¿Alfa? Dahmo

Capítulo 9

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Lo sabía.

Las burlas, las miradas de desprecio, los susurros indiscretos, los comentarios que lograba escuchar.

"Una alfa marcada, que idiota."

"Solo deja ver mal a los demás alfas."

"Y yo pensaba que era la popular porque era admirable."

"¡Pff! Se nota que le gusta que le metan lo que tiene."

"Totalmente horrible, ¿cómo puede dejar sus instintos y dejarse marcar?"

Todos esos comentarios indiscretos la hacen apretar la mandíbula, trata de ignorarlos pero junto a ellos vienen empujones que uno de esos la hizo caer. Lo vuelve a ignorar.

Abre su casillero tratando de no enojarse, respira profundo y trata de tranquilizarse. A su Alfa no le gustaría que peleara.

La empujan haciendo que su frente choque con los casilleros, era el colmo. Se separó de los casilleros, sacó sus libros y caminó ignorando otra vez lo que pasaba a su alrededor. Un empujón y un escupitajo en su cuello haciéndolo quemar. Ardía su zona más sensible, más personal, más de su Alfa.

La saliva de esa Alfa cayó justo en la marca que ardió al contacto de otra saliva que no fue la de Dahyun. La saliva de otra Alfa ardía muchísimo.

Tocó su marca y gruñó, ardía mucho pero trató de ignorarlo otra vez. Recogió sus cosas y se levantó caminando más para poder llegar a sus clases lo mas rápido posible. Para luego querer llegar a su casa donde Dahyun la esperaría y consolaría.

Otro empujón, risas, susurros, su cuello ardiendo, los empujones no paraban. Su lobo estaba totalmente enojado, rabioso y quería estampar su puño con cualquiera que pase.

No aguantó.

Se levantó decidida, sin decir nada, pateó la entrepierna de la Alfa que la empujó, golpeó con su puño su abdomen y rostro dejándola sin aire, también un posible moretón que se alojaría en su ojo por varios días.

Dejó eso ahí, camino normalizando su respiración.

No esperó un puñetazo en su mandíbula de otra Alfa, su rostro se ladeó junto a la mayoría de su cuerpo pero aguantó. Se enderezó y pateó con todas su fuerzas hacia la Alfa con toda la intención de hacerle daño.

Miró con claridad, la alfa que dejó sin aire antes es la hermana de una de las Alfas más fuertes de el instituto, no podría contra ella en una pelea. Su lobo se sentía miedoso y rabiosos ahora.

Retrocedió intimidada por el gruñido, esa era una alfa pura, más fuerte, más intimidante, más agresiva también, temperamental y vengativa.

Se dio cuenta que la había pateado en su muslo, lugar que le duele con un ardor insoportable.

- Mierda... -murmuró sabiendo que estaba jodida. Totalmente jodida.

- Te voy a matar, Hirai -la Alfa pura se enderezó dispuesta a pelear con todo, y con todo me refiero a con lo poco que podía dejar en el hospital a Momo.

Momo retrocedió un paso más, viéndola fijamente, no podía perderla de vista si quería salir viva de ahí. Ya estaba jodida con solo patear a su hermana y a ella.

- Maldita perra -dijo la Alfa pura, más conocida como Lisa. Esta pateó con fuerza su abdomen dejándola de rodillas y jadeando en busca de aire.

No pudo evitar otra patada en su rostro, su vista era borrosa y la estabilizó poco a poco.

Cuando alzó la vista, un aroma totalmente conocido y querido por Momo se hizo presente, un aroma que hizo su lobo aliviarse y hacerse notablemente feliz.

Dahyun había estado en sus clases y sintió que algo estaba mal, su pecho ardió y salió corriendo del aula sin siquiera explicar nada al profesor que la llamó varias veces.

Algo estaba mal, muy mal. Su pecho ardía y sabía que tenía algo relacionado con Momo, lo sentía así. Debía buscarla.

Tardó en encontrarla, pero la encontró golpeada en el suelo arrodillada mientras Lisa le daba una patada más en el rostro que la tiró al suelo.

Su lobo y ella enfurecieron. Se dejó llevar por su lado animal, atrayendo a Lisa a un gran golpe en el rostro que destruyó la intimidación de la Alfa.

Dahyun no estuvo satisfecha con eso, Lisa la ha ayudado varias veces en cosas de las clases pero eso no le importaba, podía ser su amiga pero no se metería con su Alfa, no se metería nadie con Momo.

Golpeó de nuevo, una y otra vez hasta que Lisa alzó sus manos en rendición y aclaraba su vista.

- ¿Dahyun? ¿Qué mierda? -su amiga estaba confundida, ella solo está defendiendo a su hermana de Momo, no sabía de qué, solo están defendiendo.

- No toques a mi Alfa -no se contuvo, su voz de Alfa salió tan intimidante que Lisa dio pasos hacia atrás.

Dahyun ayudó a Momo para llevarla a la enfermería ignorando a todo y a todos que estaban a sus alrededores.

La enfermera no estaba ahí, así que solo tomó las cosas que ocupaba y curó las heridas de su Alfa como pudo, con lo poco que aprendió en su adolescencia.

Ninguna dijo nada.

Momo estaba avergonzada de no poder defenderse.

Dahyun estaba concentrada en cuidar de Momo.

- Va a arder -avisó y presionó una gasa con alcohol en el labio de la menor. Momo cerró sus ojos y gruñó un poco por el dolor. Dahyun sopló intentando calmar el dolor que pasaba su Alfa.

- ... Lo siento -lo sentía, por ser una carga, por ser devil, por tener que depender tan fácil de Dahyun. La menor se confundió.

- No sé por qué, pero estoy segura que es una estupidez... Te quiero -lo último lo dijo cuando Momo bajó su cabeza con vergüenza, le gustaba recordarle a su alfa lo mucho que la quería- ... ¿Por qué tu cuello está rojo? A mí me ardió el pecho y tu marca tiene los alrededores de color morado.

- Antes de la pelea con Lisa, había otro Alfa del cual no presté atención. Me empujó y escupió, ardió mucho -tentó su cuello acariciando la marca, el tacto la hacía calmar y arder a la vez, era raro.

Dahyun tuvo que contenerse a no ir a buscar al Alfa y romperle el rostro por creer que tiene derecho a que su saliva toque la marca que ella dejó en Momo.

En igual de eso, quitó suavemente la mano de Momo y la reemplazó con la de ella para acariciar su cuello. Dahyun no tenía la marca porque simplemente no se les ocurrió hacerla, solo pasaron los días y la marca no llegó. La harán, pero después.

Momo cerró los ojos al tacto de su Alfa, esta vez no ardía tanto. Se sentía que calmaba casi todo el ardor, parecía relajar todo su cuerpo el cual estaba tenso por soportar todo aquello. Y solo era el primer día, aunque Dahyun ya no la dejara sola. Dahyun estará con ella.

La mano de Dahyun fue remplazada por la lengua de la misma, la menor se había acercado a su cuello apartando un poco de su cabello para tener acceso a el cuello desnudo de Momo y lamerle.

La marca era un lugar sensible, y que la saliva que otra Alfa cayera en ella solo les arderá a las dos, si la reemplazaba con la suya pues el ardor calmará más o incluso desaparecerá en segundos.

La coreana se separó viendo el cuerpo relajado de Momo, sus ojos estaban apenas abiertos, sus hombros estaban caídos, y apenas se podía sostener, era como si estuviera adormilada.

La abrazó, Momo solo se dejó caer en el hombro de Dahyun, estaba notablemente cansada y se dejó llevar por el sueño mejor.

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