Al llegar a Tennessee, justo frente a la direccion que habia dicho, tanto Alaric, como Damon y Lizzie bajaron del auto del cazador. Al bajar Lizzie recibio una llamada de Elena, la cual no contestó
—¿Elena?—Lizzie miro obvia al cazador—¿Por que no pudieste decirle donde estamos?
—Porque no es seguro, y no quiero que se ilusione, ademas para Klaus ella esta muerta, no se que podria pasar si los encontramos a los tres
—Si bueno, nada es seguro y yo soy tu complice, de ambos de hecho.—Damon rodo los ojos ante la aclaracion—¿Que debo decirle? Practicamente vivo alla
—¿Duermes en el sofa?— Pregunto Damon, mientras Lizzie caminaba hacia la casa
—Sigo esperando que me corran pero no. No se porque, no los ayudo ni nada
—Esta muy silencioso—Decia Lizzie girandose a los dos hombres
—Si, demasiado
Los tres se adentraron a la casa sin dificultad, al ver que Damon pudo pasar sin problema les dejaba claro que el dueño de la casa estaba muerto, por lo que caminaron por la casa en busca de algo que les sirviera.
—Diablos—Dijo Lizzie al ver las paredes llenas de sangre mientras seguian caminando, frente a ella estaba Damon cubriendo su frente, y Alaric su espalda.
Al llegar a la sala estaban los cuerpos de dos mujeres, una morena y una rubia, ambos cuerpos inertes pero perfectamente sentados en el sofa, incluso con los ojos abiertos. Lizzie suspiro ante eso, ya sabia de que se trataba.
—Fue un vampiro— Dijo Alaric, antes de que Lizzie lo corrijiera
—Fueron Stefan y Mike, de hecho
—¿Como lo sabes?
—Asi son ellos— Dijo Damon— Solian decirles destripadores, perdian el control al comer y las descuartiza, pero luego sienten remordimiento. Yo crei que Stefan lo habia superado, pero beber en bolsa y beber de la vena no es lo mismo.
—Vuelven a armar los cuerpos—Dijo Lizzie moviendo su mano, logrando que el viento haga que la cabeza de la rubia termine en el suelo
—¿A armarlos?
—Tipico de mis hermanitos.
Lizzie le dio una mirada a Damon quien rapidamente tapo los cuerpos con una manta y les tiro gasolina encima, al igual que al resto de la casa.
—¿Que estas haciendo?— Le pregunto el cazador
—Cubriendo el rastro, es claro que no les interesa enconderse, pero a mi si
En ese momento, cuando Alaric dio un paso se escucho un extraño sonido, llamando la atencion de los tres, Damon quito el tapete dejando ver una puerta hacia una parte de abajo de la casa que no habian notado antes, al abrirla vieron que era un pequeño cuarto con cadenas y sangre.
—Vaya, licantropos— Dijo Lizzie observando— Ya vamonos
Cerraron la puerta y Lizzie con un movimiento de mano creo una llama, que gracias a la gasolina, rapidamente empezo a consumir toda la casa mientras ellos salian de alli
Era de noche ya, y Lizzie tenia puesto un vestido suelto, pues tanto Caroline como Elena la habia obligado a festejar su cumpleaños, el vestido era celeste y muy bonito, resaltando el ligero tono rojizo de sus mejillas.
Se miraba en el espejo acomodando la tela del vestido pero sin ganas de festejar aquel dia, ella lo unico que queria era a Stefan... le hacia demasiada falta.
—Tranquilo no voy a llorar— Dijo Lizzie al ver a Damon por el reflejo del espejo— Al menos no antes del pastel
—Es tu fiesta, llora si quieres—Lizzie nego con la cabeza—Stefan, que galan—Dijo tomando una foto de Lizzie y Stefan, en ella se veia al castaño sentado en un tronco, y Lizzie en su regazo tomando un helado, los ojos de ambos brillaban, y sus sonrisas era totalmente hipnotizantes.— Te traje un regalo
—Damon— Lo regaño la bruja
—Se que la Lizzie de siempre ama su cumpleaños, asi que... era lo minimo que podia hacer—Al abrir la pequeña caja que tenia en mano Lizzie se encontró con una copia exacta del anillo de Stefan
—Es...
—Le pedi a una amiga que lo hiciera, asi al menos tienes algo de Stefan contigo
—Gracias— Dijo la castaña colocandose el anillo
—De nada, lucecita—Dijo dejando un beso en la frente de la menor—¿Intentamos sobrevivir?—Propuso extendiendole su brazo
—Intentemos— Contestó la menor

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Phoenix
FanfictionStefan se habia ido, se habia entregado a Klaus para salvar a Damon. Lizzie no iba a aceptarlo, y menos Elena, quien tambien habia perdido a su novio. Tercer libro