killer | JJK

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¿Su prometida? ¿Cómo que "su prometida"? Ay que dios me guarde, yo con este psicopata no salgo ni muerta.

La bonita chica, que ahora se que se llama Yuna, me miró de arriba a abajo y rió.

—¡Ja! ¿Ella? Si, si, claro, ay Kookie, eres mejor que eso. —acarició el pelo de "Kookie"

—Es mucho mejor que tu. —la apartó con su dedo índice. —Así que no reproches, porque se supone que estás comprometida con mi hermano, ¿O eso se te olvida?

Donde duele le dio.

La chica rodó los ojos y se fue, Jungkook me miró y se acercó a mi.

—Pequeña...—acarició mi mejilla, tenía tanto miedo que no quería apartarme, quizá me regañaría como bebé.

—¿S-si?

—Tendremos una gala de máscaras por la noche, la tuya está en tu habitación. —dijo con voz dulce. —Y no salgas de allí. —dijo con voz gruesa y atemorizante.

[...]

Seguí sus órdenes, han pasado tres horas y no me he movido de aquí. Ya son las 7:00pm.

Llegaron unas mujeres y me dieron una caja, se fueron refunfuñando, la caja era blanca con un listón dorado, era preciosa. Abrí la caja, había un vestido blanco que llegaba hasta la mitad de los muslos, con una máscara, una máscara de conejo blanco.

Preciosa, de hecho, con agujeros en los ojos para que pudiese ver. Me cambié.

Me quedaba perfecto, a la medida.

Estuve con mi celular, al cual le habían borrado todos los contactos, todo de todo, no podía llamar a nadie, el contacto de la policía no existía. Me peine, con los millones de peines que había en el baño de mi nueva "habitación"

Una hora paso, y Yoongi abrió la puerta, la cerró con seguro, y —preocupado y con velocidad— se acercó a mi.

—Lizzie, necesito que me escuches.

—¡Hermosa! ¡Hermosa! —me llamaba una voz, su voz, la de Jungkook. —¡Lizzie! ¿Lizzie?

El empezó a tratar de abrir la puerta, impaciente.

Iba a gritar pero Yoongi me tapó la boca y se escondió en el clóset, me acerque a la puerta y abrí, Jungkook me vio como si no me hubiese visto en tres años, se abalanzó a mi y me abrazó, acariciando mi pelo, » Un movimiento lindo para ser psicopata. « pensé.

Me separé de él a los segundos, sonreí a boca cerrada.

—Te ves preciosisima, es increíble creer que esta belleza me pertenece.

» Un poco posesivo, pero fue un lindo cumplido. « Volví a pensar.

Asentí y el se fue, Yoongi salió, lo imito con gracia y yo mordí mis labios riendo, el salió, pero jamás me dijo que había sucedido, se fue y me dejó otro rato sola, hasta que el reloj marcó las ocho, me levanté y Yoongi me escoltó hasta un gran salón de baile.

Gala, ahí te voy.

[...]

Después de que Jungkook me presente como su prometida incontables veces y ganarme algunas miradas pervertidas, me senté en el bar, tome una copa de Whisky de un muchacho que era..

—¿Jin? No juegues, ¿Qué haces aquí? —cuando lo reconocí, abrió los ojos como platos.

—Lizzie, ¿Cómo has estado? —se veía sorprendido, yo estaba igual. —Te ves muy linda, ¿Tu eres Afrodita?

—¿Eh?

—El Jefe, ese es tu nombre en código, yo soy RJ.

—RJ, interesante, ¿Por qué a mi no me tocan siglas cool? —reproché y el negó con su cabeza riendo.

» En lo oscuro se encuentra la luz, y Jin es la luz en este lugar lleno de ogros «

—¡Jin! Ya conociste a Lizzie, mi futura esposa, ¿Qué tal se llevan? —preguntó Jungkook, acercándose con su maquiavélica voz.