My Own Destiny

XIV

Ryujin

"¡Espera!" corría lo más rápido que podía "¡Yeji!".

Llevaba días intentando acercarme a Yeji pero cada ves que me ve me ignora y se va corriendo. Intenté hacerlo apenas mamá me lo pidió esa noche pero por lo que supe apenas salía de su sala común y cuando fui a preguntar Chan me veía como si quisiera arrancarme la cabeza así que decidí que esperar al día siguiente era lo mejor pero no tuve suerte.

Ahora mismo corría por la gran escalera intentando alcanzarla pero en un momento las escaleras cambiaron y la perdí.

"Mierda" me detuve para respirar "Realmente eres un dolor de cabeza Hwang".

La extraño.

Soy una idiota

                                                                                         ****

"¿Lo lograste?" negué con la cabeza "Realmente rompiste su corazón ¿ no?"

"Soy una estúpida" me desplomé en el sofá "Y una cobarde"

"No seas así contigo, no es tu culpa que no tengas experiencia con las relaciones".

"Solo digo que no era tan difícil decir 'Estoy enamorada de ti Yeji, te quiero a mi lado para amarte como siempre debí hacerlo'"

"Créeme que si le hubieses dicho eso habría salido corriendo igualmente, pero por tu cursilería" le pegué una patada "¡Auch! también opino que por el bien de tu futura esposa deberías reconsiderar tus muestras de afecto" me sonrojé ante su insinuación y le di otra patada pero aun más fuerte, aunque debo admitir que sonó lindo.

"Esas muestras son solo para mi hermano mayor" intentó parecer molesto pero vi su sonrisa intentando asomarse por llamarlo hermano "No seas llorón Minho, si sigues así Han se aburrirá de ti pronto"

"Eres una-" estuvo apunto de lanzarse sobre mi pero algo lo detuvo.

"¿Qué pasa?" lo miré extrañada "¿Qué ves?" me levanté mirando en la dirección de sus ojos "Señor Shin" susurré.

Me sorprendí al verlo ya que no lo había visto en semanas, desde antes de enterarme de que soy, bueno, su hija. Intenté hablar con el pero mamá me había dicho que por temas del ministerio debía estar fuera pero sabía que no era del todo cierto y su expresión en este momento me lo confirmaba. Me miraba detenidamente y con los ojos cristalizados, con una pequeña sonrisa.

"Uh, que bueno tenerlo devuelta profesor" escuché a Minho decirle pero no podía dejar de mirarlo "nos ha hecho falta en los entrenamientos de Quidditch"

"Un gusto volver a verlo joven Lee, lamento haber estado ausente en este tiempo pero debía resolver unos problemas en el ministerio de magia" devolvió su mirada a mí "¿Interrumpo algo?" negué con la cabeza, no podía hablar porque sentía que si lo hacía me pondría a llorar, he estado muy sensible últimamente.

"No señor, de hecho es un alivio que nos interrumpiera ya que estaba un poco aburrido de escuchar a este moco de troll quejarse de su mala suerte en el amor" le pegué en la cabeza.

"¡¿Qué mierda sucede contigo?!" dije avergonzada.

"Cuida tu lenguaje Ryujin" me paralicé al escucharlo y Minho también lo miró sorprendido.

Me dio una mirada seria pero aun así tenía una pequeña sonrisa en su rostro.

"Vine aquí porque me gustaría caminar un poco contigo ¿qué dices?"

"Sería un placer"

****

Ambos caminamos en silencio un buen rato por el castillo, en un par de momentos me relataba pequeñas aventuras que tuvo en su juventud por los pasillos y las pequeñas travesuras que realizaba con mamá y el padre de Yeji, ahora caminábamos por el puente cubierto y en un momento se detuvo a mirar el maravilloso paisaje.