En el medio |ꜱᴏᴏᴋᴀɪ

ˏ'୭̥🌙 08. ɪɴᴏᴄᴇɴᴄɪᴀ

Capitulo 08
"Inocencia".

¿Realmente estaba seguro de lo que está apunto de hacer?

No, Beomgyu nunca se sentia seguro de si mismo.

¿Hasta que punto tenía que llegar por un simple enamoramiento espontáneo?

Choi Beomgyu definitivamente no conocía sus propios límites, estaba consciente que no era culpa de HueningKai todo lo que estaba pasando, sino que era su culpa, él mismo le pidió que lo ayudara con todo este desastre, solo para hacer que Choi Soobin finalmente pusiera sus ojos en él, pero todo estaba dando un resultado del asco, provocando que el pelirojo se sintiera incómodo al lado de su mejor amigo de la infancia.

Desde que ocurrió aquella situación prometedora con HueningKai y Soobin, en su corazón se lleno de un sentimiento que conocia bastante bien, envidia.

No era la primera vez que sentia envidia de esa forma ni mucho menos de HueningKai, Beomgyu lo conoce desde el primer día en que aquel extranjero llegó a Corea, convirtiéndolos en vecinos inseparables a la edad de siete años, aquel acontecimiento los marco por completo, siendo asi, el inicio de una gran amistad o asi es como lo veia HueningKai.

Para Beomgyu era algo totalmente diferente.

Aún podia recordar muy bien aquella tarde de otoño, dónde él y HueningKai muchas veces solian ir a jugar en el parque, junto con otros chicos, ignorando el detalle que muchos pasaban de largo del extranjero por el simple hecho de serlo. Aunque eso era un detalle que para Choi no era importante, mientras que HueningKai lo tuviera él, jamás se sentirá solo o eso era lo que creia.

⸻ Ignoralos huening, mientras me tengas a mi, jamás estarás solo.⸻ El pequeño pelirojo siempre le repetia las mismas palabras a su mejor amigo, mientras que esté siempre abrazaba sus propias piernas, para ocultar su rostro en medio del llanto.

Los sollozos del contrario siempre lastimaron al pequeño corazón de Beomgyu, el de rulos jamás a querido verlo mal, lo que menos desea es ver a HueningKai llorar, porqué es una de sus debilidades. Se inclino de puntillas hasta llegar a la altura del más bajo, en ese entonces, Beomgyu era más alto que HueningKai, obviamente con el paso del tiempo ese detalle comenzó a cambiar.

⸻ ¿Sabes que? Los hawaianos son más lindos que los coreanos.⸻ Solto en un tono bastante animado, recibiendo un bufido en respuesta.

HueningKai alejo su rostro húmedo por las lágrimas de sus piernas, para mirar con el ceño fruncido a su mejor amigo.⸻ No digas tonterías bamgyu, tú eres un niño muy bonito.

HueningKai desde muy pequeño siempre le costó pronunciar el nombre de Beomgyu, por lo cual el recién nombrado ya se habia acostumbrado a escuchar la mala pronunciación del contrario, ignorando por completo sus pensamientos que encontraban aquello tierno.

⸻ Yo siempre digo la verdad y eso lo sabes muy bien, Huening.⸻ Se cruzó de brazos, mientras formaba un puchero con sus propios labios.

La risa melodiosa del castaño se hizo presente ante aquella situación, HueningKai siempre le a gustado cuando Beomgyu hace caras tontas solo para subirle el ánimo y como se a dicho anteriormente, Beomgyu ama ver a HueningKai feliz, porqué ambos son como hermanos, no de sangre, pero se consideran hermanos porqué la vida puso a ambos en el camino del otro. Aunque su adorable burbuja fue rota en segundos, gracias a la voz de la progenitora de HueningKai, la cual anteriormente habia decidido contemplar esa hermosa situación.

⸻ Vamos pingüinito, hay que volver a casa, despídete de Beomgyu.

El castaño se levantó del suelo, con la ayuda de la mano del castaño, para correr dónde su madre mientras se giraba para despedirse con la mano de su mejor amigo. Una vez que llegó al lado de su progenitora, está se mantuvo observando atentamente al pelirojo.