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El solamente frunció ligeramente el ceño tratando de acercarse de nuevo. Pero nuevamente retrocedí.

-¿Cómo sabes mi nombre?- su rostro reflejaba confusión por mi comportamiento que había cambiado rápidamente.

-Tu...- tragué grueso - ¿no me recuerdas?

Las imágenes de la vez anterior que nos habíamos visto aparecieron en mi mente. Y las palabras que habían dicho de el también las recordé.

"Bueno, que puedo decir. En resumidas cuentas es el mismísimo diablo con cara de ángel.

—Seduce a las chicas que tienen un futuro "asegurado" para después manipularlas y conseguir sus objetivos.”

—Lamento realmente no poder recordar quién...— hizo una pausa abruptamente. Su boca y ojos se abrieron revelando sorpresa— ¿Yeji?

El tono de voz incrédulo era el mismo que yo había usado al decir su nombre. No sabía cómo sentirme en ese momento, mi mente era un remolino de emociones y pensamientos.

—Yeji...— volvió a mencionar mi nombre.

—¿Si me recuerdas?— cuestioné con el nuevo sentimiento que bombeaba más fuerte mi corazón.

—Claro que sí — me dio una sonrisa triste bajando su cabeza y pasando sus manos por su cara.— la futura Alfa del Norte.

Inmediatamente todo quedó en silencio. Yo misma no sabía con que responder, todos los años en los que supuestamente lo "odiaba" pasaron a segundo plano enseguida. Pero quería ser aún sensata, y no volver a equivocarme.

—¿Que haces aquí Félix?

Levanto su cabeza de nuevo para verme, y miro a otro lado.

—Soy el futuro Alfa de uno de los territorios del Sur, mi padre me envió para asistir a la reunión que se iba a llevar a cabo.

—¿Iba?— pregunte confundida — ¿No fue la junta hoy por la tarde?

—Lo hubiera sido si es que el Alfa de la otra manada no hubiera enviado un mensaje avisando que llegaría hasta mañana por complicaciones — su tono y su rostro cambiaron inmediatamente cuando empezó a hablar de eso.

—¿Cuál es su propósito al venir aquí? Y, ¿que haces dentro de mi casa?— mis interrogantes salieron como rayo de luz.

—Tu padre me otorgo una habitación para descansar, en cuanto a lo otro...— me miró con...¿arrepentimiento?

—¿Que van a hacer?— temi lo peor acercándome a él tratando de buscar sus ojos de nuevo.

Era irónico, en vez de hablar sobre nosotros mismos, estábamos hablando sobre cosas exteriores que estaban a nuestra responsabilidad.

—Conquistar el Norte — susurro apretando los labios.

—¿¡De nuevo con lo mismo!?— lo agarre de la camisa con el mismo sentimiento de hace 10 años cuando quería romperme a llorar — ¿¡Porque!?

El quitó mis manos de encima suyo lo menos brusco posible reflejando dolor por mis palabras y mi actitud.
Yo me llevé las manos a la cabeza viendo como esto estaba cambiando radicalmente. ¿Porque él?

—¿Porque insisten en hacerle daño a nuestro territorio?— mi voz salió entrecortada— te dije Félix, yo te lo dije,si vas a luchar contra mi gente, yo misma lo haré aunque eso cueste mi propia vida.

—¿Siquiera sabes las oscuras razones por las que el Norte tiene que dejar de ser liderado por el linaje de tu padre?— su tono está vez fue serio y su mirada igual, dio solo un paso en mi dirección — Yeji, tu misma deberías saber porque debe haber una batalla.

They're mineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora