°•Ｎｕｅｓｔｒａ Ｌｅｙｅｎｄａ•° ●𝓛𝓲𝓷𝓴 𝓨 𝓣𝓾●

○𝑻𝒐𝒏𝒕𝒂○

Corría a toda velocidad, el sol estaba por ocultarse tras las montañas dando así fin a otro día, la gran explosión que había escuchado a lo lejos era un completo misterio para mí, tenía miedo, ¿Link estaría bien? Debía darme prisa, por momentos me culpaba, sabía que Link no era bueno con los acertijos, tal vez y activo alguna trampa, algo malo...

Con mi espada mataba a algunos que otros bichos que se cruzaban en mi camino, estos me llenaban de su sangre al mismo tiempo, mi cara y mi cabello estaban hechos un desastre debido a que había tocado accidentalmente a uno de los bichos llenos de rayos.

Después de unos minutos más corriendo pude verlo, Link había sido capaz de activar el templo, una sonrisa se dibujo en mis labios, tal vez el sonido de aquella explosión había sido a consecuencia de esto...

- ¡Zelda!

Mis ojos se abrieron como platos al escuchar aquel nombre, volteé hacia donde provenía el grito solo para ver cómo el último cielo rojizo del día era iluminado por una luz verde, corrí lo más rápido que pude, mis piernas dolían, algo estaba mal...

Como pude trepé los escombros de aquella entrada solo para darme cuenta de la situación, mis ojos se abrieron como platos.

- ¡Ja, ja ja! ¿Qué paso con toda esa fuerza que presumias niño? — El heraldo de la muerte estaba nuevamente aquí... Y estaba a punto de matar a Link — O es que acaso solo presumes cuando está la tonta Protectora.

Link estaba tirado en el suelo mientras respiraba agitadamente, estaba protegiendo a la mujer que habíamos visto en Eldin. Se notaba herida y Link también, tenía sangre cayendo por su brazo.

- ¡No puedo creer que no seas capaz de darme batalla sin la estúpida de la protectora aquí! — Link soltó un quejido mientras se aferraba a su espada y a su escudo — Ahora, me pregunto que pensaría esa niña si te viera en esta posición.

Las burlas del heraldo fueron calladas de un golpe cuando me lance a golpearlo con la espada, este milagrosamente evito mi corte, pero vaya que le había dado un buen golpe con el mango.

- Pensaría que es un niño tonto por dejarse ganar tan fácilmente — una sonrisa arrogante apareció en mis labios — Que asco volver a verte, Grahim.

- ¡________! / ¡Protector!— Gritaron Link y la mujer a mis espaldas.

Voltee la mirada de reojo mientras sonreí divertida.

- ¿Una Lira? — mire a Link — ¿Qué planeabas hacer con eso Link? ¿Cantarle una canción?

Los quejidos de Grahim me hicieron reaccionar para volver a ponerme en guardia ante el enemigo.

- Estúpida niña... Creí que por fin te habías largado — unas pequeñas gotas de sangre caían de la frente del heraldo.

- ¿Y dejar que matarás a Link? Primero muerta — apunte con mi espada — Jamás dejaría que le hicieras daño...

Link miro sorprendido la escena, sus ojos estaban llenos de sorpresa, admiración y un poco de miedo. Jamás había visto a su amiga de esa manera, no tan seria ante el enemigo, parecía como si estuviera viendo a un gran guerrero dar la cara por él.

- Ahora escucha... No dejaré que le hagas daño a ninguno de ellos.

Una carcajada salió de los labios de Grahim, yo lo mire seriamente.