Capitulo 6

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Naruto abrió sus ojos asustado al caer en cuenta que ayer se supone pasaría la noche con el emperador.

Miro a su costado de la cama y no había nadie, solo pudo pensar que de seguro esa tarde lo matarían en la horca.

Se levantó velozmente y acomodo su ropa, sacudió sus orejitas y se sentó en el filo de la cama.

-Maldición, tengo que encontrar a su Majestad y disculparme -susurro.

Los pelos se le pusieron de punta cuando escucho como alguien se aclaraba la garganta. Se dio la vuelta y allí, en una mesa que estaba en el balcón del cuarto se encontraba Sasuke sentado, con una taza de te, tomando el desayuno de manera tranquila.

Naruto casi se cae al verlo, pero se acercó y se reverencio ante el.

-Su Majestad, discúlpeme, no lo había visto, le ruego me perdone -le dijo.

Sasuke dejó su taza en la mesa y se cruzó de piernas.

-¿Cual es tu nombre? -pregunto.

El rubio se quedó callado unos segundos tratando de entender si debía responder o volver a disculparse, opto por la primera opción.

-Mi nombre es Naruto su Majestad -respondió.

-Naruto.. Mmm.. -susurro ronco.

El rubio cerro sus ojos intentando ignorar la seductora voz con la que dijo su nombre.

-¿De donde vienés? -le dijo tomando otro sorbo de té.

-Soy de un pueblo pequeño su Majestad.. No tenía un nombre pero ya no existe, no tiene que preocuparse por eso -sus orejas bajaron al recordar lo que le hicieron a su hogar.

-Levantate -ordenó, cosa que el rubio hizo- ven aquí.

Naruto se enderezó y camino hacia el.

-Más cerca.

Avanzó un poco más.

-Así esta bien, toma asiento -le señalo la silla que estaba al frente de el.

-Su Majestad yo no soy digno de compartir mesa con usted, disculpeme -le dijo.

-¿No escuchaste lo que dije? He dicho que te sientes -le volvió a ordenar con voz fuerte.

Naruto se sentó deprisa donde le indicó.

-¿Prefieres el té o el café? -le dijo sirviéndose otra taza de té.

-Nunca he probado ninguno su Majestad..

Sasuke lo miro por un momento y luego le sirvió un poco de café.

-Prueba eso -le señalo la taza.

El rubio cogió la taza con cuidado y llevo el borde a sus labios, tomó un poco de café y luego hizo una mueca, no tenía azúcar y sabía horrible.

-Puag -dejó la taza en la mesa.

Sasuke soltó una leve risita y colocó tres cubos de azúcar en el café.

-Pruébalo ahora - le empujó la taza.

-(lo hizo a propósito)- volvió a cojer la taza y tomó el líquido que estaba en su interior -Mm.. -relamio sus labios- ahora está más rico.

El pelinegro limpio con su mano un leve rastro del café cerca de los labios del rubio. Naruto se sonrojo y bajo su cabeza para que no viera el notable rubor que ya hacia presente en el.

-Que bueno que te gusto, yo odio el café -le confesó con voz suave.

Ahora ya viéndolo así de tranquilo el rubio pensó que quizás esto no sería tan malo.

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