Una vez ... en Diciembre (Lucemond)

Lograrás hacerlo

En la guarida de Larys, este no dejaba de golpear las paredes y romper todo aquel que se encontraba en su camino.

- COMO LO DEJARON ESCAPAR¡¡ - Gritó a refiriéndose a sus criaturas.

- Lord Larys, guarde su energía para cuando sea requerida. - Otto también estaba decepcionado, confiaba en que el chico moriría en el tren pero ahora sabía que no estaba solo. Ese par de entrometidos lo tenían.

- MI ALMA, MI DESCANSO DEPENDE DE ESE MOCOSO Y ME DICES QUE ME CALME¡¡?- Larys se giro hacia el anciano mientras lo miraba amenazadoramente.

- Tenemos que idear otro plan. Creo saber hacia dónde se dirigen. -

- ¿y cuál será tu gran plan Otto? - dijo el hombre desgarbado con notable sarcasmo en la voz.

- Descuide Lord Larys. Esta vez el plan no fallará. -

Otto tomó entre sus manos la reliquia del brujo y a través de ella pudo observar el camino que llevaban los tres jóvenes.

___________________________________________________________________

Por otro lado.

Aemond, Jacaerys y Luke se dirigen hacia un puerto para continuar su viaje hacia Driff Mark.

- ¿ y que, caminaremos hasta Driff Mark - el joven castaño ya estaba comenzado a desesperarse.

- No, tomaremos un barco en Harrenhal - Aemond trataba de mantener un poco la calma, pero a veces Luke lo sacaba de quicio.

- Ah, entonces caminaremos hasta Harrenhal -

- NO SU ALTEZA tomaremos un autobús -

- Un autobús, ahh que alivio -

Mientras los cuatro seguían su camino, Jace recogía lirios de un pequeño riachuelo que se encontraba en su camino, todo esto mientras tarareaba felizmente.

- Aguarda un poco más mi querido Aegon. Ya estoy en camino -

Pero Luke se colocó junto a él mientras lo miraba recoger las flores blancas.

- ¿Quién es Aegon? - preguntó repentinamente.

Aemond miró a su amigo tratando de hacer contacto con el.

- Ah...Aegon - suspiro embelesado con tan solo decir su nombre. - es una bella deidad -

Aemond corrió a lado de su amigo tratando de hacerlo callar.

Pero su amigo no le escuchaba. Odiaba que Jace perdiera todo su ingenio y astucia cuando tenía que ver con Aegon.

- Es un oasis en el desierto entre la arena y el calor - suspiraba el castaño al recordar los bellos ojos de ese rubio.

- Jace, cuidado con lo que dices¡¡ - masculló Aemond cerca de su amigo.

Luke comenzaba a sospechar del extraño comportamiento del peli plata.

- Es un delicioso pastel cubierto de crema batida y risas - Y como siempre pasaba, Jace lo ignoró por completo.

Luke miró a Aemond confundido.

- ¿Es una persona o es de verdad una tarta? - pregunto con diversión.

- Es el encantador y el más hermoso sobrino de el señor de las mareas -

Aemond suspiro agotado, Jace le había revelado parte del plan antes de tiempo.

Luke por su parte, e ignorado los felices cánticos y el baile de salón que Jace improvisaba, se levantó tratando de atar cabos.