CHAPTER TWO

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          LOS VERDES ojos de Lin'er brillaron debido a las lágrimas de la vergüenza que estaba sintiendo en este momento

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          LOS VERDES ojos de Lin'er brillaron debido a las lágrimas de la vergüenza que estaba sintiendo en este momento. Porque no sólo se había topado con Cale Henituse en la panadería, en la que aún estaban, sino que el sistema había considerado oportuno decir barbaridades relacionadas con la belleza del pelirrojo.

Su mirada indiferente no ayudaba a disminuir su vergüenza.

Tomando un breve momento para envalentonarse, giró levemente la cabeza para poder observar bien a quien alguna vez fue un personaje.

Fue una mala idea.

Los tonos rojizos de su rostro aumentaron en profundidad y dejó escapar un, a penas, audible chillido al reconocer la vulgaridad que soltó el sistema adorador de hombres guapos. Se tapó el rostro con sus manos y se encogió un poco sobre si misma deseando poder escapar y tratar de conservar un poco de dignidad.

Y mientras Lin'er trataba de no desmayarse debido a la vergüenza, Cale agradecía haber dominado el arte de "rostro indiferente, mente caótica".

Unos toques de placer se mezclaron en su mirada de aparente indiferencia cuando la observó lucir tan avergonzada a pesar no haber dicho nada raro o atrevido. Había leído cientos de escenas en las que ella reaccionaba así por los comentarios de Choi Han, pero había un tipo diferente de disfrute cuando era él quién provocaba tal reacción.

—¡Aquí tiene su... pan? —La mujer le tendió la enorme bolsa con dicho alimento mientras tenía una sonrisa confundida, sin saber cómo enfrentar la extraña situación; el joven maestro parecía un astuto zorro que encontraba placer en molestar al tembloroso conejito que era esa chica extraña, no es que fuera una mala vista, pero no sabía cómo había ocurrido. —Chica, ¿te encuentras bien?

La chica parecía que al borde de un colapso con su cara tan roja.

—Sí, yo... —Lin'er pasó saliva y trató de hablar muy coherente, sin querer agrandar la situación. —me encuentro bien, hahaha.

¡Sistema! Devuélveme a casa, quiero llorar.❜ Gritó en su mente con la esperanza de evitar seguir pasando por esto; realmente... pensó que su etapa de niña vergonzosa había quedado en el pasado.

Cale tomó el pan con una leve sonrisa de satisfacción, pero un repentino mal presentimiento le obligó a tomar la delicada mano de la castaña con fuerza; su mente le obligó a recordar el como Lin'er había conocido al protagonista y eso le puso de mal humor. Estaba seguro de que si una situación de acoso llegaba a tales extremos en tan poco tiempo... significaba que esa escoria ya la había fichado desde antes, además...

...eso decía que, quizás, Lin'er había estado sufriendo desde que consiguió el trabajo.

Imaginarla en ese tipo de situación hacía que su ira burbujeara en la espera de traer destrucción.

SIGNAL; trash of the count's familyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora