Me Convertí En El Villano Con El Que La Heroína Está Obsesionada

180

Capítulo 180: La Ciudad Teñida de Negro

[¡Muahahaha! Así es. Por supuesto, nunca pensé que fueras a caer tan fácilmente, así que pensé que era sólo un espectáculo, pero Arielle se estaba volviendo loca e incluso pensé en irrumpir en Corea para vengarme de ti de una vez].

"Dios mío, presidente. ¿De verdad soy una persona tan fácil de matar? ¡Hahaha! Sólo tus palabras son apreciadas, pero no hay necesidad de ir tan lejos. Los medios siempre exageran las cosas de todos modos".

[Supongo que tienes razón. Pero, por cierto, vi noticias sobre ti en algún sitio y mi hija estaba tan sorprendida y llorando y esas cosas. Parecía que quería verte...]

"Haha, ¿Arielle? Entonces debería ir a verla más tarde".

[Claro, ven a visitarnos cuando quieras. Ciudad Celosía siempre está abierta para ti. Ah, y he oído que la reunión de la Catedral o algo así será pronto. Deberías venir a verla entonces].

-¡Muahahaha!

Con la sonora carcajada de Atlas, la llamada llegó a su fin.

"Phew..."

Tras finalizar la llamada con Atlas, el soberano del Atlántico Norte, respiré aliviado.

...¿Por qué vendrían a Corea a buscar venganza? ¿Venganza por qué?

A partir de ahora, designaré a Soobin como mi línea directa y haré que reciba mis llamadas en su lugar. *Suspiro*

Pero, desde que escuché que Arielle estaba preocupada por mí, no pude dejar de pensar en ella.

Hmm... ¿Y si intento reclutar a Arielle a Ego Stream? Si lo hago realmente bien, ¿podría ser posible? Por supuesto, necesitaría el permiso de Atlas...

Mientras pensaba en eso, algo entró en mi boca.

Era una rodaja de mandarina amarilla.

"¿Hmm?"

Sin pensarlo, abrí la boca y la metí dentro. Estaba ácida y sabrosa cuando la mastiqué.

Cuando miré hacia abajo, vi a Seo Jayoung tumbada en la cama leyendo un cómic, comiendo una mandarina con una mano. Probablemente me estaba dando una mientras comía para ella misma.

Jugueteaba con la mandarina con su pequeña mano, pelándola y metiéndome un trozo tras otro en la boca. Las mangas de su sudadera eran demasiado grandes, así que sus manos parecían aún más pequeñas.

Mientras masticaba la mandarina que me había metido en la boca, pensé.

...Pero espera, ¿cuándo trajo esta mandarina?

"Oye, ¿cuánto tiempo llevas aquí?"

"...Entré mientras hablabas por teléfono. Ni siquiera te diste cuenta, ¿eh?"

Dijo Seo Ja-young, comiendo una mandarina.

...Realmente está destacando de una manera extraña.

"Bueno, vamos ahora."

"¿Uh? Acabo de llegar..."

"Tenemos que desayunar."

"Pero mi desayuno son mandarinas... ugh..."

Levanté a Seo Ja-young con mi telequinesis y la llevé fuera.

Al principio daba vueltas en la cama, pero ahora está tumbada en el aire leyendo un cómic.

...Va a arruinar su vista así.

En fin, salí así al salón.

Mi cuerpo está mucho mejor ahora, así que puedo usar mis poderes tanto como quiera sin ningún problema. Probablemente. Y a veces tengo que usarlos poco a poco para mantener mis sentidos agudizados.