baby Tokyo: capítulo 3

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No sabe en qué momento suceden exactamente las cosas para Sanzu todo es demasiado rápido.

Aún así está contento.

Siente la presión el aire la forma en la que la feromonas de Mickey vuelan a través del espacio de la habitación hasta llegar hasta los pequeños tres niños que aprenden a correr.

El Omega corre hacia ellos para tratar de abrazarlos a los tres al mismo tiempo sin importar los cuerpos ensangrentados heridos y mutilados que caen alrededor de ellos.

Sanzu solo puede morderse los labios  esperando alguna reacción de Mikey.

No tiene ninguna obviamente, incluso cuando el Omega toma a sus hijos entre sus brazos, uno de ellos, el más alto caminando a su lado  para dirigirlos hacia el auto blindado.

Ve como cada hombre de la bonten trata de borrar las huellas de lo sucedido.

Se pierde un poco en eso y en la sensación de la droga acumulándose en su cuerpo.

Pero para Sanzu es suficiente el trabajo, lo ha hecho en menos de 12 horas.

Así que se encarga del resto de las cosas por el resto de la noche.

No quiere pensar más allá de las cosas que pueden estar sucediendo con su jefe, con su rey.

No quiere pensar en el omega y sus tres hijos y las cosas que harán una vez lleguen a la mansión.

Así que se pierde una vez más en la noche.

Le deja el resto a takemitchy.

....

No parecen traumatizados es lo primero que piensa el Omega.

Ni siquiera nota si el alfa a su lado está mirándolos.

Su mirada está fija en sus tres cachorros que duermen plácidamente mientras él deja salir su aroma, el camino a la mansión es rápido ni siquiera lo nota como la primera vez que llegó. Así que con lentitud tratando de no despertar a sus bebés se mueve hacia manjirou.

El alfa parecía que ya lo estaba mirando, sus ojos que antes parecían vacíos ahora tienen esa aleta azullesca que tanto le gustaba mirar cuando eran más jóvenes.

Cuando manjirou aún no lo dejaba.

Para ser sincero el ombligo no sabe cómo sentirse al respecto agradece la ayuda pero sin embargo sabe que la razón por la que sus hijos estuvieron peligro primeramente fue por culpa del alfa.

No sabe qué pensar Pero sus instintos arraigados lo único que le permite hacer es proteger a sus hijos.

Pero también sus instintos saben que están frente al alfa al hombre que le dio a sus cachorros.

—tengo una habitación preparadas para ellos— dice el alfa.

—supongo que la cami es lo suficientemente grande para que para que estemos los cuatro, ¿No es así?.

Micke lo mira de arriba para abajo tan solo un segundo.

—Por supuesto la habitación y la cama es lo suficientemente grande para que estemos los cinco— recalca con voz suave pero firme, que no dejaba opción a debatir.

Takemitchy estaba lo suficientemente cansado como para pasar por alto esta vez lo que acababa de decir el estúpido.

Apretando los dientes dejó que Mikey tomara al más pequeñito de sus tres hijos.

Si bien los tres cachorros eran gemelos, hubo uno de ellos que se había estado escondiendo de la radiografías desde el primer momento. Tímido, así que cuando nació fue más o menos un milagro, no lo esperaba.

—¿necesitas algo en particular para esta noche?

—solo mis hijos gracias— murmuró suavemente takemitchy.

Ignoró olímpicamente la forma en que los ojos de Mickey parecieran a pagarse un poco.

Subió, doblo las esquinas, abrió puertas con suma lentitud con el alfa detrás de él caminando en completo silencio.

Extrañamente extraño a Sanzu.

Una vez llegaron a la habitación con delicadeza dejaron a los tres cachorritos encima de la cama tapándolos con una sábana.

A un vestido como si fuera una prostituta que Michel simplemente decidió sacarse los zapatos y acostarse al lado de sus bebés.

Estaba cansado sus ojos estaban hinchados y llorosos aún.

Y le daba mucho enojo pensar que sus instintos estaban calmados Gracias a que su alfa o antiguo alfa estaba ahí con él.

Así que solo por hoy decidió cerrar los ojos y dormir junto a sus cachorritos dejando al más pequeño de ellos en los brazos de su padre.

Por hoy estaba bien así.

I Have Sex (+18, mitake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora