5.- Noches de pasión.

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Los días de Daemon en desembarco del rey, eran sumamente alegres para la princesa.

Todos solían hablar sobre que incluso llegarían a casarse, cosa que espantaba a el Rey, quien siempre decía "Daemon está ya casado."

La princesa Rhaenyra y el principe Daemon, se la pasaban haciendo carreras con sus dragones, comiendo juntos y leyendo juntos.

Rhaenyra incluso acompañaba a su tío a practicar con la espada.

El rey los asociaba con el principe Aemon y el principe Baelon, dos hermanos sumamente unidos, pero no era para nada el caso.

-Hoy te llevaré a un lugar especial. - prometió el principe Daemon a la princesa Rhaenyra, mientras se encontraban leyendo.

-¿Enserio?- saltó -¿A dónde?- pregunto curiosa.

El principe se acercó y le susurro en el oído.

-Es una sorpresa. - dijo, con una voz que derretía a la princesa.

Tras eso, poso sus labios sobre el cuello de la princesa, esta dejo salir un gemido de sus labios.

Daemon la miró con atención, y la princesa estaba roja de la vergüenza.

-¿Que fue eso, princesa?- preguntó con la voz grave.

-Yo... - tartamudeo, y se alejo tan rápido como pudo.

Enseguida, la puerta se abrió, Lord lecho de pulgas vio la hermosa figura de la Reina Alicent Hightower entrar.

-Rhaenyra. - la llamó.

La princesa se acercó casi corriendo y tropezó, pero se compuso de inmediato.

La sonora risa de su compañera de la infancia, Alicent Hightower, se hizo presente, junto a la de Lord lecho de pulgas. La delicia del reino, la princesa Rhaenyra Targaryen, no tardó en unirseles.

Cuando las carcajadas pararon, la Reina anunció que el Rey la llamaba como copera, y la princesa tomo del brazo a la embarazada Reina y caminó a su lado.

Ya cuando la luna y las estrellas eran lo único que iluminaba el cielo, la princesa Rhaenyra volvió a su cámara, antes de acostarse, vió una bolsa llena de ropa vieja, arrapos. Y una nota en alto Valyrio.
"Sorpresa."

La princesa sonrió como una pequeña niña, y se puso la ropa.
Entonces, el principe Daemon entró a la cámara de la princesa por una especie de puerta secreta dentro de la habitación.

Se les vió caminando y viajando por las calles de Desembarco del Rey, hasta que el principe dirigió a la princesa a una casa de placer.

Lo que realmente pasó, quedó entre los dos, y entre tú y yo, querido lector, así que más vale guardar el secreto.

La princesa Rhaenyra se vo completamente dominada por su tío Daemon, quien empezó a besarla.

Ella sintió sus labios en los suyos, e inmediatamente le dió acceso en cada parte de ella.

Él le arrancó la blusa, para así poder besar y succionar los jugosos pechos de su sobrina. Hundía su rostro en los pechos de La Delicia Del Reino y se deleitaba con los gemidos y gritos de placer que salían de su boca.

Ella, seguía agarrando su cabeza y empujándola hacía sus pechos.
Sabía que en cualquier momento explotaría. El succionaba, chupaba, lamía y besaba. Hacia chupetones en el pecho, y agarró un pezón con sus manos, y otro con los dientes.

Pero él príncipe se detuvo. Ella trato de seguir, pero él simplemente se alejo.

Ella quedó boquiabierta, mirándolo, cuando él golpeó la pared a su lado y se fue.

—¡Daemon!— llamó ella horrorizada, asustada por completo.

Sentía que se hacía chiquita, y se hubiera perdido si no fuera por qué un guardia la reconoció.

Se sentía furiosa, él la había abandonado aún conociendo que ella no tenía ni idea de dónde estaba parada.

Y cómo se enfureció al descubrir que se fué para cogerse a una puta. ¿Que la delicia del reino no era suficiente para él?, no, claro que no. Se ha cogido a muchas más, pero ninguna era tan digna, sangre de dragón. Eso se decía ella.

Yo, por mi parte, pienso que tampoco ninguna era tan hermosa como la princesa.  Incluso si Daemon Targaryen se hubiera cogido a cada mujer de los siente reinos — incluso a la bella Reina Alicent Hightower —, ninguna era tan hermosa.

Recuerden guardar el secreto.

El gran plan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora