killer | JJK

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Notó mi despertar, mierda.

—La pequeña ha despertado.. —susurró acercándose a mi, me levanto al estilo princesa e hizo que me siente en su regazo, es hasta este momento donde me di cuenta que mis labios estaban vendados.

Estaba sentada en sus piernas, con un miedo impresionante en mis ojos, Yoongi estaba perplejo y asustado, quien diría que mi terapeuta trabaja para mi secuestrador.

Jungkook le pidió a Yoongi que se fuera, y el titubeando lo hizo, me miró, y allí estaban, esos ojos que me habían atormentado y la razón por la que iba a terapia, el había matado a Kai, ese patán, ese cuerpo de ángel con interior demoníaco.

En un movimiento ágil, me retiró mi venda en los labios, y me vio, toda golpeada y desaliñada.

—¿Qué te han hecho? No debes dejar que te toquen, solo yo puedo tocar..—empezó a acariciar mi mejilla suavemente con su dedo anular. —tus adorables y virgenes facciones.

¿Facción virgen? ¿Eso existe?

—¿Me responderás? —preguntó algo enojado. —¿O te comió la lengua... —abrió mi boca con sus dedos y pellizcó mi lengua acercándola a su mejilla. —el ratón?

Soltó mi lengua y tragué gordo, esto me estaba poniendo nerviosa, muy nerviosa.

—F-fue un chico.. rubio.

—Jimin... —susurro y tenso su mandíbula, parecía que iba a explotar, trate de levantarme de su regazo pero lo impidió. —¿Qué tratas de hacer? Estás aquí, libre no te puedo dejar.

—M-mis cosas.. —susurre, si usaba esa "excusa" quizá podría escapar de este enfermizo escenario.

—Iremos mañana, pero ahora podrías ayudarme con.. otros problemas. —oh no, que no sea lo que estoy pensando.

—¡Jeon! ¡Ya llegué! —exclamó una chillona voz femenina, el me bajó de su regazo y me sentó en un sofá.

—Quédate aquí, preciosa, y no te muevas, ¿Necesitas algo? Le pides a la casera que está allí.

Asentí nerviosa y el se fue.

[...]

Sentí como alguien me despertaba con muchísimo cuidado, como si lastimarme fuese pena de muerte.

—Despierte, señora Jeon.

Me levanté y me froté mis ojos con mis manos, bostecé, ¿Cómo me pude quedar dormida en un lugar tan aterrador?

—P-perdón, pero no soy la señora Jeon.. mi apellido es Lim.

—Lo se..—ahora estaba susurrando. —fueron estrictas órdenes del Jefe.

—¿El Jefe?

Asintió, yo seguía sin saber quién era el Jefe, pero solo un candidato me venía a la cabeza, Jungkook, quizá se apellidaba Jeon, la verdad no tengo ni idea.

Me dio ropa, se veía cara, y recién comprada.

Con miedo me cambié tras el sofá, pues me negaba a cambiarme en ese vestidor, por mas de que se viera lujoso y todo el tema, el miedo era mas, me acompañó hasta el piso de arriba.

Todo era diferente.

Lujos, lujos, y mas lujos, invadían la gran mansión, pensar que al sótano no le dan dichosos privilegios.

Me miraron dos personas, una enojada, la otra con deseo.

Esa "una" era una chica de pelo negro —atractiva—, menor que yo, la otra, era Jungkook, quien me miraba como si me quisiera arrancar el vestido y subirme a una cama.

—Yuna, ella es Elizabeth, mi prometida.