𝙈𝙚𝙡𝙖𝙣𝙘𝙝𝙤𝙡𝙞𝙘 𝘽𝙡𝙤𝙤𝙙𝙮 𝘾𝙝𝙧𝙞𝙨𝙩𝙢𝙖𝙨

EIGHT

El oficial estaba en su despacho con su portátil intentando investigar sobre el principal sospechoso: Han Jisung. Un chico adulto de dieciocho años, metro setenta, moreno, pelo oscuro y corto con un flequillo que estudiaba en una universidad conocida en Seúl. Sus padres fallecieron hace un par de años, por lo que ahora vive solo en un pequeño apartamento.

—Esto es más complicado de lo que pensaba...— suspiró mientras pasaba su mano por la cara. Tenía unas manchas azules debajo de los ojos, claramente no había dormido bien los días anteriores, este nuevo caso le causó demasiado insomnio, ni siquiera él sabía el por qué le pasaba esto.

Un toque en la puerta le hizo volver a la realidad.

—Pase... — ordenó con la voz ronca.

—Señor Bang, tengo novedades sobre los asesinatos HJ— comentó su ayudante, Yang mientras rebuscaba un papel entre los documentos que tenía en sus manos— hice una esquema sobre... los asesinatos y tal vez la próxima víctima...— no podía hablar bien debido a que estaba más concentrado en encontrar la hoja. —¡Lo encontré!— susurró, pero Bang pudo llegar a escucharle.

—Oh...— contempló la hoja que Yang le dió hace unos segundos.— buen trabajo, ayudante Yang.— el menor, al escuchar ese cumplido, no dudó en sonreír.—Con que Lee Minho será el próximo, ¿eh?, ¿cómo sabes que está desaparecido?

—Investigamos todo tipo de datos sobre él y encontramos su casa, luego de ellos íbamos a visitarlo para poder interrogarle y ver si nos podría ayudar en algo, pero no había rastro de él en su casa ni en cualquier otro sitio al que iba frecuentemente.

—Buen trabajo Yang.

—Muchas gracias señor.

Después de eso Yang Jeongin salió de la oficina y se dirigió hacia la cafetería, él también quería descansar.

—¿Lee Minho está desaparecido? —susurró para él mismo.

Algo aquí andaba mal. Y somos conscientes de ello.

[...]

—¿Qué hago aquí?— Minho despertó, estaba en una casa demasiado descuidada, con mucha humedad y moho, no había ningún mueble, solo unos cartones. — ¿cómo llegué hasta aquí?— le dolía mucho la cabeza, no se acuerda de nada. Estaba muy confundido.

Han Jisung le persiguió y al momento en el que estaba distraído drogó la bebida que se tomaría Lee más adelante. A la hora en la que Minho salió, se empezó a sentir mal y se fue pero se desmayó en el camino.

El plan iba muy bien, tal y como lo pensó.

Han le agarró y se lo llevó hasta su "casa" y le dejó descansar hasta el día siguiente.

— ¿Cómo estás?— habló Jisung que estaba en una esquina.

—¿Jisung?— el corazón de Minho comenzó a latir con tanta fuerza que por poco y se podía llegar a escuchar en el exterior. —Oh, estoy... bien.

—¿Sabes por qué quise traerte aquí?— ha lo Jisung mientras se acercaba poco a poco.

—Porque me quieres matar igual que a los demás, ¿verdad?

—A ver, sí pero no al cien por ciento.—respondió con una voz burlona.

—¿Entonces?—Lee tenía mucha curiosidad.

—La cosa es que no te haré nada ahora hasta dentro de unas horas, así que tienes tiempo de sobra para lo que sea.

—¿Por qué no lo harás ahora?

—Te recuerdo que te eché una "cosita mágica" en la bebida que te hizo desmayar, así que tengo que dejarte más tiempo hasta que eso se te quite, hay dos posibilidades, o mueres cuando te vas a desmayar por segunda vez o quedas vivo y te mato—respondió como si eso fuera lo más normal del mundo.

—Vaya, que bien. Es morir o morir, que divertido— habló sin dirigirle la mirada a Han.

—Iré a comprar algo para que comamos, ¿que te apetece?

— Mmm cualquier cosa está bien.

— Perfecto. — se levantó y se fue alejando— entonces ya me voy.

Minho no respondió nada, solo observó callado hasta que la silueta de Han desaparezca y no se escuchase un ruido más para comenzar lo que tenía planeado.

Algo corto pero creo que esta bien