Konosuba: Trabajar de forma más inteligente, no más duro

Capítulo 6: El camino de Darkness 2: Golpéame una vez más

NT: Imagen random (no tan random) hecha por IA para el capítulo. Ambos pervertidos disfrutando simplemente~.

Afortunadamente, no tuvieron que asistir a más fiestas de Alderp en el corto plazo, según Darkness. Sin embargo, tendrían que hacer una visita al capitolio tan pronto como el grupo hubiera hecho algo lo suficientemente importante como para merecer el favor real. Kazuma y Darkness continuaron con sus pequeñas sesiones de juego, aunque no progresaron más allá del tipo de estimulación que ya se daban mutuamente. No porque no quisieran, sino porque ambos coincidieron en que si iban demasiado lejos, podría causarles problemas en el futuro.

Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que la oportunidad literalmente llegara a la puerta: el Destroyer se acercaba a la ciudad de Axel, lo que provocó que se declarara una misión de emergencia. Kazuma rápidamente formó un plan y, usando todas las habilidades del grupo y algo de ayuda de Yunyun y Wiz, lograron derrotar al Destructor. Su pose de victoria al final se sintió especialmente dulce, ya que Kazuma sintió que en realidad habían derrotado una amenaza seria, y una que ni siquiera eran responsables de causar.

Él y Darkness celebraron esa noche juntos con algunas técnicas especialmente inventivas, que culminaron con ambos jadeando, desnudos y sudorosos en los brazos del otro, seguros de que pronto se ganarían el favor real que necesitaban para sus planes matrimoniales.

Por eso, cuando llegaron los enviados del capitolio en forma de un burócrata y una compañía de caballeros, Kazuma se alegró de verlos en la sala del gremio.

"¿Satou Kazuma?" Exigió la líder del grupo, una mujer de aspecto severo. "¿Eres tú quien ordenó el teletransporte de una masa de Coronatita?"

Kazuma se llenó de orgullo y dio un paso adelante con Darkness. "Lo soy, aunque en realidad no puedo atribuirme el mérito exclusivo del acto. El resto de mi grupo también ayudó. Sin ellos, nunca hubiéramos logrado deshacernos de ese Núcleo".

"Ya veo. ¿Todos admiten haber sido parte en este acto?"

"Pero, por supuesto, sin mi increíble magia de Explosión, ¡nunca hubiéramos tenido acceso a la Coronotita en primer lugar!" Dijo Megumin, haciendo girar su bastón y sonriendo con aire de suficiencia.

"¡No me olvides! ¡Disipé la barrera y di muchos beneficios! ¡Tengo diez pegatinas completas!" Agregó Aqua.

"No contribuí tanto, pero estaba orgullosa de estar junto a mis camaradas", dijo Darkness, plantándose firmemente al lado de Kazuma.

"Ya veo. Muy bien. Por la presente sois todos acusados ​​de traición. ¡Arrestenlos inmediatamente!" ordenó la mujer.

Los caballeros se acercaron, y Kazuma sólo pudo dejar escapar un grito ahogado de sorpresa, mientras Megumin retrocedía y Aqua parpadeaba confundida. Darkness, sin embargo, dio un paso adelante, espada en mano, con una mueca en el rostro. "¡Espera! ¡Cómo te atreves a presentar semejante acusación contra nosotros! ¡Salvamos a Axel y su gente con nuestra rápida acción! ¿Con qué derecho nos acusa de traición?"

"Esa misa de Coronación destruyó la mansión de Lord Alderp. Al ordenar el teletransporte, intentaste asesinar a un importante par del reino". afirmó el burócrata con frialdad. "Semejante acto sólo puede ser un acto de traición. ¡Suelta tu espada o afronta las consecuencias!"

"¡Lord Alderp no tiene derecho a imponer tal cargo!" Darkness rugió, blandiendo su espada para mantener a raya a los caballeros. "¡Cómo se atreve a enviar simples lacayos para arrestarme! ¡Esto es un insulto del más alto nivel!"