•Nuevo habitante• |FarfaRich|

¿Hiciste eso por mí?

Era una cálida mañana, la luz del sol se colaba por las persianas abiertas de la habitación, dos sujetos se encontraban en un sueño muy plácido, hasta que uno de ellos despertó.

Era Rich, quien dando un bostezo comenzó a despertar, se había dado cuenta que se había dormido hasta el día siguiente, era la primera vez en días que dormía, pero después de esa siesta se sentía mucho mejor.

Visualizo cerca de el la camilla en la que reposaba Farfadox, aún en un estado inconsciente.

Rich suspiró, y se preparó para comenzar de nuevo su día, cuidando de farfa, ese descanso le ayudó bastante a recargar sus energías, asi que se aseguraría de ayudar al Farfano con más atención.

Solo pudo contemplarlo, este estaba dormido, y aún así en aquel estado lo seguía amando, sin importar que, estaría para el.

Se acercó a farfa, y le dio un pequeño y suave abrazo, procurando no lastimarlo por las heridas que tenía este otro, aunque probablemente ya hubieran sanado, era lo más delicado posible.

Tendría que cambiar de nuevo el vendaje del Farfano, se acercó a la mesa de noche que contenia las bolsas que había traído la enfermera, y saco de una de ellas lo necesario para curarlo.

Con pasos delicados se volvió a acercar a el, y sentándose a su lado, descubrió el pecho de Farfadox que estaba con su respectiva camisa, para así retirar las viejas vendas, limpiar la zona herida y aplicar su respectivo tratamiento.

Ya listo aquello, bajo su camisa, y lo cubrió con una suave sabana que estaba a su costado.

No hizo más que contemplarlo, aquel ente de oscuridad lo atraía con una gran magnitud, planto un beso en su frente para luego sentarse a su lado, y tomar su mano.

Sintió como esa mano comenzaba a retomar fuerza, observo su rostro, que aún contaba con sus ojos cerrados, pero, su cuerpo mostraba ligeros movimientos.

-¿¡Farfadox!?- Dió un pequeño sobresalto al sentir como la mano de su amado que se encontraba agarrada con la suya lo empezaba a apretar con fuerza.

-R-rich...T-te extrañ...-Un abrazo por parte de Rich interrumpió esto último que quería decir Farfadox, quien al fin pareció despertar, aún algo confundido, pero estaba consciente.

-¡Oh, Farfa!, ¡No tienes idea de lo mucho que te extrañe también! Estoy feliz de que finalmente hayas despertado, han pasado días desde lo que sucedió...Nunca me he apartado de tu lado desde entonces.-Cuenta Rich, mientras sus ojos cristalizados comienzan a soltar lágrimas, estaba muy contento de que aquel Farfano despertará, nunca perdió la esperanza de que despertaría pronto.

-Me alegra volver, Rich...-Le dio un pequeño beso a este en la mejilla, y sonrió de manera tierna  y reconfortante-¿Días?...Cuanto tiempo ha pasado desde...eso?.- Preguntó Farfadox, curioso y algo angustiado por haber estado inconsciente tanto tiempo.

-Han pasado dos semanas...Llevo dos semanas aquí contigo, no me aleje de ti en ningún momento, fue duro, pero siempre tuve la esperanza de que volverias.- Sigue contando con una sonrisa en su rostro.

-¿Pasaste dos semanas acá encerrado conmigo solo para cuidarme?, guau, de verdad...¿Hiciste eso por mi?.-Sus ojos blancos lo miraban enamorado, se sentía especial y amado, que Rich haya pasado tanto tiempo cuidando de el le parecía sumamente increíble, y no tenía forma de agradecerle por tanto.