mientras tanto Sanae estaba en su salón atrapada en sus propios pensamientos ella tampoco la había estado pasando bien...

Continuara...

Amor de niños  (Hyuga x Sanae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora