Estaba asombrado, no era la primera vez que recorría ese tramo aunque ahora era diferente, caminó a lo largo del lugar que albergaba los Motorhome de cada piloto, lo que en general era un espacio lleno de gente y ruido, ahora estaba en extremo desolado, gris, tal vez por el clima o tal vez por la horrible situación que había sucedido.
No tardaron mucho en llegar al lugar de descanso, donde antes el piloto mayor de Aston Martin solía pasar el rato, ahora ya no parecía eso, solo parecía un Camper más, frío y tenebroso, rodeado de seguridad, junto con una cinta amarilla negando el acceso.
Ambos pilotos suspiraron con pesadez tratando de mentalizarse para lo que estaban a punto de ver, uno de los que custodiaban les permitió pasar, abrieron la puerta con cautela y para su sorpresa ambos lograron mantener la compostura, suponiendo que el hecho de haber visto algunas imágenes antes les había ayudado con el shock; Carlos fue el primero en hablar y romper la atmósfera ansiosa.
-Se ve exactamente igual que en las fotos, nadie a movido nada- señaló algo curioso.
-Hay sangre...- Checo apuntó una esquina en la mesa de la cocineta donde se encontraba el líquido rojo ya seco-
Sainz sacó la foto de Fernando después de haber sido hallado y se la extendió a Pérez.
-¿Crees que ahí se haya golpeado y causado la herida en su cien?- inquirió.
-Puede ser... Pero dudo que se haya tropezado o algo así, ¿Ves el ligero dobles de la mesa? Parece que alguien lo golpeó en ese sitio repetidamente... lo que descarta un accidente- el pecoso jadeo frustrado de no haber podio encontrar algo que pudiera indicar un feo accidente en vez de un asesinato.
-Quien sea que lo hiciera no estaba dispuesto a dejarlo vivo, pareciera que tuviera mucha furia en contra Nando- respondió preocupado por la idea de que esa persona seguía esperando en la sala, junto a Charles.
Checo siguió observando y buscando por el lugar, se movió más adentro y se acercó a la cama, donde yacía la maleta de Alonso medio abierta, parecía que estaba casi empacada pero alguien había buscado algo en ella, apagó la luz, tomando por sorpresa a Carlos pero quien no cuestionó su acción, tampoco se negó cuando el mexicano le pidió su celular para alumbrar en cierto espacio en específico, no tardó mucho en saltar sorprendido por haber encontrado algo.
-¡Lo sabía!- exclamó el rizado victorioso
-¿Qué cosa?- Preguntó confundido su amigo.
-Sabía que había visto un reflejo extraño en una de las fotos aquí, mira lo que encontré- le extendió una cajita aterciopelada con un moño que tenía un broche de diamante.
El otro miró desconcertado aquel objeto, sin esperar deshizo el moño y abrió encontrándose frente a lo que temió, era un anillo de compromiso hermoso, un poco grande y exagerado para su gusto, pero sin duda era lindo, tenía muchos diamantes hermosos, era plateado y en el centro una bella esmeralda era la protagonista de aquella joya tan única. Ambos intercambiaron miradas tratando de saber si el otro poseía conocimiento de que su amigo estaba a nada de pedirle matrimonio a alguien, sí, alguien, porque hasta donde ambos se habían quedado en la vida amorosa de Fernando, por el momento no tenía a nadie, así que no sabían de quién podría tratarse.
-No-no lo entiendo...- tartamudeó el menor -¿ Tú sabías de esto?-
Checo negó con la cabeza- No tenía ni idea de que planeaba algo así- hizo una mueca extrañada- Ni siquiera sabía que salía con alguien, mucho menos que era así de serio-
La habitación se llenó de silencio nuevamente, mientras ambos buscaban en sus recuerdos algo que explicara este hallazgo y junto con eso, si tal vez eso haya sido parte del motivo de su muerte.