million hearts 𓍢 ִֶָ jikook

O6

Jeon Jungkook llegó a casa con
una tormenta de pensamientos
en su cabeza.

Ideas contradictorias jugaban con
su mente y lo confundían, después
de haber descubierto que el chico
con fama de rompecorazones del
que le había advertido su nuevo
amigo era el mismo que se había
encargado de hacerle pasar un
rato agradable mientras conocía
la universidad, por supuesto que
estaba más que perdido ¿Estaría
haciendo mal si de repente sentia
curiosidad por conocerlo más?

No, espera.

¿En qué estaba pensando? ¿Cómo
aseguraba que ese tal Jimin no se
había portado así con él para llamar
su atención solamente? ¿Y por
qué él querria llamar su atención?
Para empezar, apenas había
tenido su primer día y sonaba muy
apresurado decir que estaba detrás
de él lo suficiente como asegurarlo
como su próxima conquista o algo
por el estilo.

Y además, no era guapo, es
decir, no era la persona más
atractiva pero sabía que no podía
menospreciar su físico tampoco,
era un caso de considerarse un
chico de belleza promedio y eso
lo convenció para liberarse de su
dilema con Park Jimin.

[...]

Sin duda ese chico tenía una
belleza de otro mundo.

La noche ya asomaba por la
ventana de su departamento
y Jimin terminaba de cenar
para lavar los trastes que había
usado. Desde que había dejado la
institución la imagen de aquel chico
a quien había acompañado en el
recorrido no había abandonado
su cabeza ¿Dónde había estado
toda su vida y por qué no lo había
conocido antes?

Se puso a pensar y recordó su
Ilegada a la oficina del director
después de su almuerzo, el hombre
al frente de la institución le había
encargado dar el recorrido a un
alumno. De nuevo ingreso. Él
era de nuevo ingreso, por eso
no lo había visto antes, si era así
entonces ¿Cómo podía acercarse
a él? Ya le había dicho que podían
hablar de nuevo porque sus
casilleros estaban frente a frente
aunque no conocía su horario y...

Un momento.

Jimin sacudió su cabeza para
apartar esos pensamientos y se
dedicó a terminar de lavar sus
dientes para acostarse en su cama
finalmente esperando a que el
sueño invadiera su cuerpo, claro
que no podría hacerlo si tenía la
mente despierta.

Jeon Jungkook indudablemente
había llamado su atención y
afortunadamente estaba a su
alcance con la simple excusa de
encontrarse en el mismo lugar,
hasta él mismo se lo había dicho al
pelirrosa. Su mirada fija en el techo
expresaba una duda tan grande, no
sabía qué tenía que hacer, se sentía
entre la espada y la pared y lo peor
es que él mismo tenía que decidir.

Claro que la cuestión de conocer
a Jeon Jungkook iba a motivarlo a
romper su palabra de dejar la rutina
de lado... ¿O sí?

Es decir, ni siquiera sabía lo que
podía pasar entre él y el chico,
además, ahora que lo pensaba, era
muy estúpido de su parte alejarse
de las personas cuando lo que
quería era encontrar al amor de
su vida. Genial, ahora se estaba
contradiciendo; se supone que se
alejaba para volver más seguro de
sí.. Pero él ya tenía seguridad...
¿Qué debía hacer? ¿Por qué justo
cuando se había propuesto ya no
acercarse a más personas?

Jeon Jungkook...

-Es un lindo nombre para un
lindo chico- sonrió y supo que ese
castaño iba encontrarse con él
más seguido de lo que esperaba.

Jungkook tenía que tener cuidado si no
quería caer ante los encantos que
Park Jimin estaba por mostrarle.