05 - our last first little kiss

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11:15 PM

— Y bien, Ellen. ¿Qué hacías afuera a estas horas de la noche? ¡Tú sí que eres idiota! — exclamó Norman mientras se encontraba de brazos cruzados frente a mí. Estaba acorralada en el sofá sin poder verlo a los ojos, con esta ropa húmeda e incómoda.

— Norman, yo... — Traté de buscar la excusa perfecta, pero era imposible; estaba condenada. Sabía lo que me esperaba si él era capaz de acusarme con mi madre. De cualquier forma, mi mente solo reproducía lo que había pasado hace poco.

— ¡Nada! Tienes una suerte por Dios... — Dio un corto suspiro y posó su mano sobre su frente en forma de enojo. — ¿Sabes que soy yo quien está a cargo de ti cuando nuestros padres no están? ¡¿Lo sabes?!

— Querrás decir nuestra madre y su esposo. — Respondí con desagrado al comentario de mi hermano. Ese hombre era un maldito desgraciado y NUNCA iba a remplazar a mi padre; su cinismo y retorcido comportamiento me hacían odiarlo cada día más.

— ¡Ese no es el punto! Son las 11:00 PM, 11:00, Ellen. — Hizo énfasis en el horario mientras me veía con frustración. — Dios... ¿Qué habría sido de ti y, sobre todo, de mí si ellos ya estuvieran aquí? Te rogué que no escaparas, pero siempre lo haces.

— No es como si realmente te preocuparas por mí; estás más enfocado en salir con tus amigos, ir de fiesta en fiesta como si cambiar de calcetines fuera. — Fijé mi mirada en él; odiaba que quisiera aparentar ser un hermano ejemplar cuando era todo lo contrario.

No respondió; lo suponía. En cualquier momento buscaría una tonta excusa para evitar mis palabras. ¿Qué era lo peor que podía decir? ¿La verdad? Si yo no le importaba, él menos a mí.

— Mocosa... ¡Ahg! Eso a ti no te incumbe. — Dijo mientras hacía una gran mueca de desagrado al verme con desprecio.

— Entonces a ti no te interesa lo que yo hice esta noche. — Me levanté del sofá para dirigirme hacia mi habitación y cambiarme de una buena vez. Mientras subía las escaleras, dijo algo que hizo que la sangre me hirviera de la rabia que sentí.

— Ellen, esta vez te lo dejo pasar, pero si vuelves a escaparte, ten por seguro que revelaré todo lo que has estado haciendo a mamá. No juegues con fuego; la próxima vez no habrá piedad. — advirtió Norman con tono amenazante, dejando claro que las consecuencias serían mucho peores.

Me quedé por unos segundos congelada en las escaleras mientras mordía mi labio inferior por la rabia, sus amenazas no eran nada a comparación de lo que él hacía...Quien se cree que es.

Solo suspire y me dirigí hacia mi habitación azotando la puerta bruscamente demostrando mi molestia. Solo quise cambiarme y recostarme un poco para pensar.

Estaba en mi espaciosa y oscura habitación, recostada en mi cama con la mirada fija en el techo; miles de cosas se me pasaban por la cabeza. Miré cuidadosamente mi celular; lástima que en esto apenas y puedes hacer un par de cositas... Suspiré; cada vez se hacía más tarde y yo no podía dejar de pensar en lo que pasó momentos atrás.

★  ★  ★

— Ellen... — Dijo, mientras se acercaba un poco más hacia mí. — Antes de que regrese a mi casa, quería...

Antes de que terminara, tropezó con una roca, apoyándose en mis hombros; el impulso hizo que nuestros rostros estuvieran tan cerca que nuestros labios se rozaran el uno con el otro...

Me separé rápidamente; todo pasó tan rápido y él parecía un tanto avergonzado por lo que acababa de pasar. Su rostro se tornó en un tomate viviente; la mirada fija hacia el suelo mientras parecía tratar de tomar conciencia de lo que acababa de suceder. Sin embargo, decidió sacar una pequeña estrellita de su bolso, tomar mi mano y entregármela para luego salir corriendo.

Estrellas Conectadas | BK ☆ | (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora