ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟙

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Max observó las medidas lunas que creaban los ojos de Tul cuando sonreía y por supuesto sus hermosos y delicados labios, que en estos momentos se encontraban estirados formando un bonito corazón, y no pudo resistir tomar las mejillas ajenas con sus grandes manos y acercarlo poco a poco, con el propósito de unir ambos pares de labios en un tierno beso. Sería el primer beso que le daría a su ahora novio y tenía toda la intención de que fuera un beso inolvidable y perfecto, aunque en estos momentos todo su cuerpo se encontrará temblando nuevamente después de su confesión.

—Maxi...en serio me gustas mucho— dijo Tul a pocos centímetros de su rostro, sin dejar de regalarle esa hermosa sonrisa.

El corazón de Max parecía jugar una carrera dentro de su pecho, se encontraba inmensamente feliz de haberse atrevido a confesarle sus sentimientos a su mejor amigo, a su lindo omega.

Tul-hyung, mi novio, he esperado tantos años por escuchar salir esas palabras de tu boca, que siento que me desmayare de la emoción. — Max soltó una risita nerviosa después de confesar su sentir en estos instantes, y no espero más para poder tocar esos finos labios, así que comenzó otra vez a acercarse y...

...Y despertó, observó el blanco techo de su habitación, giró la cabeza a su izquierda y encontró ese lado de su grande cama desierto, al igual que todas sus mañanas.

Empezó a recordar los detalles de su sueño y casi se pone a llorar, ¿cómo es que nunca lograba recordar lo que soñaba durante sus noches, pero recordaba todos los detalles cuando esos sueños incluían a su hyung, Tul?, se empezaba a preguntar si el en realidad era un masoquista.

Con pesadez se levantó de la cama, aunque siguiera triste por un sueño, que sabe que nunca se convertiría en realidad, él todavía tenía responsabilidades, lamentablemente ser uno de los dueños del restaurante donde llevaba la administración no le beneficiaba en lo absoluto, pues sabía que si se le cruzaba por la mente el quedarse ese día lamentando su amor no correspondido, los otros dos dueños del restaurante estarían tan preocupados por su posible secuestro o asesinato, que cuando se enteraran de lo sucedido, probablemente ellos mismos lo matarían por quedarse llorando y preocuparlos en el proceso.

Camino hasta su armario y escogió algo ligero para ponerse, unos shorts y una camiseta de manga corta, ideal para el caluroso clima que los atacaba ese mes. Por fortuna el solo estaba en su oficina dentro del restaurante y no tenía contacto con los clientes, por ello no creía necesario el vestirse muy formal.

Una vez tuvo su ropa, se dirigió a darse una refrescante ducha mientras pensaba en el trabajo que tenía para ese día, tal vez si pensaba en eso, dejaría de recordar y atormentarse con su sueño.

Una vez duchado y listo, tomó las llaves de su carro, su teléfono y la cartera y se dirigió a la cocina, no fue al cuarto de Gulf, al igual que todas las mañanas, porque el día anterior él le mencionó que saldría más temprano de casa para ir a comprar algunas cosas que hacían falta en el restaurante.

Cuando llegó, en medio de la mesa, noto un plato cubierto con plástico y una nota.

Maxi:

Salí temprano a comprar lo faltante del
restaurante, como te dije ayer.
Te deje el desayuno ya listo, no quiero que
vuelvas a tener otro accidente con el cuchillo.
Por favor no salgas de casa sin comer.
Nos vemos en el restaurante.

Dᴇsᴛɪɴᴀᴅᴏs (𝐌𝐚𝐱𝐓𝐮𝐥)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora