│Capítulo O6│

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𝑆𝑒𝑢́𝑙, 𝐶𝑜𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝑆𝑢𝑟.

"Tengamos una cita"

Era la frase que se repetía en su cabeza una y otra vez desde aquel día en la oficina del alfa, ya habían pasado cuatro días y aún podía sentir como sus sentidos se adormecian debido a la gran cantidad de feromonas que Jungkook se estaba encargando de liberar.

No iba a mentir, le alegraba llegar a su salón de clases y encontrar un lindo arreglo de flores o pequeños postres en su lugar, aquello lo hacia sentir tan especial y no podía no evitar sonrojarse al momento de hacer contacto visual con el alfa, quien con coquetería le guiñaba uno de sus ojos o le sonreía de la manera más bonita del mundo, tampoco podía evitar ilusionarse al recibir cada día un mensaje de buenos días, un mensaje donde le preguntaba sobre su día o un mensaje donde le preguntaba como estaba, sin duda alguna ese alfa se estaba esforzando para lograr cautivarlo y finalmente enamorarlo.

Saliendo de sus pensamientos observó su clóset, no sabía que debía ponerse, claramente ropa, pero no qué clase de ropa, le había insistido a Jungkook para que le dijera a donde iban, éste simplemente le había dicho: "Estaremos al aire libre", no sabía que ponerse y si dentro de unos minutos no encontraba que ponerse iba a entrar en una crisis existencial donde podría cancelar la cita. Sin embargo su teléfono sonó, anunciando un mensaje así que al revisar el destinatario se dio cuenta que era su primo, su salvación para esos casos de crisis extrema.

Al leer el mensaje no pudo evitar sonreír mientras le agradecía a su primo por la ayuda, pronto dejó su teléfono en algún lugar de su habitación para así tomar las prendas que utilizaría, Hobi tenía un buen sentido de la moda así que no dudaba en que él le había sugerido le quedaría bien además el día estaba soleado perfecto para salir a una cita.

    — Debo invitarlo a salir —susurró para sí mismo mientras deja a su ropa sobre la cama.

Aun tenía una hora y media antes de que el alfa llegue a buscarlo, porque sí, el alfa muchas veces lo había ido a dejar a su hogar luego de las clases además ya había compartido sus números de teléfono por lo que podría comunicarse cada que quisieran hacerlo. Así que colocando música en una pequeña bocina que tenía en su habitación, se dirigió a el baño, debía darse una ducha para poder comenzar a arreglarse, él sabía que era muy bonito pero esta vez quería estar mucho más bonito, que Jungkook no se llevará una decepción al verlo.

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Con una sonrisa en sus labios observó su reflejo en el espejo, su cabello tenía pequeñas ondas y un conjunto veraniego color blanco cubría su cuerpo, era sencillo pero casual al igual que fresco así que no se terminaría asando del calor que iba a tener, un poco de bálsamo labios de cereza y un poquito de color en sus mejillas aunque aquello era más debido al sonrojo por sus nervios que por el maquillaje aplicado.

Soltando un pequeño suspiro tomó su teléfono antes de salir de su habitación, el timbre había sonado hace unos segundos atrás así que debía darse prisa para poder abrir la puerta, sus padres no estaban en cada y no quería molestar a las personas del servicio, así que con una tímida sonrisa se acercó a la entrada principal para abrirla con cuidado.

El aire abandonó sus pulmones al ver a el alfa frente a él, se veía tan guapo como siempre aunque su ropa era más casual que la que normalmente utiliza para dar clases en la universidad, un pequeño ramo de margaritas le fue extendido por lo que con una gran sonrisa lo tomó entre sus manos.

𝑃𝑟𝑜𝑓𝑒 𝐽𝑢𝑛𝑔𝑘𝑜𝑜𝑘│𝐾𝑜𝑜𝑘𝑇𝑎𝑒-𝑂𝑚𝑒𝑔𝑎𝑣𝑒𝑟𝑠𝑒. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora