Capítulo 2

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Pov Thiago
Varios mensajes llegan a mi móvil y de forma perezosa estiro mi brazo para alcanzarlo. Con un ojo cerrado, porque aún sigo con sueño, veo que son mensajes de Instagram.

Direct de Instagram
@madelame
Hola, Thiago, quería preguntarte sí te apetece quedar para almorzar y así te enseño la ciudad, solo sí quieres, sino no pasa nada :)

                                                   Claro, ¿podrías venir a recogerme? Aún no ha llegado mi coche y me niego a conducir un coche inglés.

¿Te parece en una hora?

                                                  Sí, para darme una ducha. Pásame tu número y te mando mi ubicación para que vengas a por mí.

Buena excusa para intercambiar números.

                                                  Puede.

Es este ********.

                                                  Perfecto, reina.

Fin del chat

La agrego poniendo Madelaine y le mando un mensaje para que me agregue también.

Salgo de la cama e iría a darme una ducha de agua fría para despejar mi mente.

Aparezco nuevamente en mi habitación cuando ya termino de ducharme y solo tengo una toalla rodeando mi cintura y pequeñas gotas en mi torso. Escucho el timbre de la casa y bajo.

Al abrir la puerta, del otro lado veo a Madelaine y ella comienza a reír al verme en toalla.

Madelaine.- perdón.

Thiago.- no te preocupes, pasa.

Me echo hacia un lado para dejarle pasar y ya cierro la puerta principal.

Thiago.- perdón por recibirte así, pero es que acabo de salir de la ducha.

Madelaine.- no pasa nada.

Thiago.- ¿te apetece algo?

Madelaine.- te agradecería un vaso de agua.

Thiago.- sígueme.

Camino delante de ella para llevarla a la cocina y en un vaso le sirvo un poco de agua. Se lo paso y ella me agradece con una sonrisa.

Thiago.- estaré arriba, siéntete como en casa.

Madelaine.- ¿te falta mucho?

Thiago.- no, solo vestirme. Ya me afeité y duché.

Madelaine.- te queda bien el bigote y perilla.

Thiago.- me gusta más así, aunque hay veces que me gusta dejarme la barba.

Madelaine.- no te entretengas, he reservado mesa en un restaurante italiano.

Thiago.- debo seguir una dieta.

Madelaine.- no pasará nada.

Thiago.- bueno, no tardo, ahora vengo.

Salgo de la cocina dejándola allí sola y subiría a vestirme para irnos ya a almorzar juntos.

Termino de vestirme y regreso nuevamente con la pelirroja y ella sigue en la cocina.

Thiago.- ya podemos irnos.

Madelaine.- perfecto.

Cojo las llaves de la casa y cierro con llave cuando ya hemos salido de la casa. Nos montamos en el coche y ella conduciría hasta el restaurante italiano para almorzar.

Simple casualidad || Madelaine Petsch Donde viven las historias. Descúbrelo ahora