①】 Aquellas noches sin poder Dormir

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Cuando despierta lentamente, se da cuenta que no se siente cansado ni abrumado por las pesadillas de ayer; siente como si, por primera vez, esa pesadilla no tuviera control sobre su vida.
Pero recuerda que también ayer entro un intruso a casa, estaba en su cocina husmeando y luego estuvo con él, sobre su colchón y...y fue quien lo ayudo a dormir de nuevo.
Auron no va a admitir esto, pero las caricias silenciosas sobre su cabello, fueron de mucha ayuda; un cómpleto extraño y probablemente un ladrón, había sido suficiente consuelo al primer momento, y el no podía sentirse más patético que eso.

Es decir, hasta donde habia llegado su vida,  tan bajo había caído para que un simple ladrón resultará ser el consuelo que había estado esperando desde hace meses; pero si había algo que tranquilizaba al castaño, era que al final del día, con quién compartió ese momento vulnerable suyo, fue un mero extraño y, como tal, dudaba volverlo a ver o en todo caso, que ese sujeto revelará la cosa que sucedió. Entonces básicamente era un secreto entre él y el intruso.

Y exactamente como Auron suponía, Vegetta jamás mencionaría la cosa que sucedió ayer con su compañero; primero, porque quería mantener su privacidad y segundo, porque realmente si lo revelaba, prácticamente se delataba por ser lobo nocturno.

Sin embargo aún así, por la mañana, decidió dirigirse a la comisaría de Karmaland, donde sabía ya estaría su amigo Alexby trabajando, pues se trataba de alguien madrugador. Fue con la excusa de platicar un poco en el lugar, mientras le invitaba un café; luego esperaría ahí hasta que Auron apareciera y discretamente escucharía si tenía algo que decir acerca de un ladrón entrando en su hogar. Aunque ayer, al final Vegetta no robó nada y no porque el más bajo le diera pena, si no simplemente se le olvidó. Era un ladrón lamentable.

—Entonces Alexby, tengo curiosidad ¿Cómo van los casos de robo en karmaland?— pregunta el oji-violeta, claramente interesado en escuchar como fracasaban al tratar de saber quién es lobo nocturno.

—Pues que te cuento Vegetta, yo soy el único que hago lo posible para investigarlo; Fargan anda bobeando por ahí y el juez Auron se ha saltado sus responsabilidades desde hace unas semanas— responde agitado a primeras horas de la mañana.

El azabache no estaba realmente interesado en preguntar en qué se metía Fargan para dejar solo a su compañero, ya sabía de antemano que estaba en algo con Willy; sin embargo era casi diferente con la mención del juez Auron, pues hace al menos un mes obtuvo  ese puesto gracias a Lolito y era un puesto que ansiaba mucho, ahora escuchar que no lo hacia como debería desde hace semanas, le hizo preguntarse si se debia a su insomnio.

—¡Pero Alexby, Buenos días calvo!— de repente saluda Auron, entrando con un mejor semblante.

Vegetta y el nombrado saltaron por el saludo, además de la sorpresa por escuchar esa voz tan reconocible. Y ahora que el oji-violeta lo veía mucho mejor, recordaba la clara diferencia de su rostro cargado de ojeras y cansancio ayer por la noche, y sin embargo, se alegraba de ver ese positivo cambio de semblante.

—Pero bueno, si es Auron y de un mejor humor ¿Que te pasó estos días? Tu trabajo se ha estado acumulando— reprocho en medio del saludo

—Bah, Nada en especial— menciona encogiendose de hombros—Y perdón por dejarte todo Alexby, retomare mis tareas

—Pero se siente hasta extraño verte por aquí, chaval— habla Vegetta interrumpiendo la charla del moreno con el más bajito.

Auron salta por la sorpresa de escuchar la voz de la persona más legal de karmaland, no esperando verlo.

—¡Vegetta, que me causas un infarto!

—Pues siempre estuve aqui

—Perdón por no notarte— le dirigió una mirada de soslayo y luego regreso con Alexby—Dame los documentos que me corresponden y empezaré a trabajar de inmediato

Vegetta no lo habia notado, pero a pesar de ese carácter fuerte, detrás habia una persona vulnerable y humana, que se arrepentía de sus errores; aunque los demás no lo notarían a menos  que decidieran mirar con ojos diferentes a Auron.

Entonces Alexby fue a su propia oficina para tomar los papeles que el castaño pedía y entregarselos, mientras tanto dejando a los dos hombres en silencio en la recepción del departamento de policía.
En esos breves momentos a solas, Auron no dejo de sentir la mirada intensa del hombre sobre él , se sintió observado y casi como si lo juzgara, porque claro, Vegetta no era alguien con quien hablara mucho y siendo muy cercano a Luzu, pues peor se llevarían.

Sin embargo, antes de que él pudiera pensar en entablar una conversación, el dueño de aquel castillo en el cielo, lo tomo de sorpresa expresando preocupación hacia él.

—¿Te encuentras bien?— dijo Vegetta sorprendiendo asi mismo de soltar aquella pregunta. Él solo habia visto las ojeras marcadas debajo de esos ojos chocolate, pensó en lo que sucedió anoche como Lobo nocturno, y entonces la preocupación se escpao de sus labios.

El par de ojos del menor lo miraron un largo momento en silencio, como esperando que agregara algo más, pero entonces Auron supo que entonces era genuina preocupación.

—B-bueno, si estoy bien — titubeó, respondiendo en automático sin pensar realmente en lo que habia sentido tantos dias atrás—Gracias por preguntar

El silencio continúo incómodo, ahora Vegetta no sabia como arreglarlo y solo esperaba a que Alexby no tardará más con esos documentos

—Claro, me alegra oírlo — tosió falsamente, desviando finalmente su mirada, sin saber porque ahora no podia dejar de prestarle atención a la condición de su compañero

—¡Son bastantes!— grito el pequeño policía, saliendo con una pila alta de papeles— Estarás estretenido un rato, pero si me desocupo ire a ayudarle, Juez— alza su pulgar para darle ánimos y luego se despide de ellos.

—Pues me gustaría quedarme, pero veo que estaran ocupados, entonces me ire ¡Un placer verlos!— se aleja el oji-violeta, mientras trata de caminar rapido a la salida y ya no pasar mas silencios incomdos. Lo que solo fue su culpa de su bocota chismosa

Auron se encaminó a su propio despachó del ayuntamiento con los documentos en mano, pensando muy a fondo el porque de aquel intento de charla del Vegetta. Concluyó que quizás quería averiguar alguna ilegalidad suya para inculparlo, pero fallo en ser discreto y al final terminaron en silencio. Él no queria pensar mucho al respecto, cualquier mirada de preocupación hacia él no era común, así que debio haber sido imaginación suya por el cansancio.

Es decir, han pasado unos meses después de las elecciones en las que él cumple su trabajo, pero fueron más los días en los que Auron se aisló y no salía a menudo, y si salía, nadie cuestionaba su ausencia.  Ni siquiera sus "compañeros" de trabajo. Entonces que repentinamente Triple 7 le pregunté su estado, bueno, realmente lo desconcentra un poco.

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El cielo pronto se coloreo de naranja por el atardecer, pero Auron todavía continuo con su trabajo, no muy entusiasmado respecto a llegar a casa. Tenia tantas mascotas, de las cuales estaba seguro que podían hacerse compañia entre si para no estar  solos, mientras que él no podía deshacerse de la soledad por más llena que estuviera su casa de mascotas.

Entonces la luna finalmente se paro en lo alto en el cielo, imponente, anunciando la hora de que todos deberian descansar, pero claro, Auron siempre será la excepción. La realidad era que ya llevaba gran parte de su trabajo hecho, había decidió aprovechar bien ese dia para que los siguientes no tuviera que preocuparse por cosas que le llegue a deber a alguien.

Sin embargo, cierto hombre seguidor de las regalas, después de la despedida en el estación de policía, de habia dedicado a su cosas. Atender su huerto y sus animales, incluso decidió terminar partes de su mansión que seguia en proceso, pero nada de eso funcionó pues aún tenia en su cabeza el recuerdo de la mirada agotada de Auron y sus sollozos nocturnos.
Y siguió asi hasta que anocheció, su mente plagada de preguntas sobre como su compañero estaria pasando la noche.

«¿Tendrá pesadillas otra vez?
¿Seguirá trabajando? ¿Volverá a tener insomnio?»

Con esas preguntas en su mente, tomo nuevamente su traje de lobo nocturno, movido por la curiosidad decidió salir otra vez hacia casa de su compañero moreno. Quizás era arriesgado considerando que serian dos noches seguidas, pero si mantenia sus técnicas de ocultarse en la noche todo estaria bien