Era un día normal, el sol comenzaba a salir y el viento frío soplaba con fuerza moviendo las cosas a su alrededor. Al salir de casa pude sentir el aire frío chocar contra mi cara y a los minutos empecé a regañarme mentalmente por no haberme puesto una bufanda para cubrirme mejor, comencé a caminar entre las calles para llegar a la parada de autobuses y tomar el que me llevaría a la preparatoria, luego de un rato me baje y comencé a caminar hacia la entrada de la preparatoria encontrándome con mi persona favorita, mi mejor amiga Alice, que al momento de que ambos estuviéramos cerca nos abrazamos con fuerza.
- Buenos días, Mat -dijo mientras se separaba
- Buenos días, Alice
- ¿Otra vez no te abrigaste bien? -cuestionó cruzada de brazos
- Sí jajaja se me olvido ponerme una bufanda -dije mientras rascaba a mí nunca con vergüenza por mi descuido
- Dios, qué voy a hacer contigo, por suerte traje otra bufanda conmigo -mencionó mientras sacaba otra bufanda de su mochila
- Muchas gracias, Alice -agradecí mientras colocaba la bufanda alrededor de mi cuello
- No hay de qué -contestó mientras comenzaba a caminar en dirección a nuestro salón
Yo simplemente comencé a seguirla y una vez dentro tomamos asientos distintos, lamentablemente hace algunos días que dejamos de sentarnos juntos porque su novio le pidió que se sentara con él para pasar más tiempo juntos y ahí estaba yo, sentado viendo cómo se abrazaban mientras sentía una presión en el pecho, así que para distraerme saqué mi libreta para comenzar a dibujar y entretenerme mientras llegaba el maestro.
Luego de un rato el maestro llegó y comenzó a dar su clase, inconscientemente desviaba mi mirada para ver a mi mejor amiga, sabía que estaba mal ella tenía novio, pero no podía evitarlo no puedo dejar de amarla de un día para otro. Sin darme cuenta el timbre de sonó para dar paso al recreo, sin esperar mucho agarré mi lonche y me dirigí hacia Alice para comer juntos, pero cuando apenas estaba acercándome su novio se dio cuenta de mi presencia y rápidamente la agarró de la mano para llevársela de ahí, no quería causar molestias así que simplemente salí del salón y me dirigí hacia una de las mesas para comenzar a comer. Las siguientes clases transcurrieron con normalidad y rápidamente ya me encontraba saliendo de la preparatoria para irme a mi casa, quería despedirme de Alice, pero ya no la encontré por ninguna parte así que simplemente me fui. Cuando llegué a mi casa comencé a hacer la tarea porque sabía que si no lo hacía en ese momento ya no la iba a querer hacer después, me tomó algo de tiempo terminar, pero lo logré. Sinceramente me sentía algo abrumado por no saber qué hacer con esto que siento, yo no quiero interponerme entre la relación que tienen Alice y Raúl, pero no sabía cómo deshacerme de estos sentimientos, yo de verdad la amo demasiado y quiero que seas feliz, aunque esa felicidad la provoque alguien más. Pero no sé qué hacer jamás había sentido antes algo como esto así que para que mis sentimientos ya no me abrumarán tanto tome una hoja blanca para empezar a escribir una carta pues hace tiempo había decidido tratar de expresar mis sentimientos a través de cartas y entregárselas después, pero sabía que no tendría el valor para hacerlo por el miedo de que gracias a esto se terminara alejándose de mí o creyera que estoy tratando de meterme en su noviazgo, por lo tanto esto sólo me serviría para desahogarme, no tenía que preocuparme porque alguien me interrumpiera ya que normalmente siempre me la pasaba en mi cuarto, por lo que cuando apenas encontré un lápiz empecé a escribir.
¿Hoy tuve un dejavu sabes? Recuerdo muy bien ese día fue el 13 de diciembre cuando me prestaste tu suéter ya que me había olvidado el mío y estaba haciendo mucho frío, dijiste que se me veía mejor a mí, eso fue algo que hizo que mi corazón se acelerara.
Lo que siento por ti es de verdad pues no es una broma es totalmente sincero, a veces te miro y parece que veo el ángel más bello pues todo de ti me parece perfecto, sé tus defectos, pero eso no me impide mirarte como lo más hermoso que he visto, todo de ti me gusta, tus suaves manos, el bello sonido de tu risa, tus hermosos ojos marrones, tu rostro, todo de ti me parece hermoso. Aunque nadie supiera apreciar tu belleza yo siempre estaba ahí para recordarte lo hermosa que eres. Tú y yo éramos tan distintos, tú casi no confiabas en nadie y yo siempre confiaba demasiado en las personas, muchos nos decían que seríamos la "pareja perfecta" que éramos lo que "el otro necesitaba", nosotros solo nos reíamos, pero en el fondo yo siempre esperé a que fuera verdad. Aún recuerdo el día en que me dijiste que tuviera cuidado en quien confiara "no confíes en nadie" eso fue lo que dijiste, pero no me avisaste que tuviera cuidado contigo y no lo digo en el sentido de que hubieras traicionado mi confianza, no, claro que no, jamás lo hiciste, si no en el sentido de que sería doloroso amarte, pero...
esperé por tanto para que apareciera alguien como tú en mi vida y cuando te conocí supe que serías demasiado importante para mí.
Con cariño me despido, Mat.
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Las 12 cartas no entregadas
FanfictionHanahaki desease Una condición en la cual la persona que lo posee vomita y tose pétalos de flores por un amor unilateral o mejor dicho no correspondido. Donde se pueden tomar píldoras para retrasar la enfermedad o remover la "infección" mediante ci...