In my feelings

Semana 3 pt.I

Pese a lo cansado que es una gala Chiara no había podido dormir bien. La marcha de Suzete y el sentimiento de que ya cada semana sería así, el susto de la nominación de Violeta y todo lo que había pasado en esos úlitmos días le daban vueltas en la cabeza impidiendole descansar.

Se alegraba de haber hablado con la de Granada y sentía que a partir de ahora la cosas estarían mejor pero la posibilidad de que no saliesen en Navidades o de que alguna fuese expulsada antes le atormentaban. Ahora que sabía que Violeta también tenía sentimientos por ella solo quería tener la oportunidad de estar juntas, de besarle o dormir abrazadas. La posibilidad de que aquello se quedase en un "casi algo" le generaba mucha más ansiedad de la podía aguantar.

El repaso de gala fue bien. A los profesores les había gustado su actuación aunque ella pensaba que podría haber salido aún mejor. Le dijeron cosas bastante buenas y le daba la sensación de que el trío Bechirus quedaría para la historia de la edición. De reojo vió como cierta pelirroja la miraba. Era esa misma mirada que la gente que le quería le daba cuando cantaba o cuando había conseguido algunas de las metas de su vida como entrar en el ESMUC.

Después del repaso, y la pequeña bronca que les echó Noe, se metieron en la sala de Manu a escuchar los temas de la gala.

Chiara aprovecha cualquier momento para estar cerca de Violeta. Ya fuese cantarle un frase como bailar con ella, estar a su lado o cualquier interración que pudiera. Ahora, no como en los primeros días, siempre encontraba a la andaluza cerca suya, dispuesta a interactuar y a presatarle toda la atención del mundo. Lo que le hacía sentir que cada vez era más importante para ella.

Durante un rato se encontró en la mejor posición que se le podía imaginar en esa academia que era junto a Violeta y Martin, sus dos personas más importantes allí. Violeta se giró para mirarle y le puso morritos lo que hizó que se asustara un poco. Frunció el ceño y subió las cejas mirando a la chica buscando en ella alguna explicación porque lo primero que se le había venido a la mente es que la pelirroja le estaba pidiendo un beso, pero eso era imposible.

-¿Gloss?- le preguntó mientras seguía con sus labios juntos.

Chiara no estaba segura de que le saliesen las palabras en ese momento así que rebuscó en sus bolsillos y sacó el botecito del gloss pero Violeta no se lo agarró ni extendió su mano para recibirlo sino que volvió a poner morritos así la menorquina se animó a aplicarse ella misma.

Poco después la morena se puso a bailar con Cris. El chico no era mala persona y, aunque le molestó lo que había hecho, le sentía un poco apartado del grupo al que al principio a ella también le había costado. Por otra parte, esos quince eran lo únicos que en un futuro le iban a entender cuando hable de la experiencia de la academia.

Ese momento no duró mucho porque de la nada apareció Violeta para bailar con ella y apartarle del chico. Chiara hizó una nota mental de aquello para sacarlo en algún momento. Quizás lo hizó porque sabía que su relación con Cris no era la más cercana o porque estaba un poco celosilla, Chiara prefería pensar lo segundo.

Ambas chicas se había ido al comedor después del ratito en la sala de Manu, allí se encontraron con Salma que estaba un poco baja de ánimos. Se quedaron charlando con ella para tratar se subirle el ánimo o, al menos, distraerle un poco.

-Me hubiese encantado hacer la de esta semana contigo- le dijo Violeta en referencía al tema de Walk like an Egyptian.

-Ya lo sé que tu hubiese gustado, ojalá nos toque pronto- responde la aludida acariciendole el pelo a la andaluza.

Cada vez Chiara se permitía más muestras de afecto de ese tipo porque sentía que eran bien recibidas por la mayor. Pero ahora que había hablando y que tenía más claro lo que Violeta sentía por ella, su relación había cambiado un poco. Ya no era una amistad porque estaba basada, en buena parte, en la tensión y los sentimientos que había por parte de ambas. Era como es limbo que tienes con alguien que te gusta pero con quien aún no ha ocurrido nada. Chiara no sabía cuanto tiempo tendría que esperar para que pasará algo más entre ellas, aunque deseaba que no fuese mucho. Pero, por ahora, se iba a dar la satisfacción de tener esos pequeños instantes con la granadina.