New Moon "La primera estrella que destaca"

Capítulo XV

Biblioteca Secreta 

Después de haber profanado la tumba del compañero de Yul, el decidió que no quería enterrarlo de nuevo, así que, aunque estuvimos por unos treinta minutos discutiendo, llegamos al acuerdo de que investigaríamos lo que pasó realmente. Yul dejó la tumba tal como la habíamos encontrado, luego trajimos el cuerpo a una casa abandonada que no quedaba muy lejos de nuestra propiedad.

– Ya es hora de irnos Yul, no podemos llegar tarde a Saddam – murmuré, haciendo que Yul me prestará atención, habíamos ideado un plan, se integraría a Saddam, él creía que el asesino de su compañero se encontraba ahí, así que quería tener a todos los sospechosos cerca.

– El maestro Min se va a sorprender mucho cuando me vea, aunque sigo pareciéndome igual – habló, aun observando el cuerpo de su amado.

– Excepto por los ojos raros – admití tratando de sonar un poco graciosa.

– Los tuyos también lo son – comentó girándose esta vez para mirarme fijamente.

– Yo nací con ellos así, no es algo que pueda cambiar, además los tuyos son rojos carmesíes y los míos son cobrizo...

– Cobrizo intenso, y cuando te enojas se encienden más, como si hubiera un incendio ahí – me interrumpió acercándose un poco para ver mis ojos con detenimiento.

– Cada que te acerques demasiado, te voy a hincar tus ojos, primer aviso – lo sentencie, estaba agarrando la costumbre de acercarse mucho.

– Discúlpeme doncella Park, anda, vamos a clases – murmuró dirigiéndose hacia la salida, inmediatamente lo seguí.

El cuerpo de su compañero estaba sobre una mesa, use un poco mis poderes para poder conservar el cuerpo y que no se descomponga demasiado rápido, dejé una pequeña fuente de energía convertida en frio.

......

Cuando entramos a la propiedad de Saddam, todo el mundo se asustó, dos personas vestidas con vestimenta oscura montando un caballo les hizo pensar que íbamos atacar el lugar. Mientras nos bajábamos de Shadow escuché a las señoritas hacer comentarios hacia Yul, primeramente, no lo reconocieron y se les hacia un chico guapo, inconscientemente sonreí al escuchar esos comentarios.

– Eres la nueva comidilla pequeño Yul – murmuré en forma de broma, pero cuando vi que no me respondió a esta me giré y vi que era porque estaba tratando de concentrarse para no devorar a nadie. No había pasado ni un año de su transformación y era demasiado difícil para él poder controlar sus instintos, lo entendía, porque yo había pasado por lo mismo. Que estuviera demasiado ansioso me hacía sentir sed a mí también, el vínculo señorial estaba haciendo efecto hasta en eso.

– Si no te controlas me haces tener sed a mí también – susurré, Yul llego a mi altura y dijo.

– Te prometí que no iba atacar a nadie y lo voy a cumplir.

– Solo trata de aguantar la respiración, eso ayuda.

La gente se empezó a dispersar después de la primera impresión que dimos al ingresar.

Cuando llegamos a la altura de la puerta para ingresar hacia el templo de Saddam, nos llevamos la impresión de que el maestro Min estaba ahí junto a Jeong, Seong-jin, Sunhee y Seojoon. Todos nos observaban, el Maestro Min nos miraba con ojos fulminante, mientras que los otros no entendían el hecho de que hacia Yul conmigo, porque ellos si sabían lo que él era y podía oler el miedo de dos personas.

– ¿Qué hace él aquí Hana? – preguntó el maestro Min, intercalando la mirada de Yul hacia mí.

– Hice una reverencia en forma de saludo y hablé – está retomando sus clases, maestro Min – murmuré e inmediatamente sentí como los corazones de Sunhee y Joon se aceleraron, mientras que Jeong y Seong-jin me miraban perplejos.