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El momento de su concierto ha llegado, ya podía escuchar el bullicio de los fans afuera en el estadio, con sus ojos cerrados repasando en su mente las canciones y pasos que debe presentar mientras las maquillistas lo dejan presentable y bello.

Su cabello rubio echado hacia atrás, un delineador en toda la forma de sus ojos resaltando los ardientes rojizos, un poco de rubor y un gloss en sus labios. Su vestimenta consistía más que todo en negro, un traje a su medida y por diseñadores profesionales.

Su manager lo guío hacia la plataforma que iba subir al escenario, Katsuki miró arriba donde las luces y el humo empezaron salir, era hora, le pusieron los micrófonos en su ropa. Los bailarines ya estaban en su puesto, respiró profundamente y suspiró.

No importa si ya había hecho conciertos cientos de veces, la sensación de emoción aún volvía a nacer en su pecho, cerró sus ojos y sintió como la plataforma subía hacia arriba, el humo que se presentó lo escondió hasta que estuvo a la vista.

Escuchó los gritos alocados de sus fans, su nombre siendo gritado con euforia, abrió sus ojos, y pudo ver a miles de personas saltando de emoción, gritando hasta el desmayo, carteles de amor, los celulares y presa grabando el evento.

Respiró otra vez, la música empezó a sonar y él puso su típica sonrisa que enloqueció a sus fans, comenzó a hacer uso de su garganta. Dejando salir las notas musicales mientras baila al mismo tiempo junto a sus bailarines extras. Él era todo el centro de la actuación, por esa noche, se dejaría llevar por lo que alguna vez fue su sueño.

No había fans, no había manager, no había bailarines, no había cámaras, no había micrófonos, solamente era él abriendo su corazón y cumpliendo su sueño. Un sueño que había cumplido hace años, tanto que parecía algo cotidiano. Cerró sus ojos y siguió bailando, dejando que la memoria muscular haga su trabajo. Todo iba perfecto.

Todo iba perfecto.

Cuando Katsuki alzó sus párpados y sus ojos vieron un helicóptero, pensó que era uno de la prensa, pero se dió cuenta rápidamente que no lo estaban grabando a él sino algo fuera del estadio, su voz se hizo más débil y enseguida escuchó la voz de su manager en el comunicador de su oreja

—"¡KATSUKI, SAL DEL ESCENARIO AHORA MISMO!"

Katsuki no comprendió que estaba pasando cuando sus fans y el público empezó a irse corriendo, gritando, armando un alboroto en la salida de emergencia, tanto que sus guardias intentaban llegar a él pero, la agente lo impedía. Dejando al Idol mirando hacia el cielo. De repente vio como algo era lanzado hacia el techo del escenario, provocando un gran estallido, el Omega se agachó por instinto.

Pudo ver a su manager y guardias detrás de él llamando, se levantó rápidamente intentando ir donde ellos, pero un pedazo de techo cayó y bloqueo su camino. Asustado miro a qué parte ir, el escenario estaba hecho un desastre, un temblor sacudió el lugar y Katsuki pudo ver a un persona gigante pisar el estadio como si nada.

Se quedó paralizado del miedo, y estaba apunto de ser aplastado por otro escombro sino fuera porque alguien lo abrazo, Katsuki cerró sus ojos al ver la cosa que estaba apunto de caerle. Se aferró a esos brazos grandes y protectores, el olor a menta inundó sus cosas nasales.

Escuchó varios gruñidos guturales salir de la garganta de quién sea que lo había salvado, un sonido muy tranquilizante para el Omega cenizo que sino estuviera asustado seguramente estaría ronroneando. Aún que esos gruñidos eran de dolor, seguía aferrado y abrazando su protector.

Podía escuchar varios escombros caer alrededor suyo, chillo de miedo, jamás le habia pasado cosas como esa en su vida, obviamente estaba aterrado, fue abrazado con más fuerza. Hasta que los pedazos de hierro y cemento se detuvieron, dejando a vos debajo de ellos en una inmensa oscuridad.

Katsuki estaba temblando, sintiendo una mano grande cubierta de guantes masajear su cuello para calmarlo, parpadeó con dificultad hasta que pudo enfocar bien su vista.

Miró hacia arriba, encontrandose con el rostro herido del héroe Deku. Tenía un ojos cerrado, con sangre saliendo de su frente y rasguños en toda su cara. Respirando con mucho dificultad. El Alpha presiona con fuerza al Omega contra su pecho evitando lo más posible que cualquier escombro le haga daño, Katsuki se aferró el cuerpo fornido del peliverde.

— Tranquilo, todo va estar bien... Porque yo estoy aquí — Murmuró el héroe contra su oreja, cosa que hizo latir con fuerza el corazón de Katsuki.

Deku con su latigo negro, pudo hacer un agüero entre los pedazos de rocas, agarró al Omega y de un impulso salieron de esa montaña de cemento. El cenizo se aferró al cuello del Alpha peliverde, mientras esté lo carga.

Katsuki abrió un poco sus ojos y pudo ver todo desde el cielo, sus ojos rojizos brillaron al ver la ciudad por completo. Sin saber que cierto Alpha lo estaba mirando, observando cada expresión que hace.

El héroe dejo a Katsuki en un lugar seguro y alejado del peligro, el Omega pudo ver cómo el Alpha se aleja de él para seguir con su trabajo. Cae al suelo por el susto que cubrió su cuerpo hace unos momentos, sus piernas aún tiemblan tanto que le comenzaron a fallar.

Solamente se quedó en lo alto de un edificio, mirando como Deku, el héroe más grande de todos, acaba el villano rápidamente. Un helicóptero paso volando encima de él, aterrizando cerca suyo, unos paramédicos se acercaron al confundido Idol para tratarlo y moverlo a un hospital cercano.

Katsuki no se había dado cuenta que su maquillaje se había derramado por la lluvia y sus lágrimas que no sintió, solamente miraba fijamente hacia el escenario hecho un desastre. Totalmente destruido, aunque los sueños de varios fanáticos fueron destruidos junto con el concierto de conocer a su ídolo, para este, nació un nuevo sueño.

Y volver a ver al héroe Deku.

•••

Idol Omega - [Dekubaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora