My Own Destiny

XIII

Joanne/Ryujin

"Joanne" escuché la voz de Minho tras la puerta "¿Puedo pasar?".

No respondí.

"Escucha Moco de Troll, Merlín no me dio la virtud de la paciencia" bromeó y si no estuviera tan en la mierda realmente hubiese soltado una carcajada.

"Tu lo pediste" sentí sus pasos alejarse y por unos segundos pensé que se había rendido "¡Bombarda!"

En cuestión de segundos la puerta de mi dormitorio se hizo pedazos y el humó nublo mi visión, me levanté mientras tosía.

"¡¿Qué mierda te pasa Lee Know?!" entró a mi habitación con dos escobas.

"Escucha Joanne o Ryujin o como sea que te llames" me estremecí al escucharlo llamarme de esa manera "He intentado darte el suficiente espacio para que puedas digerir lo del otro día pero ya ha pasado mucho tiempo y me temo que debo usar mi poder de hermano mayor y sacarte de tu miseria".

"Agradezco que te preocupes por mi Minho pero no quiero salir de aquí" nuevamente me acosté en mi cama que ha sido mi refugio estos días.

"Por favor Jo-" el mismo se detuvo "Mira, no voy a rendirme"

"¿Por qué" me senté para mirarlo "Deberías estar odiándome Lee Know ¡Soy la hija de los Shin¡ ¿no lo entiendes? La hija de las personas que tus padres más odian y se supone que tu deberías odiarlos también, deberías odiarme Lee Know" sentí las lágrimas nuevamente recorrer mis mejillas "Y mis propios padres deberían odiarme también por haber querido matarlos y cobrar venganza por un hombre y una mujer que no hizo más que destruirlos".

Mi cabeza era un torbellino de pensamientos, ahora entendía porqué nunca sentí que Young-Nam me amaba como su hija, porqué siempre me exigía hasta el punto de hacerme daño y porqué tampoco sentí una real conexión con ella. No podía dejar de pensar en lo mucho que Hae-soo y So-hee me odiarán cuando se enteren de que su propia hija entró a esta maldita escuela para matarlos y en lo decepcionados que estarán al ver en lo que su hija, en lo que yo me he convertido.

El solo hecho de pensar en que Yeji se entere de que siempre estuvo con su gran amor de infancia y quizás de la vida entera me preocupaba. Mi cabeza me decía que se alejará de mi cuando se de cuenta de que fui criada por una de las furtivas más peligrosas del mundo, además de que sus padres no lo permitirían, se asegurarían de que yo jamás volviera a verlos.

Siento una gran sensación de abandono y de que no pertenezco a ningún lugar, todo lo que creía se desvaneció y ya no sé quien soy. Las cosas que creía haber ganado este tiempo se alejaban de mi por cada pensamiento que rondaba en mi cabeza y me siento sola.

"No sé quien soy Minho" no podía dejar de llorar "no sé qué hacer".

"Hey" se sentó en el borde de mi cama y tomó mi rostro "Sé que esto es demasiado duro y por más que lo intente nunca podré comprender como realmente te sientes" secó mis lagrimas con sus pulgares "Solo sé, y escúchame bien" me miró seriamente "Solo sé que me importa una gran mierda de donde vienes y mucho menos quien te crío porque tu, en este momento eres mi hermana pequeña" sentí como mi corazón se apretaba.

"Eres una chica que ha pasado por muchas cosas terribles y que a pesar de eso sigue aquí luchando. Quizás no tengamos todas las respuestas ahora pero una cosa es cierta y esa es que tu no estás sola, siempre me tendrás a mi".

"No lo merezco Minho" intenté alejar mi rostro "Soy un monstruo"

"¡No lo eres!" tomó mi mano levantándome de la cama y me puso frente a un espejo "Te diré lo que veo yo, veo a una chica muy bella y valiente, que ha pesar de intentar convertirla en un monstruo sigue siendo la misma persona que esa niña de cinco años llena de paz y felicidad. Eres alguien brillante que está dispuesta a sacrificarse por las personas que ama, alguien que siempre busca la justicia desde lo que cree y por eso jamás pudiste herir a una persona por más que tu madre te obligaba".