Bare Hearts -; NichoJoo | &TEAM

D O S

Euijoo se había despertado con el pie izquierdo. Primero peleó con sus compañeros de cuarto porque se acabaron toda la leche y no pensaron en traer más, por lo tanto, no pudo desayunar; luego, mientras iba hacia un carrito de café para comprar dicha bebida, un idiota resbaló y lo golpeó en la boca con su enorme frente, lo que le causó un poco de sangrado y dolor en los dientes. Y por último, pero no menos importante, el nombre de Nicholas estaba sonando por todo el lugar como si fuera un himno y eso, honestamente, lo tenía cansado.

Literalmente estaba siendo un día de mierda para él y pensó en culpar a su interacción con Nicholas la noche anterior, pues de no haber sido por él, seguramente hoy hubiera despertado por el canto de los pajarillos y no el de su irritante alarma, y seguro también se hubiese levantado sonriente y no con la cara de culo que llevaba.

- Uy, te ves genial. - se burló Taki con sarcasmo una vez lo vio entrar a la sala de periodismo. - ¿Cuál es tu secreto para despertar tan radiante, eh?.

- Que te jodan, Taki. - el menor rio, pues no era usual que Euijoo soltara ese tipo de palabras a menos que estuviera de verdad irritado o molesto. - ¿Hicieron lo que les pedí ayer? - se quitó su mochila para ponerla sobre su mesa de trabajo.

- Mhm. - asintió, acercándose a él para darle un borrador sobre la cosecha de verano. - Es uno de mis peores trabajos. - sonrió, viendo a Euijoo leyendo el papel con atención.

- Es aburrido. Me encanta. - despegó la vista de la hoja para buscar con la mirada a su mano derecha. - Kazuha, imprime esto, estará en primera plana. - la mencionada se acercó para llevárselo sin decir nada, lo que era usual en ella. - ¿Y Harua?.

- Está en el baño, un imbécil le tiró café encima sobre su suéter favorito y está intentado ver si puede salvarlo. - rodó los ojos con evidente enojo, algo que hizo suspirar a Euijoo.

- Al parecer no soy el único que se despertó con el pie izquierdo. Los estúpidos están a la orden del día. - murmuró antes de alzar la vista hacia Taki. - ¿Podrías conseguirme un cafecito? Por el golpe que me dieron en la boca se me olvidó comprar uno. - Taki sonrió, inclinándose hacia él.

- ¿Puedo hacer un reportaje sobre el partido? - Euijoo entrecerró los ojos.

- No.

- Hmm, malo. - se dio la vuelta para ir por el café de Euijoo, encontrándose con el profesor apenas entrando al aula. - Buen día, señor, se ve muy lindo hoy, eh. - le guiñó un ojo.

- No te pondré en el lugar de Euijoo.

- Lo sé, lo siento. - esperó a que se diera la vuelta y lo observó con rencor para murmurar ahora que estaba lejos de él - Bastardo.

- Byun. - lo llamó, causando que el chico se levantara de su silla para hacer una reverencia.

- ¿Qué pasa, señor Suh? - preguntó de forma amable mientras intentaba darle su mejor sonrisa.

- Necesito hablar contigo sobre el periódico, es urgente. - carraspeó, tomando asiento para que el morocho lo hiciera también - ¿Por qué estás evitando la sección deportiva otra vez? - Euijoo no quiso que su resoplido de frustración fuera tan evidente, pero a juzgar por la cara del hombre, vaya que lo había sido.

- Profesor, sólo creo que esa sección no aporta nada importante a comparación de otras que sí hablan de cosas que podrían ser útiles en el futuro; como la sección de medicina, por ejemplo. - el hombre bufó.

- Euijoo, sé que eres el líder del equipo, pero no por eso sabes lo que es mejor para todos. Estás aprendiendo. - sonrió ladino antes de verlo seriamente. - No quites la sección deportiva o tendré que quitarte a ti de tu silla. - Euijoo frunció el ceño. - Rimó, ¿no?.