Pero es que la gente cree que las historias siempre tienen un personaje, un animal, un objeto que lo hace especial. Vale, te explicaré que no todas las historias tienen un buen argumento, quedando así como algo nada relevante. ¿Recuerdas ese momento del día en el que estás acostado en tú cama y te quedas pensando qué hacer? El hecho de esto es que muchos de nosotros solo nos quedamos pensando esas historias increíbles, cosas que podrían pasarnos pero que a la final nunca suceden. Una vez más, historia que no tiene argumento alguno en nuestra realidad y vida. Me pongo a pensar mucho en esto porque soy uno más del montón que sueña con hacer tantas cosas en la vida, tanto así que poco a poco vuelvo esas historias verdaderas, aprender a cantar, dibujar, pintar, cocinar, ¡Lo que sea! poco a poco en mi vida eso ha afectado para seguir aprendiendo cosas nuevas. Tengo en mente que los libros siempre atraen a la gente por su contenido, por su argumento y todo lo que lo hace especial es la manera en que el autor escribe y se expresa para mostrarle esa idea a los demás, teniendo algo en común. En un principio yo mismo dude sobre escribir este libro, aunque luego me la jugué por tener un nuevo argumento, una nueva experiencia en mi vida de escribir lo que pienso para mostrar distintos sentimientos y opiniones de lo que puede o no puede estar sucediendote.
Normalmente he divagado mucho entre las ideas que propongo. Quizas porque me divierte confundir al lector y a la vez expresar distintos puntos de los cuales me gusta hablar, pero en algo que debo enfocarme para mostrar en este capítulo es que, no toda historia conlleva a una buena experiencia, a un buen argumento, a una realidad linda, tanto así que la apartamos y hacemos como si nunca hubiera pasado. Lo curioso de ello es que nos hacemos los tontos porque mientras me dicen "No me pasa nada, todo está bien" por dentro estás muriendote de la tristeza como el día en que tú telefono inteligente se le partió la pantalla, o como cuando te robaron y no supusiste que hacer. Es normal, todos somos así y al final de ello no solo tratamos de olvidarlo, sino que hacemos como si nada jamás hubiera pasado. Te diriges en busca de tú Ipod, unas cornetas y solo escuchas canciones que te hagan sentir concuerdo a tú animo, ¿Has notado como la música puede apoderarse de todos tús sentidos, y de tús sentimientos? Desde la vez que te dedican una canción, un amigo o tú pareja y al otro día esa persona se va y quedás diciendote a tí mismo "¿Y ahora?" Sí, como el día que tú serie de televisión preferida tipo Zombies,doctores locos, una chica en busca de un trono desde el otro lado del mundo con dragones, llegan a su fín y no encuentras otra cosa que ver. Bueno, así sucede con la música, pero con el fín de que las historias que un día vivíste o soñaste, en una realidad diferente a la que pensabas crear y realizar, se volvió otro deseo más sin magia y una historia sin argumento algúno.
Puede que la magia esté en la música, tús historias se crean a partir de esos sonidos o voces, y te llenas de felicidad, de rabia, de tristeza o de todo aquello que quieres expulsar para expresarle al mundo. Esa vez que te rompieron el corazón y buscaste una canción de algún artista romantico por despecho y te pasabas horas y horas tipo "Te extraño y lo hago más que ayer". La música nos envuelve en otro mundo casi al mismo nivel de volverse una droga saludable para nosotros mismos, el mejor medicamento para todo momento, hasta para ese momento en el salón de clase y no deseas escuchar a ese profesor que solo habla y habla tantas tonterías que no tienen relevancia con el tema pero que te regaña por hacerlo sí te ve con medio audifono en la oreja tapado con tú mano derecha y acostado en ella fingiendo sueño.
Tambien podría referirme a una historia de amor que no llego a nada, que solo fue un juego, una historia sin terminar, dejandola a la mitad, creyendo una ilusión que jamás pasó, en una espera hacia algo que pensaste que iba a suceder en algún momento de la vida mientras te decían:
