#02

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- Este es el caso #143, hecho ocurrido el día 14 de Marzo de 2.023, hoy es 17 de Marzo del mismo año, soy el detective Lee Min-ho y este es el...tercer interrogatorio del caso, por favor diga su nombre, edad y que relacion tiene con las víctimas - Suspiré pesado.

- Soy...Seo Chang-bin, tengo 31 años, y soy el jefe de Industrias Seo, por ende jefe de Cristopher Bang - Habló el hombre cruzado de brazos, el verlo llegar fue algo interesante, tenía muchos guardaespaldas.

- Industrias Seo, ¿De dónde viene el nombre? - Pregunté tomando asiento frente a él.

- Mí padre le otorgó ese nombre, quería que algo importante llevara su apellido, yo solo sigo su legado - Contestó mirándome.

- Hmn empresa familiar, ojalá mis padres hubieran sido igual de inteligentes, no tendría que estar trabajando de esto - Hablé anotando en mí libreta.

- ¿Siente vergüenza por su familia? - Preguntó.

- No, por supuesto que no, mí padre era electricista y mí madre una bella ama de casa, siempre me llevaba con ella y me dejaba viendo televisión - Dije.

- Adivino, ¿Sherlock Holmes? - Preguntó.

- Un gran personaje, pero era más de Indiana Jones - Contesté - Ahora digame, ¿Cuando puso al mando al señor Bang del edificio A? - Pregunté.

- Hace dos años - Contestó.

- ¿Usted...como se enteró que su jefe de edificio estaba muerto? - Cuestioné.

- Mis hombres manejan la seguridad de los edificios, un día se les hizo raro que el señor Bang, un hombre responsable y puntual, no apareciera en su horario de trabajo, por lo que investigaron y se me informó de su muerte - Informó.

- ¿Sabe dónde se encontró? - Pregunté.

- Si, en el penthouse del SWM - Respondió - Lo sé por qué mis trabajadores tienen un descuento del 60% al hospedarse allí - Agregó.

- Bien, pero...¿Sabía que el señor Bang no vivía allí? - Hablé.

- Según información brindada por él vivía allí con su novio - Contestó.

- ¿Novio?, ¿Usted por casualidad lo conoció? - Agregué.

- Hmn lo vi una vez, se presentó en mí oficina para obtener un empleo en el edificio A, tenía algo de experiencia por lo que solo le dimos para hacer mandados, a los meses llegó una carta del señor Bang que pedía el ascenso del chico - Respondió.

- ¿Sabe...cual de ellos era su novio? - Pregunté acomodando sobre la mesa dos fotografías.

- Si, el pequeño morocho - Contestó.

- Él es el señor Yang, como usted sabe, primer secretario del señor Bang, cuerpo encontrado junto a este en la escena del crimen - Informé.

- ¿Y él? - Cuestionó al ver la otra imagen.

- Él...es el señor Kim Seung-min, el esposo del señor Bang - Dije, este rápido me miró.

- ¿Esposo? - Cuestionó.

- Si, por conclusiones dejadas a la obviedad suponemos que el señor Bang engañaba al señor Kim con su secretario Yang, ¿Usted no tenía idea? - Pregunté.

- Maldito desgraciado, el señor Kim se presentó a mí oficina, me dijo que venia de parte del señor Bang, me rogó que lo despidiera y lo sacará de la empresa, hablé con Bang pero este solo dijo que no conocía al señor Kim - Informó, en su expresión se veía enojo.

- ¿Hay alguna razón por la que se encuentre molesto? - Cuestioné mirándolo.

- Detective Lee, se que ha escuchado cosas atroces sobre mí, al igual que todos aquí en la estación, pero le informo que la infidelidad es algo que va contra mí moral, confiaba ciega y plenamente en el señor Bang, ahora que me entero de esto, supongo que hubieron razones validas para acabar con su vida y la de esa rata - Dijo seriamente.

- ¿Está insinuando que lo asesinaron? - Hablé.

- ¿Usted ve eso como un suicidio doble? - Pregunto señalando las imágenes.

- Quizás - Contesté.

- ¿Ya terminamos?, está consumiendo mucho de mí tiempo, y a diferencia de usted, mí tiempo si vale oro - Dijo observándome.

- Lo se, pero sepa que a mí compañero le costó hacerlo venir aquí, por lo que tenga en cuenta que pronto será llamado nuevamente, mientras...ande con cuidado - Hablé para dirigirme a la puerta.

- Si fuera usted también andaría con cuidado, en estos tiempos la gente hace muchas locuras - Agregó viéndome.

- Agradezco su preocupación, mis compañeros lo acompañarán hasta la puerta - Dije para salir de la habitación.




Entré a mí oficina y en ella me esperaba alguien.

- ¿Acaso no sabes respetar la privacidad? - Pregunté sentándome en mí silla viendo al chico.

- L-lo siento señor, pero...tenía miedo - Informó mirando al suelo.

- Señorito Han, ¿Cómo piensa ser detective si le tiene miedo a un simple empresario? - Cuestioné sonriendo de lado.

- No se ría de mí por favor - Habló cabizbajo.

- Lo lamento, ¿Cual es tu comida favorita? - Pregunté cubriendo mis ojos con el paño.

- ¿Favorita?, supongo que la coreana - Contestó.

- Hmn kimchi, ordene la comida que quiera, el pago corre por mí cuenta - Hablé.

- E-esta bien señor - Dijo, escuché como se levantó y abandonó la habitación.

- Ese niño es muy lindo - Suspiré tranquilo.






La abertura de la puerta me sobresaltó, el chico me había informado que el pedido había llegado.

- Muchas gracias señor - Agradeció con las bolsas en las manos.

- No es nada, además logré que hicieras el pedido por mí - Hablé tomando una bandeja con comida.

- Hey pidieron comida, genial - Dijo el rubio de pelo largo entrando a la habitación.

- No es para ti, adiós - Agregué mezclando todo.

- Pero Han tiene - Reprochó.

- El señorito Han se lo ganó, sabe hacer su trabajo a pesar de estar aqui hace un mes, a diferencia de ti que estás hace...casi un año - Dije viéndolo, este solo frunció su ceño y nos dejó solos - Además...el señorito Han es muy lindo, por lo que se tiene que alimentar adecuadamente - Agregué haciendo que esté tosiera por ahogarse con la comida.

- S-señor no diga e-eso por favor - Dijo con algo de dificultad.

- Afronta la verdad niño - Comenté.

- Señor - Habló después de tragar si comida, yo solo asentí - ¿Usted sale con alguien? - Preguntó.

- Esa es una pregunta muy personal, pero estoy de buen humor entonces la contestaré, por el momento no estoy con nadie - Respondí.

- ¿Y...le interesa alguien? - Cuestionó, yo lo miré.

- Termina tu comida, recuerda tirar la basura y después continua con tu trabajo, si necesitas algo estaré en mí oficina - Hablé para luego levantarme.


Mí cabeza dolía, pero debía prepararme ya que en la tarde haría otro interrogatorio, me estresaba hacer esto, sentía que no llegaba a ningún lado, y cuando lograba avanzar me encontraba con un muro, este caso no sería muy fácil de llevar.





































𝐂𝐚𝐬𝐨 #𝟏𝟒𝟑 ˢᵏᶻDonde viven las historias. Descúbrelo ahora