Gojo Satoru y Male!Oc / Male reader (?)
Gojo disfruta mucho la compañía de Yodai.
Es curioso y claro que, tras una rara forma de conocerse, hay buena química entre los dos.
Y a Gojo Satoru le agrada.
Advertencia por: descripción de escenas no aptas para público sensible (creoxd)
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Por fortuna o por desgracia, ambos seguían vivos, habían sido encarcelados por aquellos hombres armados que habían atacado las oficinas hace ya tiempo, todos los presentes estaban en espera de ser sacados de ahí, no sabían la razón o que harían, simplemente agarraban a algún rehén, se lo llevaban, volvían o no eso ya era mera suerte.
No había pasado mucho tiempo, 6 días, casi una semana. No habían ingerido nada hasta ese momento, tampoco parecía preocuparle a los cuidadores de la zona. Era más que obvio que lo que menos importaba era mantenerlos vivos, mas sólo el día que habían sido trasladados recibieron unas botellas con agua, esa fue su primer y única cosa ingerida desde entonces, por lo menos para Yodai.
Natsu había tratado la herida de bala que su compañero tenía en la pierna, la había tratado y lo seguía haciendo, había ocupado el agua que le habían dado, siendo regañado por Yodai al usar torpemente su único recurso de vida. Cambiaba de tela cada cierto tiempo, obviamente tela de su camisa.
Natsu nunca paró de hablar, pero siempre susurraba ya que la última vez que un prisionero había hablado bastante alto, se lo habían llevado por molestoso y hasta ahora no había vuelto a las celdas.
A pesar del sucio ambiente, tenían un pequeño baño y una cama, todas las celdas lo incluían, mas ni uno de esos elementos estaban limpios, parecía una cárcel real qué había sido abandonada y ocupada por ese grupo de criminales.
Natsu: Entonces mi mamá me dijo que en el cielo necesitaban más ángeles, y me dijo que yo era el elegido. Por eso estábamos en el parque, porque ella no quería que me vaya triste. Al final no me fui y dejé de creer en esas cosas porque me mintieron. —Yodai recargaba su cabeza en el hombro de su acompañante mientras lo oía hablar bajito.
Natsu parecía una almohada, aún con todo lo que estaba pasando, su cuerpo se mantenía muy cómodo al tacto mientras que sus manos se sentían cálidas y suaves al acariciarle el pelo.
Natsu: También una vez conocí a un señor que era muy fuerte y ágil, y me trató muy bonito, o sea, no me trató bonito pero me gustó hablar con él que nos hicimos amigos. Aunque ya hace años que no lo veo, supongo que no se podía mover porque era muy ágil y quedó inmóvil por ser el mejor, pero tampoco era viejito, capaz y se murió.
Natsu posó sus manos encima de su panza, sintiendo punzadas repentinas que alarmaban por no haber consumido nada. Yodai dirigía su mirada a lo que hacía su acompañante.
Habían estado buscando la forma de alimentarse sin recurrir a métodos arriesgados, buscando animales e insectos pequeños que se pasasen cerca, era perturbador que siquiera una mísera cucaracha hallasen por aquel apestoso lugar.
No había forma, su cabeza no tenía ideas. No podía ayudarlo, O... tal vez si.
