Le ordenaron a todos los soldados que por el calor podian irse a sus casas, que algunos meses estarian descansando y despues les avisaran cuando volveran.
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Horangi entro a su departamento con bolsas de comprar y cerro la puerta detras suyo. Konig salio de su habitación corriendo a abrazarlo (si, los dos viven en el mismo departamento, en habitaciones diferentes.) El muchacho dejo caer las bolsas y abrazo al hombre que sonreia de felicidad.
Konig: Si, volviste. Te estuve esperando demasiado, ademas de que tardaste mucho.
Horangi: Jeje, lo siento es que habia mucha fila en el super. Ademas traje tus galletitas favoritas.
El muchacho saco en una de las bolsas unas galletitas con chips de chocolate. El hombre salto de felicidad mientras sonreia y abrazo de vuelta al muchacho.
Konig: Gracias, gracias, gracias.
Horangi: De nada, jeje. Pero te cumpli uno de tus caprichos no te olvides de eso.
Konig: Lo se, pero gracias.
Konig comía sus galletitas en la mesa y Horangi acomodaba las cosas en la heladera o en los almacenes. El muchacho cuando termino le robo al hombre una galleta y se la comia con una sonrisa.
Konig: Oye, que malo.
Dijo dandole un empujoncito con el codo al muchacho que se rio un poco mientras masticaba.
Pasaron horas y los dos estaban en el sofa viendo la tele, en donde el presidente estaba hablando. Horangi acostado y Konig arriba, que acariciaba la mano del chico que colgaba del sofa con la de él. El hombre suspiro con un poco de molestia.
Konig: Este presidente siempre diciendo tonterias. Dios mío.
Horangi: Si, no se porque dice tonterias tras otras y tras otras. No lo entiendo. ¿Para que es presidente?
Konig: Tienes toda la razón. No se porque sera nuestro presidente. Pero bueno, es lo que hay.
Horangi sonrio y siguieron viendo la tele.
Se hico de noche y el chico preparo la cena, unos fideos a la salsa. Mientras lo hacia el hombre lo ayudaba y bailaban un poco mientras sonreian. Terminaron de preparar la cena, pusieron los platos en la mesa y empezaron a comer.
Konig: Mmmmm~, estan riquisimos. Tuviste buena idea en hacer fideos.
Horangi: Si, tuve una idea tan genial. Te agradesco por la ayuda.Konig: No me tíenes que agradecer, solo te queria ayudar a hacer la cena.
Terminaron de cenar y Horangi lavo los platos, mientras Konig comía una manzana roja.
Era la hora de dormir y el chico intentaba que el hombre durmiera pero no lo lograba. Konig solo estaba tapado con las sabanas y con una cara molesta pero tierna, como la de un niño pequeño
Horangi: Konig, tíenes que dormirte. Mañana vas a estar muy cansado y tenemos que pasear
Konig: No, no tengo sueño. Ademas mañana podre aguantar si no duermo ahora.
Horangi: Eso no va a funcionar, vas a estar muy cansado.
Konig: Pero aguantare si no dormire.Horangi: Dios mío Konig.
Konig trago saliva y casi cubre toda su cara con la manta. Horangi se relajo, respiro hondo y se sento en la cama.
Horangi: Lo siento Konig. No te hare nada. Te cantare algo, ¿okey?
El hombre asintio con la cabeza y acomodo la manta. El muchacho se aclaro la garganta y empezo a cantar una canción de Mercedes Sosa que se llama "DUERME NEGRITO."
Horangi: Duerme, duerme, negrito~...que tu mama está en el campo negrito~...Duerme, duerme, movila~...que tu mama está en el campo, movila~...
Horangi cantaba dulcemente y Konig se quesaba dormido lentamente, mientras le cantaba. De un momento para otro el hombre se durmio rapidamente, el muchacho sonrio y le beso la frente mientras lo arropaba.
Horangi: Duerme bien, amigo mío. Yo estare contigo siempre.
Horangi se fue a su habitación y se acosto en su cama. Se durmio y sonreia un poco.
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Konig y Horangi los amigos de la infancia
Tiểu thuyết Lịch sửSon una historia de los dos personajes que se cuidan.