Nick: Atacarlas ahora solo sería aprovecharme de su estado, así que por esta vez podrán huir. Volveré cuando se recuperen.
Narrador: Después de decir eso, desapareció.
Mizu: Al parecer, sigue a Miski. Pero, ¿por qué? Si ella no ha hecho nada malo, mejor se lo preguntaré cuando despierte. Tengo que llevarla a mi casa rápido.
Narrador: Mizu corre lo más rápido que puede para llegar a casa.
EN SU CASA:
Cocinera: Mizu, ¿a dónde diablos fuiste? Solo tenías que sacar la basura. Eso no lleva 2 horas.
Mizu: Lo siento de verdad.
Narrador: La cocinera observa a Miski.
Cocinera: ¿Quién es ella?
Mizu: Su nombre es Miski.
Miski: Hola.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
C
ocinera: Es muy linda y está chiquita.
Narrador: La cocinera carga a Miski como a un gato y le da una galleta.
Cocinera: Bueno, Mizu y Miski, vayan a dormir.
Miski se sube a la espalda de Mizu.
Mizu: Bueno, nos vamos.
Ya las dos acostadas.
Mizu: Miski, ¿y tus padres? ¿Dónde están?
Miski: Creo que no tengo padres. Y los tuyos, Mizu, ¿dónde están?
La mirada de Mizu cae en lágrimas.
Mizu: Prefiero no hablar de eso.
Miski: ¿Y por qué no usas tus poderes del sol y solo usas lo de luz?
Mizu: ¿Y tú cómo sabes que tengo poderes del sol?
Miski: Me sellaste mi oscuridad, pero no mi luz. Mi habilidad para analizar no desapareció.
Mizu: Bueno, como sea, no los ocupo porque vienen de mi padre...
Miski: Mizu, ¿quién es tu padre?
Mizu: Mi padre es el dios del sol.
Miski: ¡¿Cómo?! Pero es imposible. Eres una semi humana, no una semidiosa.
Mizu: Sí, de hecho, soy una mortal con el poder de una semidiosa, pero él hizo algo imperdonable.
Narrador: Mizu apretó tan fuerte las manos que empezaron a sangrar.
Miski: ¿Qué pasó?
Mizu: ¿Acaso nunca supiste qué les pasó a todos los semi humanos?
Miski: No.
Mizu: Está bien, te contaré qué fue lo que pasó y también por qué soy hija del dios del sol...
