NOVIO PERFECTO

Cap 10. Solpresa.

18 de septiembre del 2018....

Keys ...

—Adios keys.—Adiós, Merit— me despido de mi amiga, me trajo en su coche a mi casa, debo de revisar mis cuentas y conseguí como transportarme, pues Jey siempre se encargo de hacerlo o el chófer, pero la verda no me apetece utilizarlo, y pues creo que Luciano se olvidó de mi, y de mis nesecidades, pues el chófer no ha venido, lo estado pensando y el coche de mi madre me gusta, pero mi  pensamiento es más, como una  mi idea;  vender uno de los autos de mi padre para comprarme  una moto de cilindraje. 
Lo pienso y me rio, no más de pensar en cuanto Luciano se entere de esto.
Hoy es mi cumpleaños número 16 y ya tengo edad para manejar, por eso estoy pensando en coches, ya ha esta fecha no me espero nada de Luciano, de Jey hicimos video llamada anoche, y me canto mi cumpleaños,
entro a casa, ya es tarde, me cambio y voy a la casa de la señora Martha la madre de Jey pues Jey  me hizo prometerle que iría en cuanto llegara del instituto.

Toc, toc - toc.
Toco su puerta, la señora Adams me habré.
— Hija feliz cumpleaños.
Me envuelve en un abrazo fuerte. —Pasa pasa, te tenemos una solpresa. La señora Martha Adams, tiene tres hijos Jey de 18 y Jason de 20 que ya están en la universidad y la pequeña Lety de 10 años, viven con su esposo.  Es una casa grande y lujosa, pues la familia de Jey también tiene dinero manejando una florade navieros aqui en Detroit.

Paso y ella me invita a la cocina, tengo una sonrisa en mi pecho pues Martha es lo más parecido a una madre, dulce, simpática y me  siento querida por ella, aún después de que Jey se fuera, he pasado varias tardes aquí con ella y Lety, he aprendido hacer comidas que jamás pensé aprender, pues mi madre nunca fue de cocinar.

Hay un pastel de cumpleaños encima de la encimera, pero lo que me sorprende es:
—Feliz cumpleaños a ti,  Feliz cumpleaños a ti, Feliz cumpleaños a mi conejita...
Feliz cumpleaños para ti.
Yo me solprendo Jey viajo por mi cumpleaños.
—Jey —grito. Te extrañaba. Le digo el me abraza muy fuerte, y me da un beso dulce en mis labios.
—Dulces 16 mi conejita. —Me dice, mi cuerpo revolotea de alegría.

Cominos pastel y luego salimos a pasear por un parque, cominos pizza y charlamos, Jey me trata como si fuera su novia, me contó más sobre Pristoce y que se inclinara por arquitectura y contrucción.

Al anochecer vamos a mi casa y lo invito a ver una película.
— Entonces planeado vender el auto— Si, ya lo pensé y es definitivo—.  Le contesto muy segura a Jey, es mi herencia y tengo derecho.
—Guao Luciano arderá, con lo amargado que es—. Reímos.— Jajaja, dice Jey.
—Pues le saldrán canas— le contesto.
Jey me mira y se sonríe me dice, — ohh, ya no es más tu novio perfecto—
Me dice el, yo bajo mi mirada, sentí una punzada en el corazón, todavía me duele y más lo que me hace, no salamente murieron mis padres, yo morí para el, se olvidó de mi.
Una lágrima traicionera baja por mis mejillas, Jey la ve y la limpia.
—Sabes que no necesitas a tu adorado novio perfecto, yo puedo ser todo lo perfecto para ti— Jey es el ser más dulce, que haya conocido, me da un dulce beso y yo lo abrazo, hago mi mantra de superación con un yo puedo, yo soy.

••••••

Jey me está dando besos húmedos, mi centro ha empezado a chorrear, luego de la primera vez en el verano hemos tenido varios encuentros ya me conoce todo mi cuerpo, pues varias veses me a besado desde mis pies a mi frente, pero yo el de el aún no, pues siempre es el el que me da atencion, de más está decir que no ha habido penetración, sigo siendo totalmente virgen, he tenido el deseo de devolverle el favorcito pero no he tenido una oportunidad pues luego del verano está es la primera vez que nos vemos.

Yo lo sigo con sus besos, pues aunque tiene apenas 18 años tiene un abdomen definido y marcado es hasta musculoso, me contó  que está llendo a un gimnasio cerca a su universidad, yo me emociono un poco y termino montada encima de el a horcajadas,  le desabrocho su camisa, y se la quito, lo veo y él me está sonrriendo, me encanta cuando se deja sus cabello crecer y le salen sus rulos, yo paso mi mano por sus cabellos.
— oh conejita, estás muy ansiosa— yo solo sonrío y saco valor.  —Quiero probarte—.  !Que quieres probarme!!! —Si —
Me sonrojo pero sigo, no pienso dejar pasar esta oportunidad, soy joven e inexperta pero con Jey tengo la seguridad de aprender de todo;  las primeras veces que quiera.

—Ok, voy a dejar que me violes— se ríe. — Oye!! No te voy a violar, vas a disfrutar — el me sonríe y yo sigo.
Le suelto su broche del pantalón, lo veo a sus ojos, verdes hermosos, lo bajo poco a poco y el se alza para darme acceso a poder quitarlos, luego juego con el orillo del elástico de sus bóxer, los bajo lento pero puedo notar desde antes su gran amigo, se asoma su punta, rosada y su miembro, grande y gordo, con algunas venas que le sobresalen, pues aunque lo nuegue se que está excitado, lo puedo ver en su manera de respirar.
El ve mi inseguridad y me lleva una mano a el.
—Tocarlo, aprietalo— me dice el, y lleva su mano a la mía y me hace tocarlo y apretarlo, yo sonrrio, el me dice como le haga.
—Lubricante la mano y la bajas, y te subes, y con la punta de tu dedo gordo me acaricias la cabeza y el frenillo.—

—Me encanta este profesor—. Le digo, el me ve: —profesor sexi y guapo— jajaja reímos.
El se queda viendome y me besa, sueve y lento demostrandome lo mucho que le importó.

Yo lo suelto y sigo con mi trabajo pero mi boca se vuelve agua y me llegan las ancias de probarlo, y llevo mi boca a su falo, no soy tan inocente he leído bastante de como hacer un expectacular oral y dejarlo embobado. Me recuerdo mis clases personalizadas y me dirijo a la práctica; primero lo lamo como un helado, el jadea y gime, esta duró y venoso, después de un minuto o menos, ingreso a  toda mi boca y chupo la punta, con mi lengua le hago círculos mientras prosigo con mi labor, me acuerdo que también devia tomarle el resto del falo que no logro ingresar en mi cavidad bucal y la extimulo con mi mano ya, lubricada.
Escucho como el gime, se ha recostado en el mueble y abierto sus piernas, yo estoy arrodillada, en su frente, siento como sus músculos se contraen y como estira sus piernas, respira frenéticamente.—. Ohhh, conejita, - Ohhh— es lo único que logra decirme, luego lo veo contraerse y siento como sus testículos bonvean y derrama su semilla en mi boca, la trago toda, su sabor es dulce y al final algo amarga, lo veo a sus ojos y veo ilucion en su vista.
—Conejita estuvo genial, gracias —

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Hay ..🫣🫣🤫