𝑵𝒐 𝒓𝒊𝒔𝒌, 𝒏𝒐 𝒔𝒕𝒐𝒓𝒚.
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Presente
Los seis criminales; Alessandra Viale, Teresa Díaz, Lance Kelly, Lilya Novikova, Sebastian Steiner y Casey Anders, estaban en una de las cárceles más vigiladas de todo el mundo, los seis estaban en la misma sala pero cada uno en celdas transparentes separadas.
-¡Sebastian Steiner, estáte quieto, o te juro que cuando salgamos de esta mierda te hago pedacitos!
Seb, como era de esperar no paró de dar vueltas en su celda.
-Сукин сын!
-Ey, ey, calma daguitas. -Lance intentó calmar el ambiente, pero solo consiguió que Lilya lo mirase mal y ahora al que insultase fuese a él.
-¿Podéis callaros? Necesito concentrarme.
-¿En qué, Cas? ¿En un plan para salir de aquí? Me temo que es imposible. -Negó Teresa.
-No tiene porqué.
Todos se volvieron hacia Casey.
-¿Qué tienes pensado? -Volvió a hablar Teresa.
-Dentro de poco nos traerán la comida y en ese momento lo descubriréis, pero estad alerta porque en ese momento nos iremos de este sitio.
-¿De verdad tienes un plan?
-No te emociones tanto Alessandra.
Pasó poco tiempo y un agente entró con la comida de los presos, le dio la comida a todos y cuando se acercó a Casey, este le hizo una señal, el agente salió, y las celdas se abrieron detrás de él.
-Ni se os ocurra gritar o estamos jodidos.
Alessandra hizo una mueca de desagrado.
-Escuchadme, en cuanto se abra esa puerta de ahí, teneis que correr y seguir las puertas que se abren, pero lo más importante no os detengais, tenemos que llegar hasta la última puerta y cogeremos uno de los coches. -Explicó Casey.
Se escuchó un pitido, y acto seguido la puerta de la sala se abrió y empezaron a correr.
Una puerta tras otra se abría, no tenían ningún obstáculo de por medio, todos los agentes de los pasillos estaban dormidos por tranquilizantes, que el agente complice en la huida les habia suministrado a todos inclusive a los perros.
Finalmente llegaron al final del pasillo y la última puerta se abrió.
Cogieron uno de los coches que había allí, consiguieron abrirlo y sentarse.
-¡Date prisa, Lance!
-¿Te crees que no lo intento? Hacerle un puente a un coche de estas características no es tan fácil.
-Anda, quita novato y cambiame el sitio.
Alessandra consiguió hacerle el puente al coche, y pisó el acelerador para salir de allí lo antes posible.
-¡Por fin somos libres!
-Esperad, ¿Habéis oído eso? -Interrumpió Sebastian el momento.
