Omegacember/ Good Omens.

Instinto

📌 Temática: hermanastros
📌AU humanos.
📌 Beelzebub x Gabriel
📌 Beelzebub alfa dominante/top
📌Gabriel omega dominante/bottom
📌 Diferencia de edad por 7 años

📌Sinopsis:

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Beelzebub y Gabriel son un par de hermanastros que desde el día en que se conocieron descubrieron que se gustaban, pero había una diferencia de edad de 7 años que hacía imposible el romance ya que eran niños.
El instinto omega de Gabriel lo lleva a intentar aparearse con su hermanastro y este por la intensidad de las feromonas ajenas es tentado, por suerte su madre los interrumpe. Son separados y luego de unos años, Beelzebub y Gabriel se reencuentran para sucumbir a sus instintos.

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— Se suponía que eras el hermano mayor, ¿cómo pudiste? —le reprochó su madre, señalando con el dedo a Beelzebub—. Esto es inaceptable, ¿qué dirá el padre de Gabriel cuando se entere?

— Perdón madre, no era mi intención —apretó sus manos en puño a los lados de su cuerpo—. Buscaré donde alojarme mañana.

— Eso no va a solucionar lo que hiciste hoy Beelz, ¡tienes diecinueve, él tiene doce!

Gabriel observaba por el espacio que dejaba la puerta entreabierta de la habitación de Beelz, misma habitación donde el día anterior había estado jugando con el Nintendo de su hermano mayor mientras este estudiaba, ahora la madre de Beelzebub le reprendía. Gabriel se sintió culpable por lo que sucedía, no era culpa de nadie si lo analizaban, pero su amado hermano mayor estaba siendo fuertemente regañado.

Beelzebub era un alfa dominante adolescente, se presentó como alfa desde muy joven pero no parecía haber ningún problema, era un chico callado y tranquilo, se volvió algo rebelde en la secundaria, justo entonces su madre se casó con el padre de Gabriel. Ambos eran solteros y tenían hijos pequeños, el nuevo hermano de Beelz era un niño muy lindo, aveces irritante, pero siempre era amoroso con él, algo que a la madre de Beelzebub no le gustaba.

La mujer tenía entendido que Gabriel era un omega dominante, aún siendo pequeño se manifestó con este subgénero, el padre del menor le comentó que la madre de este era una dominante también así que las probabilidades eran altas. Ella temía que los hermanastros terminaran apareándose en algún momento, estaba segura de que lo harían. Beelzebub se controlaba demasiado bien, lo había visto ponerse supresores muy fuertes y evitaba quedarse en casa cuando entraba en celo.

Beelzebub había crecido pensando siempre que estaba mal el querer de una forma tan intensa a Gabriel, era un niño y aún si era un omega dominante no podía hacer nada, le llevaba siete años. Gabriel no lo mostraba demasiado, pero su instinto le decía que Beelzebub era su alfa, cuando descubrió la masturbación lo hacía olfateando ropa de su hermanastro, y cuando se sentía extraño por el celo armaba nidos con la ropa de Beelz.

Desde que el mayor había comenzado la universidad pasaba menos tiempo en casa, y esto ponía triste al omega que siempre esperaba por él. Aquél día Beelz llegó a casa luego de salir con unos viejos amigos, su madre no estaba pero Gabriel le recibió saltando sobre él mientras le decía lo que había para la merienda, el alfa palmeó su cabeza siguiendo de largo hacia su habitación.

Evitaba tener demasiado contacto con él para no sucumbir a su instinto, el olor de Gabriel le alteraba cada hormona de su cuerpo y le tentaba a pecar, deseando morder su cuello y marcarlo con sus colmillos, hundirse en sus entrañas y enterrar sus uñas en su piel, cada parte del menor, todos sus espacios, todo su cuerpo, Beelz sentía que este le pertenecía. Pero cuando volvía a la realidad se daba cuenta de que estaba sintiendo cosas por un niño, y esto lo volvía loco, se sentía un criminal.