Capitulo 7

1.2K 145 56
                                    

Antes de dirigirme hacia Begaritt, primero me aseguraré del nivel en el que estoy, y quién más apto que el propio Dios Espada, uno de los Siete Grandes Poderes.

Estuve viajando aldea por aldea durante un tiempo; el Santuario de la Espada sí que queda lejos. No tanto como para estar meses viajando a caballo, pero sí unos días hasta llegar a Millis. Calculo que llegaré al punto indicado en tres o quizás cuatro días; esto será emocionante y divertido. Nunca he luchado contra gente particularmente fuerte, aunque habrá excepciones, como Orsted. Ese tipo... está en otro nivel.

Incluso ahora dudo mucho que pueda derrotarlo. Lo que menos querría sería toparme otra vez con ese tipo. Sería un final desastroso teniendo una derrota de mi parte, como con Sukuna.

De la emoción, había apurado el paso, serían tan solo dos día de viaje. Estoy tan cerca... Espero no me decepciones.

"Gal Farion..." Susurré sin darme cuenta. Esbocé una sonrisa para luego reírme a carcajadas mientras seguía con mi camino.

-Narracion-

Gal Farion. Hay mucho que contar de mi, pero no tengo ganas de repasar mucho entre mis recuerdos, por lo que contaré lo esencial de lo que fuí alguna vez.

Cuando era un Santo de la Espada, desafíe al Dios Dragón Orsted a una batalla. Naturalmente, perdí. pero sobreviví con mis 4 extremidades intactas. Posteriormente, decidí entrenarme desde cero y logré llevarme el título de Dios de la Espada.

Ahora mismo, un sujeto acaba de irrumpir en mi santuario, Su aura lo dice todo, para un maestro del Touki es fácil saber diferenciar a gente fuerte de la gente débil. Este tipo es un mounstro.

La enorme puerta del santuario fue abierta con brusquedad junto a un golpe seco. Dentro de ese lugar se encontraban no solo el buscado "Gal Farion" sino también habían muchos estudiantes del santuario. Algunos más destacables que otros, un ejemplo claro serian. "Eris Greyrat," "Nina Farion," "Jino Britts," junto a estos se encontraba la Reina de la espada, Ghislaine.

Las miradas estaban puestas sobre el Espadachin Mago que yacía detrás de ellos.

"Ahh~ tardé un poco en llegar. Lamento la demora."

Nadie respondió, aunque sus expresiones hablaban por sí solas, algo como "¿Y este quién es?" o "¿A qué vino hasta aquí?" Eso es lo que creo; soy pésimo en esto. No me gradué como lector de expresiones, jeje.

"¿Porque me miran así? ¿Soy tan genial?" Terminé de decir con gran carisma.

"Antes que todo, ten la decencia de presentarte. Dime, ¿Quién eres?"

"Soy Satoru."

"¿A qué viniste?"

"Vine a probarme de alguna manera, si te derrotó significa que no he perdido el tiempo."

"¿Solo eso? ¿Hay algo que quieras lograr?"

"Quisiera saber que tanta diferencia hay entre uno de los Siete Grandes Poderes y yo mismo, voy matar al Dios Dragón Orsted." Maldita sea, las palabras se me salieron de la boca, tsk.

"Ohh, ya veo. No somos tan distintos en ese tema. Nuestra invitada desea lo mismo que nosotros, ¿verdad, Eris?"

"Tsk, no hacía falta mencionarme. Ya acaba con todo esto de una vez."

"JAJAJA, de todas formas. ¡Ven! ¡Y dale sentido a esta pelea!" Lo siguiente que se escuchó fue un gran estruendo.

"No seré blando, viejo".

"No seré blando, viejo"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ɪɴꜰɪɴɪᴛᴇ 𝘔𝘶𝘴𝘩𝘰𝘬𝘶 𝘛𝘦𝘯𝘴𝘦𝘪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora