corrup › kookmin.

OO4

-Hyung~

Sonrió, deleitandose con lo meloso que estaba siendo su menor.

-Hyung me gusta mucho. -Se abrazó a su cuerpo, poniendo su cabeza sobre su pecho, y se restregó en él como si de un pequeño felino se tratara.

-¿Qué pasa Chimin? ¿Por qué tan cariñoso? -Acarició sus dorados cabellos y lo observó.

El rubio recargó su barbilla sobre el pecho de su hyung para poder mantener la vista sobre él.

-No es nada, solo quiero estar con hyung. -Le sonrió dulcemente.

-Uhm, ¿seguro? ¿Qué quieres, Chimin?

El rubio le dedicó una mirada traviesa y sonrió. Se colocó a horcajadas sobre su hyung y juntó sus labios, envolviendolos en un beso lento, el cual fue profundizado rápidamente por Jungkook, quien estaba en un trance debido a las extrañas acciones que estaba haciendo su novio. Sin embargo, dejó de pensar las cosas y acarició la espalda del rubio, adentrando sus manos a su camisa, tomándose la libertad de acariciarlo, provocándole miles de sensaciones.

Sintió como Jimin se estremecía sobre él, sonrió y mordió su labio inferior, robándole un suspiro.

-Hyung... -Lo llamó en un pequeño jadeo cuando acarició su cintura, bajando hacia sus caderas, en un ritmo lento y placentero.

-Me encantas, gatito.

Jimin tragó duro debido al tono ronco de su novio y al sobrenombre, ya van varias veces que su hyung lo llama así y ha sido en momentos un poco subido de tonos, justo como el que estaban teniendo ahora.

Mordió su labio nervioso cuando sintió como lo tomaba firmemente de los muslos, buscando acercarlo más a su cuerpo, si es que eso era posible.

Un dulce gemido escapó de sus labios cuando el húmedo músculo de su hyung se adentró a su cavidad bucal.
Rompió rápidamente el beso al sentir como Jungkook tomaba su lengua entre sus labios. Sintió su rostro arder y se escondió en su cuello.

-Mírame.

El rubio se removió inquieto, buscando una forma de ignorar lo que sentía cuando su hyung se ponía modo dominante.

-Jimin, te estoy hablando. -Le dió un fuerte golpe a su glúteo, dejando una sensación de ardor.

-¡Hyung! -Chilló avergonzado y lo miró con un puchero. Al momento de mostrar su rostro, fue tomado con firmeza de la nuca y sintió como sus labios eran devorados.

Gritó por la sorpresa y trató de alejarse, lo cual empeoró las cosas.

Jungkook dio vuelta en la cama, quedando sobre el rubio entre sus piernas, quien trataba de evitar el beso y lo empujaba. El castaño harto de la situación, tomó ambas muñecas con una mano y con la otra sujetó su rostro, dejándolo totalmente a su mereced.

Jadeó sorprendido cuando sus labios fueron atacados sin pudor alguno, envolviendolo en un beso salvaje, en el cual su mayor se tomaba la libertad de morder sus labios. Se sentía tan mareado debido a las sensaciones que comenzaban a crecer en su interior.

Un gemido ahogado escapó de sus labios al sentir como su hyung tomaba su lengua entre sus labios ágilmente. Se estremeció y trató de alejarlo nuevamente, pues sentía que en cualquier momento iba a tener una erección, lo cual sería sumamente vergonzoso.

Jungkook dejó de besarlo, ambos se encontraban hechos un desastre, con la respiración agitada, sus labios magullados y una gran ola de excitación corriendo por sus venas.

-Jungkook hyung... -Jadeó nervioso, queriendo alejarlo de su cuerpo, antes de que se de cuenta de su nuevo problema. Y es que él no tenía la culpa de que se sintiera tan bien sentir a su hyung sobre su cuerpo, dejándolo a su mereced contra la cama.

Sin embargo el castaño no se alejó, al contrario, sus labios se aferraron a la tersa piel de su cuello, besandola suavemente y con cuidado.

Sus brazos fueron liberados, no antes de que su hyung le advirtiera que no los moviera de su lugar.

Jungkook desprendió unos cuantos botones de la camisa blanca que portaba y se encargó de marcar sus lindas clavículas. A veces bajando por su pecho, dejando mordidas por cualquier lugar que se le atravesara en su camino.

Sus manos recorrieron el abdomen de Jimin, bajando lentamente hacia sus muslos, sujetandolos con firmeza y guiándolos hacia sus caderas, enredando las piernas del menor alrededor de su cuerpo.

Mordió su labio al sentir la dureza de su novio contra su pelvis, maldijo por lo bajo, su hyung lo deseaba, era un hecho. Un gemido escapó de sus labios cuando se restregó descaradamente contra él.

-N-no... -Logró decir entre gemidos.

-¿No? -Repitió sus movimientos, viendo cómo el rostro de Jimin se deshacía en muecas de placer, sintió como su miembro se endurecia más por la vista de su menor siendo un completo desastre gracias a él.

-M-mis papás n-no tardan en lle-llegar por mi.

-Le dije a tus papás que te quedarás a dormir.

Jimin hubiera reclamado ya que él no sabía nada, lo hubiera hecho, de no ser porque su hyung volvió a moverse contra él y a besar profundamente sus labios.

Ahora su preocupación era, ¿cómo lograría sobrevivir ésta noche? Estaba más que claro que él no era del todo inocente, también aceptaba por completo que deseaba estar con su hyung, sin embargo le avergonzaba la situación debido a que su hyung tenía una imagen de él muy diferente y lo sabía porque Yoongi le había platicado todo. Nunca fue su intención que su hyung se creara la imagen de que era sumamente inocente, él lucia así naturalmente, también su timidez era parte de su forma de ser, pero hay que alejar el ámbito sexual de ambas cosas, porque él tenía muy claro que eso lo convertía en una persona completamente diferente.