𝐂𝐎𝐍𝐓𝐑𝐀𝐓𝐎

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El camino al éxito nunca es fácil, así que se propuso ser siempre constante en su lucha y rodearse de amigos que puedan asegurar su meta. Sergio conocía a Iker desde que eran unos simples niños, crecieron en las mismas calles y aunque uno era de Sevilla encajaban bastante bien, fueron al mismo instituto y casi cursan juntos la universidad, pero a último minuto el sevillano decidió irse a estudiar a Estados Unidos, había conseguido una beca deportiva gracias a un contacto de su padre aquella noticia entristeció al madrileño quien no hizo más que desearle suerte y prometerse que un día se encontrarán y lograrán su sueño de ser absurdamente millonarios.

Varios años habían pasado y ahora Iker se estableció en una empresa de moda y publicidad en su querida Madrid y él por su parte había conseguido una fortuna invirtiendo en varios proyectos, ya sean inmobiliarios, franquicias, multinacionales... Todo lo imaginable, era una persona aventurera en cuanto a su trabajo respecta, por eso no tuvo miedo al fijarse en esa agencia "Real Madrid" se emociono bastante, pues si se convertía en socio sentía que estaba devolviéndole algo a la ciudad que lo acogió cuando se marchó de Sevilla.

Esa noche le llegó una invitación exclusiva por correo, así que se alistó, se compró un traje a medida y aprovecho para peinarse, llamo a su socio Guti y le pidió que lo acompañase a lo que accedió sin problemas. Una vez en la fiesta lo primero que hizo fue buscar a Cristiano con la mirada, pero al no ver rastro de él, decidió ir a tomar algo en la barra. Fue ahí donde lo vio por primera vez, un destello de cielo que se hacía presente frente a el, agradecía que ese niño no tuviera a nadie cerca ¿Sería soltero? ¿Es de España? ¿Tiene edad legal para estar aquí? Miles de preguntas se formaban en su cabeza, pero Sergio Ramos no es alguien cobarde así que alistó mentalmente un repertorio de frases para ligar y con una actitud coqueta se acercó al niño.

Esa noche estaba seguro de dos cosas, uno, que firmaría cualquier contrato que le pongan en frente para seguir viendo a ese muchacho y dos, que follaría con él.

-Pasa de mi- dijo rodando los ojos, aquello era inconcebible para él , que acaso no sabía quién era, decidió no darse por vencido, si no impresionaba al menor con palabras lo haría con acciones.

-Por lo menos deja que te invite algo- propuso el sevillano, a lo que el alemán se volteo para verlo levantando una ceja. No perdió tiempo y se presentó

-Mi nombre es Sergio Ramos- dijo

-Mesut Özil, trabajo para el Real Madrid - respondió el bajo extendiendo la mano, a lo que el mayor no perdió tiempo y se la beso. Pasaron media hora conversando y tomando, y quiso dar el siguiente paso.

-Entonces... Belleza ¿Bailas?
Se alegro al ver que Mesut accedió sin vacilar, al principio bailaba torpemente pero al pasar las canciones el espacio personal se reducía cada vez más, Mesut se pegaba a Sergio y aprovechaba cualquier oportunidad para tocar su abdomen o sus brazos tan bien trabajados, Sergio tampoco era un santo, ponía sus manos en las caderas de Özil y con la yema de sus dedos contorneaba la cintura del alemán, se estaba empezando a divertir pero todo ese ambiente se vino abajo cuando Guti y Mourinho se le acercaron, primero hablo su socio.

-¡Ostia tío, si has estado bailando toda la noche! ¡Te perdiste la presentación de la proyección de inversiones de la década!- contó su amigo- Vente, paleto que vamos a comenzar a firmar contratos- jalo a Sergio del brazo separandolo de Özil.

-Özil, que haces bailando con Sergio Ramos- regaño Mourinho a la par que se giraba para disculparse con el sevillano- Disculpelo Sr.Ramos es un muchacho y a veces no sabe lo que hace.- dijo avergonzado el portugués-Cristiano lo está esperando en la sala B- se dirigió a los españoles y en cuanto a ti- vio fijamente a Mesut quien ya se estaba esperando un regaño

𝐌𝐀𝐑𝐌𝐀𝐋𝐀𝐃𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora