Adoptado

Capitulo 6

Miro a su alrededor. En una estación de policía Muggle, rodeado de Gryffindors. Solto un suspiro mientras se llevaba la mano al cabello y miraba de reojo a Regulus , tambien a Petunia , quien sorprendentemente, estaba siendo muy amable. Se preguntó, como mierda termino aquí.

Unas horas antes.

Tomo su bolso. Le había pedido permiso a Walbura para que le dejara ir de nuevo al callejón diagon, ya habían pasado 4 días desde la última vez que fue. El plan era simple, ir a una tienda Muggle por pintura. También pasaría por su antigua casa a recoger algunas cosas. Fácil.

Claro, hasta que se topo a Regulus en las escaleras, quién después de su pesadilla no lo dejaba ni respirar. Al día siguiente de que lo despertara, le contó que lo había escuchado hablar dormido, pero no quiso decir más.

-Regulus, no es necesario que vengas conmigo. Puedo cuidarme solo--afirmo mientras bajaban las escaleras.

-Voy a ir. Ya le pedí permiso a mamá para ir contigo--Se volteo a verlo.

-No entiendes! Voy a ir al mundo muggle-- susurró lo último-- No puedes venir!.

-A dónde no puede ir?-- Ambos miraron detrás de ellos. Sirius venía bajando las escaleras comiendo una manzana verde.

- No es de tu incumbencia Black--Siseo Severus antes de regresar su mirada. -- No irás. Es mi última palabra.

-Si iré y no me lo vas a poder impedir- Se planto firmemente a su lado. Gruño y comenzo a caminar de nuevo--

-Lío!--La pequeña elfina apareció con su nuevo vestido. Regulus levanto una ceja por la ropa que vestía el ser.-- Llévanos al callejón diagon, por favor --Tomo la mano del chico--Seguro que quieres ir? Aún puedes retractarte, Regulus.

-Vamos de una vez--Ambos desaparecieron frente a Sirius, quien rápidamente subió las escaleras, un plan maquinando en su cabeza.

Aparecieron en medio del callejón diagon.--Puedes irte, Lío. Yo te llamo después.--La elfina desapareció y ambos nos quedamos solos-- Iremos a cambiar dinero a gringgots

Ambos caminaron al banco. Al entrar, Severus se dirigió rápidamente al duende que lo había atendido la vez pasada--Podria cambiar dinero mágico a muggle?

-Aja--El duende saco una bolsa de su cajon-- Cada que saques dinero de esta bolsa saldrá dinero muggle, se te va a descontar de tu dinero mágico.

-Claro, puedo saber cuanto dinero tengo en mi cuenta mágica?--Severus guardo la bolsa en su pantalonera.

-Mm? Pues --El duende escribió una cantidad en una hoja de papel--  Es todo?

Severus se atragantó cuando vio la cantidad escrita--Severus, vamonos. --Regulus puso una mano en su hombro empujándolo a la salida. Severus tardo unos minutos en salir del shok.

-Sabia que tu familia era rica...pero jamás pensé que tanto--Comento mientras salían del callejón diagon. Regulus se burló de él.

-Obviamente, somos una familia que ha ido incrementando su dinero por generaciones --Dijo con orgullo. Entraron al pub y Regulus miro a todos lados, jamás había estado en ese lugar. Al salir del pub Regulus arrugó la nariz.--Que es ese olor?

-Este olor, mi amigo, es el mundo muggle. Las maquinarias, ya sabes-- Lo tomo de la muñeca. Le hizo señas a un taxi, cuando esté se paró Regulus lo miro con curiosidad.

-Y está  cosa que es?

-Un taxi, sube --Regulus se negó varias veces--Te voy a dejar aquí, Black.

Regulus entro a una velocidad sorprendente. Severus ladeó la cabeza antes de entrar. -Nos puede llevar a la hilandera?-- El taxista lo miro con molestia pero asintio. Severus sabía que la hilandera era un lugar al que los taxistas odiaban ir y con justa razón, puesto que no era un lugar muy seguro--Sabe que...mejor nos deja colina arriba, una cuadra antes-- El taxista pareció más contento y le dedico una sonrisa.