11 // Muérdago nocturno

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Katsuki cierra la puerta de golpe apenas se retira Izuku y suspira aliviado. El simple hecho de estar cerca de esas pecas lo ponía muy nervioso, las palmas de sus manos comenzaban a sudar, se notaba un leve sonrojo y su cuerpo actuaba por si solo.

—Ugh.. maldita sea...— De pronto recordó en lo que estaba antes de que llegara el pecoso a darle una vuelta completa a su corazón y mente. —Mejor sigo estudiando.

. . .

Ese día Katsuki se fue a la cama a la hora que siempre se iba, sin alborotar el estricto horario que tenia, eso si, sin saber que terminaría sin poder dormir por estar horas pensando en cierto pecoso.

Ya era de noche, o mas bien de mañana?

El cenizo toma su celular de la mesita de noche que tenia al lado de su cama para ver la hora, 4:30AM...

Maldita sea, si que tenia harto que pensar sobre Izuku.

—ESTUPIDO DE MIERDA!!— Se grita a si mismo de la nada enojado golpeando con sus puños la cama. —Fui un maldito cobarde...— Recuerda cuando hace bastantes horas Izuku se le intento acercar y el mismo Katsuki se lo impidió por los nervios. 

"se supone que soy su novio ahora, como voy a actuar tan estúpido con el!!" Se regaña. "Esa maldita cara pecosa no me deja pensar con claridad!!!" Se cubre con ambas manos los ojos por frustración. "Si es que estoy solo con el de nuevo, esta vez no se me va a escapar." Asegura sacando las manos de sus ojos con el seño fruncido.

Se queda unos segundos mirando al techo oscuro de su habitación, con la mente en blanco.

—Agh! La puta que me pario! no puedo dormir...— Dice haciendo una mueca de desagrado. —Mejor voy a correr...— Suspira con cansancio, pero de todas formas el no iba a perder su preciado tiempo, no hoy.

Se levanta de su cama, se cambia de ropa y sale a la cancha. Hacia frio afuera y Katsuki no era muy tolerante al frio que digamos, pero no le quedaba de otra por no poder conciliar el sueño y tristemente no tener una maldita cancha entera en su cuarto.

Katsuki entra a la pista para correr y calentar un poco, va a trote lento hasta que a lo lejos divisa unos rulos verdes todos alborotados muy reconocibles y se acerca corriendo.

—Oh Kacchan.— El peliverde se percata de su presencia acercándose. —Espera, que haces despierto a esta hora?—  Conocía el estricto horario de Katsuki y que seguía al pie de la letra sin excepción alguna.

—No pude dormir.— Dice serio. —Y tu que mierda haces aquí afuera?

La imagen era algo extraña de ver, Izuku estaba sentado en el pasto de la cancha escribiendo en su cuaderno. Bueno, siempre estaba escribiendo o haciendo algo de nerd, pero no precisamente a las 4 de la mañana.

—Me gusta salir a esta hora, es tranquilo y silencioso.— Menciona con una sonrisa dulce en su cara. —Ademas no suele venir nadie, a excepción de ti ahora.— Saca una pequeña risita.

—Y que escribes..?— Katsuki intenta darle un vistazo al cuaderno de Izuku agachándose un poco y colocando las palmas de sus manos en sus rodillas, pero Deku lo aparta nervioso.

—E-E-Es algo privado Kacchan...— Izuku se levanta rápidamente del suelo y cierra su cuaderno.

—Vamos, déjame ver Deku.— Katsuki habla con un tono en broma y una sonrisa molestosa, aun intentando ojear el cuaderno.

—N-No!— Niega con su cabeza aferrando su preciado cuaderno al pecho.

—Solo un poquito!— Katsuki comienza a forcejear para quitarle el cuaderno al pecoso, sin maldad alguna simplemente jugando.

las flores de mi corazón [Bakudeku / Katsudeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora