Era una fiesta común y corriente de disfraces en la noche de halloween, todos bailaban y bebían sin parar, el clavo su mirada en ella, iba a ser su próxima victima.
Y claro, era un hombre poderoso y mujeriego, ¿quien no se moriría por el?
Para él la...
Llegaron a una casa enorme, Tom bajo del auto y abrió la puerta del pasajero para agarrar bruscamente de la mano a Thalía y llevársela a la casa, este la tomó de la mano y la arrastró hacia esta, tenía lágrimas en los ojos y solo veía como se adentraban a esta casa desconocida.
Ellos dos entraron, y allí se encontraba un hombre de rastas sentado en un sillón con 2 hombres a su lado, este fumaba un cigarrillo y una chica estaba sentada en su regazo.
—Mira lo que conseguí en una fiesta bill— dijo tom, señalando a thalia.
—Quien es esta? La compraste en algún bar o algo? Es una prostituta?— hablo el de rastas mientras se inclinaba para ver a Thalía mejor.
—No la compre ni es una prostituta, no ves que hoy es 31 de octubre?
—Ah, el día de disfraces? Ósea que esta disfrazada de un conejo o de una puta?— el chico de rastas se rio junto a la chica sentada en su regazo.
—Es de Playboy, algo así, bueno tengo asuntos pendientes adiós— hablo tom mientras arrastraba a thalia hacia las escaleras.
—Basta me lastimas!— thalia grito con su brazo enrojecido ya que tom apretaba su brazo fuerte.
Tom abrió la puerta de una habitación empujó al suelo a thalia, este se sentó en un puff que estaba al lado de la cama y obligó a thalia a levantarse, esta estaba debilitada en el suelo pero tom sacó otra vez el revólver y apuntó a la cabeza de esta.
—Levántate o te juro que te vuelo la cabeza— tom dijo mientras tenía en su mano el revólver que seguía apuntando a la cabeza de thalia.
Esta se levantó adolorida y tom solo la vio con morbo, acomodándose en el puff mientras observaba el cuerpo de thalia aún más.
—Ahora baila para mi— tom ordenó con voz grave, tirando el revólver a la cama.
—Pero...
—Pero nada! Baila de una puta vez, no quieres que tome el revólver o si?
Thalia solo lo miro y bailo un poco lento, ella era pésima bailando pero tom no dijo nada, mirándola aún más mientras esta lloraba.
—Estas llorando?— tom dijo en voz alta mientras se levantaba del puff para acercarse hacia thalia.
En ese momento ella se quedó pálida, no podía decir ni una sola palabra y paró de llorar ya que la voz de tom se volvió amenazante.
—Te voy a dar una verdadera razón para llorar— con esto, Tom la empujó a la cama y se quitó su cinturón y camisa, quedando solo en ropa interior mientras se montaba encima de thalia quien no podía contener las lágrimas, tom solo la abofeteó y empezó a retirar su disfraz rápidamente, rasgó su ropa interior dejándola completamente desnuda, este bajo sus bóxers y posicionó su miembro contra la entrada de thalia, esta gimio en voz baja hasta que sintió que el miembro de este se metió por completo, esta dio un grito de dolor, a tom no le importó y se movió más rápido contra ella, thalia no podía dejar de llorar ya que el dolor era insoportable, no sentía nada de placer, este continuó moviéndose adentro de ella, hasta que en un momento soltó un gemido ruidoso lo cual le hizo entender a thalia que tom se corrio dentro de ella, este sacó su miembro de la intimidad de thalia para luego sentarse en la cama mientras esta estaba traumada, cerró sus piernas y se sentó en la cama pero se alejó de tom.
—En el baño hay unas pastillas, solo tómatelas para que después no te arrepientas— con esto tom subió sus pantalones y salió de la habitación.
Thalia comenzó a llorar sin parar, golpeando con sus puños la pared de la habitación hasta que sus nudillos quedaron completamente rojos, se tiró en el suelo a llorar sin saber que hacer y no sabía como escapar de allí, sus ojos se hincharon con el paso del tiempo hasta que decidió salir de la habitación para tomarse la pastilla, bajo las escaleras y solo vio a Tom y a Bill sentados en el sillón de la sala de estar viendo la televisión como si nada hubiera pasado, esta se dirigió al baño rápidamente y puso la pastilla en su boca para luego agarrar un poco de agua y tragársela, pero esto aún así no hizo que thalia se sintiera mejor, se sentía sucia así que decidió bañarse.
Salió del baño y solo vio a Tom parado allí afuera, viéndolo un poco molesto.
—Quien te dio permiso de bañarte?
—Pero yo solo-
Thalia recibió una bofetada de tom, haciendo que su mejilla se enrojeciera también.
—Te pregunté, quien te dio permiso de bañarte?
—Nadie...— thalia respondio poniendo su mano en su mejilla enrojecida, viendo cómo bill se acercaba también.
Este fumaba un cigarrillo y la miró de reojo. —Y ahora que le pasó?— preguntó bill mientras tiraba el cigarro hacia el bote de basura.
—No le pasa nada, solo que no se por que se baña nadie le dio permiso de bañarse solo le di permiso para que se tomara la puta pastilla— respondió tom.
—Pero y eso que tiene de malo?— bill preguntó mientras miraba a thalia de nuevo.
—Por que esta es mi casa que no ves? Y aquí mis reglas se cumplen
—Ahg mejor los dejo solos no quiero ver esto— bill se volvió a sentar en el sofá para ver la tv.
—Si no vuelves a pedir permiso para hacer algo... te golpeare más fuerte pero no solo será una simple bofetada... será una golpiza que te hará retorcer del dolor, oíste?
—Esta bien...— thalia respondió, viendo como tom se daba la vuelta y se iba otra vez junto a bill, sus lágrimas salieron pero ella las trató de ocultar.
Subió a la habitación y se vistió, con una pijama que encontró y se acosto en la cama, llorando aún más con el pensamiento de que no podría salir de ese infierno.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
