El establecer relaciones amistosas es primordial en la vida. Primordial para la sobre vivencia de uno, pero más allá de eso, el bienestar fuera del peligro. Estar a salvo pero solo no es algo que todos disfruten, mucho menos cuando toda la biología gira alrededor de la comunidad y la convivencia. A veces sana, a veces toxica y a veces por conveniencia.
De cualquier modo, el entablar conexiones es lo primordial, cada quien lo hace de modos diferentes y se espera que se siga un procedimiento especifico de acuerdo a quien intenta entablar conexión.
Es por eso que él tiene siempre muchos problemas para entablar amistades, no entiende como hacerlo y tampoco entiende del todo como lo demás lo hacen, por lo que pocas veces sabe como responder.
Sabe que es difícil, pero intentar solo una vez no hace mal.
Estaba echado sobre su cama, recién bañado y disfrutando del libro que le mando su madre, Sitara acostada en su regazo, cuando Draco llegó, azotando la puerta.
-¡Maldito Potter! -gritó apenas puso un pie en la habitación. Con la misma fuerza con la que abrió, fue con la que cerro la puerta. Farfullando maldiciones. Sitara se quitó de sus piernas cuando Theo se enderezó, permitiendo que se sentará en la cama para intentar hablar y entender que le pasa a su amigo.
-¿Que paso? -pregunta, tan fuerte para ser escuchado.
Draco detiene su avance en círculos por el centro de la habitación para mandarle una mirada de flecha.
-¡Que el muy idiota hace una escena en la biblioteca! ¡Por Finningan! ¡Me hace un drama en la biblioteca por el tarado de Finnigan! ¡¿Puedes creerlo?! ¡Yo no se como carajos supo donde estaba! ?¡Ahg! ¡Que puede pasarme de largo tan fácil pero hacer una tormenta porque me atreví a decir algo de Finningan!
Draco se deja caer sobre la cama de Theo, sabiendo de sobra que no va a ser echado de ahí. Theo acaricia a Sitara. Sabía que algo andaba mal desde que se encontró con Granger y Weasley en el pasillo sin Potter. ¿Pues que tan querido es Finnigan, que ya dos Gryffindor estuvieron tras de ellos para vengarse de un mal chiste en clase? De verdad que aveces no entendía como funcionaba el mundo alrededor.
Un olor llamó su atención, uno que no reconocía pero que provoco tensión en su espalda. Venía de Draco pero no era Draco.
-¿Pelearon?
-¿Tu que crees?...Algo así- Draco se sentó sobre las cobijas, aun demasiado metido en su molestia- salió de la maldita nada y comenzamos a empujarnos hasta que casi nos caen unos libros encima a los dos.
Y no es hasta ese instante que nota como Theo esta viéndolo con ojos críticos, más específicamente a su ropa. Algo confundido, baja la nariz a la tela de su tunica y olisquear. Los ojos grises se abrieron como platos al notar las fuertes feromonas impregnadas a él, resultado del encuentro que tuvieron, Theo debío sentirlas primero.
-¿Estas seguro de que solo pelearon? -pregunta con burla, una ceja alzada, esas feromonas no olían como molestia de alfa.
-Sí, ¿Por que te...¡Ay, no! ¡No jodas Theodore! -casi chilla Draco, alcanzando una almohada para aventársela al otro, Theo esquivo el almohadazo y huye por la habitación. Evitaba los lanzamientos de tela de su amigo mientras se paseaba entre las camas.
Ambos jugaron así hasta que un proyectil de almohada dio en el pecho de Theo y este se dejó caer como soldado caído a la cama a sus espaldas. Que era la de Draco, Draco se permitió reír a carcajadas, fue a donde Theo, quien le regresó la mirada. Ambos se acostaron en la cama del rubio viendo el doncel de la cama, en silencio y disfrutando de la compañía.
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Contigo
FanfictionFanfic Omegaverse Segunda generación. Siempre había sido un ser enigmático, más bello aun, pero no entendía porque no sentía nada. Porque estaba vacío en ese aspecto, lo que si sabia es que decirle odio al deseo no era mejor. Un omega callado y apa...