Pheromone Bullet - Bala de Feromonas

Testimonio 13

Cuando Lee-won pudo recuperarse un poco de la situación, decidió dejar de pensar demasiado en el 'incidente' con Caesar y concentrarse en su trabajo. Aún tenía pendientes relacionados con los casos de expropiación y ahora estaba retrasado en sus reuniones del día.

Salió de su habitación a toda prisa, con su traje y acercándose a la sala, tomó el maletín, pero no encontraba su teléfono. Rebuscó por todos lados y cuando estuvo a punto de preguntarle a Caesar, éste se encontraba de pie, sosteniendo el teléfono delante de él.

__Gracias...__ Dijo dando un suspiro y tomándolo de sus manos. La actitud de Lee-won era distante.

Caesar sonrió y se retiró dándole su espacio, en silencio.

__Espera...__ Tomó el teléfono y lo agitó levemente __Tú usaste esto?__

__Por qué debería?__ Dijo levantando una ceja.

Lee-won reaccionó agresivamente__No me mientas Sergeyev... Sabes qué estoy arriesgando mucho en mi reputación por ayudarte?__

Caesar entrecerró los ojos y se cruzó de brazos __Creí que el abogado Jung aceptó este trato por el dinero que le ofrecieron...__

__Y qué si así fue? Acaso querías que defendiera a un presunto asesino gratuitamente?__ Levantó la voz.

__...__ Caesar volteó y se apoyó cerca de la puerta de entrada __...Esto es por lo de ayer... verdad?__ Dijo frotándose el cabello agresivamente __Traté de explicarte...__

El asiático interrumpió __No sigas...__

__Abogado!__

Lee-won suspiró con furia __Tengo que irme... Hablaremos de tu caso más tarde... pero necesito que me dejes en paz ahora__ Su voz fue bajando de tono, hasta debilitarse. Su cuerpo aún no se recuperaba por completo

El asiático empezó a caminar hacia la salida.y cuando pasó junto a Caesar, se mareó ligeramente perdiendo el equilibrio.

El rubio lo sostuvo rápidamente. __Estás bien? Crees que puedes irte en estas condiciones?__

__Tengo que ir a una reunión...__

__Espera...__ Caesar lo ayudó a apoyarse y lo sujetó por los hombros __Hay algo que quiero intentar...__

__Qué?__ Lee-won levantó su rostro con asombro.

Vio al rubio, que respiraba lentamente con los ojos cerrados. Mientras un leve aura color azul, fue desprendiéndose de su cuerpo.

Las feromonas de Caesar se esparcieron en el ambiente y cubrieron delicadamente al asiático.

__Por qué te sorprendes?__ Dijo sonriendo con los ojos cerrados __Tú fuiste quién me dijo que mis feromonas aliviaban el dolor__

Lee-won se sintió avergonzado y su rostro se enrojeció, al tener leves recuerdos de lo que había pasado.

Después de un momento, empezó a sentir como su cuerpo se relajaba y el dolor era menos intenso. Luego Caesar dio un paso atrás y se alejó dándole espacio al asiático para que saliera.

__Ahora puedes ir a tu reunión...__

Lee-won salió rápidamente cerrando la puerta detrás de él. Se apoyó un momento y notó como su corazón se había acelerado.

Durante varias horas el asiático recorrió el centro ejecutivo de Seúl visitando a un par de clientes. Sus reuniones fueron provechosas y parecía que las cosas estaban listas para enfrentar su próximo juicio.

Su ánimo fue mejorando, pero a pesar de sus avances, en su mente todo estaba nublado. Solo podía pensar en Caesar, pero no de una forma agradable. Más bien se sentía agobiado por el misterio que lo rodeaba.

De camino al apartamento unas horas después, decidió que si aquél hombre rubio no iba a ser sincero con él, investigaría por su propia cuenta.

Recordó aquél número que lo llamó la primera vez y se dispuso a marcar para poder encontrar algo de información relevante. Mientras más rápido se solucionara ese caso, más rápido el volvería a su vida normal y se olvidaría de todo lo que pasó, como si fuera producto de una borrachera cualquiera.

Después de marcar un par de ocasiones y no obtener respuesta, dejó un mensaje en la contestadora para que le devolvieran la llamada.

Caminando de regreso al bloque de apartamentos, divisó a la distancia el cobertizo en el que había encontrado a Caesar.

__°°°Talvez fui demasiado grosero esta mañana°°°Debería disculparme°°°Sea lo que sea que haya pasado... tengo que resolver esto°°°Además... ese hombre°°°No me dan buena espina los sujetos cómo él°°°__

De pronto Lee-won dio un sobresalto al escuchar una voz a la distancia.

__Qué te tiene pensando tanto abogado!?__ Dijo Caesar desde el balcón unos pisos más arriba.

__Ah... solo estoy cansado__

__Es algo tarde, deberías subir...__ Esbozó una sonrisa.

Lee-won sonrió con algo de incomodidad __Sí...__

Dio algunos pasos arrastrados por las escaleras del edificio y estando cerca de la puerta, escuchó que su teléfono sonaba.

Era aquél número que lo había llamado la primera vez.

Lee-won se quedó pensativo un momento, pero retrocedió algunos pasos y caminó por el pasillo para contestar.

__Abogado, está todo bien?__ Dijo una voz masculina del otro lado del teléfono.

__Eh... sí, sí. Lamento haber llamado a esta hora__

__Supongo que el caso se está complicando un poco...__

__Necesito algo más de información...__

__Tiene suerte... estaré en Seúl en un par de días. Pero Abogado Jung...__

__Sí?__

__Nadie puede saber que nos reuniremos...__

Lee-won miró hacia el pasillo y bajó su tono de voz __Bien...__

__Le enviaré la dirección en un mensaje... y recuerde, el Señor Sergeyev no debe enterarse de esto...__

Lee-won suspiró y colgó el teléfono y luego susurró para sí mismo.

__Creo que ya es hora de saber la verdad, Caesar__

***